Judit Polgar anuncia su retirada

La Gran Dama del ajedrez, la h¨²ngara Judit Polgar, de 38 a?os, deja la competici¨®n. ?nica mujer que ha estado entre los diez primeros del mundo, es probable que se despida este martes desde un podio porque Hungr¨ªa se juega una medalla frente a Ucrania en la ¨²ltima ronda de la Olimpiada de Tromso (Noruega).

Concentrada con sus compa?eros en la preparaci¨®n de las partidas decisivas, Polgar ha confirmado la noticia, desvelada por The Times, pero no ha querido hacer comentarios. Sin embargo, es seguro que continuar¨¢ trabajando con su fundaci¨®n para difundir la gran utilidad pedag¨®gica del ajedrez. En 2012 ayud¨® a convencer a 415 eurodiputados para que el Parlamento Europeo decidiera recomendar la introducci¨®n masiva del ajedrez como asignatura obligatoria en los colegios de la Uni¨®n Europea. Y despu¨¦s convenci¨® al Gobierno h¨²ngaro para introducirlo en sus escuelas, aunque de momento como materia optativa.

Su biograf¨ªa empieza mucho antes de naciera. Sus padres, Clara y Lazslo, ambos pedagogos, sosten¨ªan que los genios no nacen, sino que se hacen; tambi¨¦n coincid¨ªan en que los sistemas educativos al uso eran manifiestamente mejorables y que exist¨ªa una clara discriminaci¨®n de la mujer desde la infancia; adem¨¢s, eran aficionados al ajedrez. La naturaleza depar¨® que el fruto de su matrimonio fuera exclusivamente femenino, as¨ª que decidieron llevar la teor¨ªa a la pr¨¢ctica: sus tres hijas no ir¨ªan nunca al colegio, "porque eso ser¨ªