La ecuaci¨®n de los guantes

Hace cuatro a?os, Luis Enrique reuni¨® a los porteros del filial del Bar?a antes de empezar la temporada. ¡°Nos dijo que estaba contentos con los tres porteros y que podr¨ªamos jugar todos, que deb¨ªamos ganarnos el sitio¡±, explicar¨ªa Rub¨¦n Mi?o, uno de los guardametas. Cumpli¨® su palabra el entrenador, pues el propio Mi?o particip¨® en 15 encuentros, Masip lo hizo en 12 y Oier se qued¨® en 10. Ahora, ya con Luis Enrique en el primer equipo y tras sus experiencias en el Roma y el Celta, el t¨¦cnico esgrime un discurso similar al de entonces. ¡°Me gustan los tres porteros [Ter Stegen, Bravo y Masip] y sus posibilidades est¨¢n al 33% cada uno. Estoy contento de tener tres porterazos, para m¨ª esto no es un problema¡±, expres¨® la semana pasada, despu¨¦s de la victoria ante el Helsinki. A falta de un duelo de pretemporada, el Gamper que se disputar¨¢ el lunes que viene, falta por saber qui¨¦n ser¨¢ el titular.

Se da en el Bar?a un cambio generacional en la porter¨ªa como sucediera hace una d¨¦cada, cuando primero Reina y despu¨¦s Vald¨¦s discut¨ªan el puesto a Dutruel y Bonano, que tampoco llenaban el vac¨ªo de una d¨¦cada que dej¨® el actual director deportivo Andoni Zubizarreta. Vald¨¦s, en cualquier caso, se asent¨® despu¨¦s de un rifirrafe con Van Gaal, que le hizo jugar un par de partidos y lo releg¨® al banquillo y al filial de nuevo. Castigo que no acept¨® el portero, que desapareci¨® durante tres d¨ªas. Destituido Van Gaal, lleg¨® Antic y Vald¨¦s recuper¨® los guantes para defenderlos hasta la temporada pasada. Ahora, no se intuye l¨ªo alguno, pero s¨ª se impone el cambio, toda vez que a Pinto, el segundo durante seis temporadas y media, no se le renov¨®. Y Luis Enrique no ha dado pistas porque ha repartido los minutos y los partidos entre los tres porteros.

El t¨¦cnico rot¨® a los metas cuando dirigi¨® el filial, pero no en el Roma ni en el Celta

Desde el ¨¢rea deportiva se?alan a Ter Stegen; llevan a?os estudi¨¢ndole y aseguran que encaja con las exigencias de jugar adelantado y tener buen toque para la ra¨ªz del juego, adem¨¢s de parar lo necesario. ¡°Ser nuestro portero es dif¨ªcil, uno de los grandes retos que hay en el mundo del f¨²tbol¡±, expuso Zubizarreta en la presentaci¨®n del alem¨¢n; ¡°y creemos que puedes salir bien de esta¡±. Ter Stegen recogi¨® el testigo con orgullo: ¡°El Bar?a me ha explicado la importancia que tengo para el sistema y es un honor. Funcionar¨¢¡±. Parec¨ªa resuelto el embrollo hasta que el club fich¨® a Bravo ¡ªambos por 12 millones¡ª, espl¨¦ndido en el Mundial con Chile y con cursos notorios con la Real Sociedad. ¡°Ter Stegen sab¨ªa desde el primer momento que iba a tener competencia¡±, revel¨® entonces Zubizarreta. Y Bravo tom¨® la palabra: ¡°Quiero jugarlo todo¡±. Dos porteros para un puesto. Y a la ecuaci¨®n lleg¨® Masip, impulsado por Luis Enrique: ¡°Jordi es hoy el titular porque es al ¨²nico que conozco bien. Es una cuesti¨®n que todav¨ªa tengo que analizar¡±. Y habl¨® Masip: ¡°Hay igualdad para los tres, estoy muy contento; hay que competir¡±.

Para ello ha servido la pretemporada. ¡°Es com¨²n que todos tengan sus oportunidades para ver c¨®mo se desenvuelven, es la mejor ¨¦poca¡±, explica Jos¨¦ Manuel Ochotorena, preparador de porteros de la selecci¨®n. ¡°Y m¨¢s en este caso, cuando son debutantes en el Bar?a¡±, a?ade el exmeta Santi Ca?izares. ¡°Es lo m¨¢s justo¡±, opina el exarquero C¨¦sar S¨¢nchez. Pero no se sabe qui¨¦n partir¨¢ de inicio, toda vez que Ter Stegen rindi¨® ante el Recreativo y el Niza, Bravo jug¨® bien hasta que la pifi¨® frente al N¨¢poles, y Masip no vio la pelota ante el rampl¨®n Helsinki. Zubizarreta lo tiene claro: ¡°No hay una sensaci¨®n de titulares o suplentes en la porter¨ªa como tampoco la hay en otra posici¨®n¡±. Una idea que convence.

¡°No hay la sensaci¨®n de titulares o suplentes en la porter¨ªa ni en ninguna posici¨®n¡±, explica Andoni Zubizarreta

¡°Tradicionalmente, los equipos ten¨ªan un portero titular y buscaban un segundo que no hiciera ruido¡±, argumenta Mikel Insausti, preparador de porteros del Zaragoza en los ¨²ltimos cinco a?os; ¡°pero ahora se da la tendencia a que juegue el que mejor est¨¢ o el que mejor vaya en cuanto a soluciones t¨¢cticas¡±. Ochotorena le sigue: ¡°El ejemplo fue Van Gaal en la tanda de penaltis del Mundial [cuartos de final ante Costa Rica]. Aunque no me atrever¨ªa a ser estricto con la idea, se utiliza al que mejor va. Eso ocurre en otras posiciones y no pasa nada, pero hacerlo bajos los palos parece tab¨²¡±. Toma la palabra C¨¦sar: ¡°Si un delantero falla tres goles y se le cambia, es por criterios t¨¦cnicos. Hay que acostumbrarse a que tambi¨¦n pase en la porter¨ªa¡±. Y vuelve Insausti: ¡°Adem¨¢s, ahora se trabaja mucho de forma explosiva y un portero igual ya no aguanta tres partidos en una semana¡±. Pero Ca?izares se resiste a la idea: ¡°Lo mejor es tener un guardameta n¨²mero uno que tenga la confianza del t¨¦cnico, vestuario y p¨²blico, y otro que est¨¦ preparado para cualquier eventualidad¡±.

El exceso de competencia o la suplencia tras un error deriva en ocasiones en el decaimiento de un portero. ¡°Es necesaria la competencia, pero por encima del resto de cualidades nuestra mejor arma es la confianza¡±, analiza Ca?izares; ¡°y sin ella, se establecer¨¢ un debate que solo ayuda a los rivales¡±. C¨¦sar no lo ve igual: ¡°Yo necesitaba un compa?ero que me pusiera las cosas dif¨ªciles, pero igual uno es mejor para medirse con un rival que cuelga balones y otro para evitar que el rival filtre pases a la espalda de la defensa. Y en el f¨²tbol existe la selecci¨®n natural y si alguien no puede aguantarlo¡­ pues se ir¨¢ del equipo¡±. Ochotorena completa: ¡°El inconveniente de eso es que es posible que se genera dudas, debate. Por eso creo que si un portero tiene un rendimiento elevado, decisivo, hace que la competencia no exista¡±.

Luis Enrique, por ejemplo, no cambi¨® de porteros en el Roma, donde siempre que pudo jug¨® Stekelenburg ¡ªincluso en la Coppa y la fase previa de la Europa League¡ª, ni en el Celta, donde Yoel lo jug¨® casi todo. Aunque all¨ª no todos ten¨ªan un 33% de probabilidades como en el filial y, como anunci¨® hace unos d¨ªas, en el Bar?a.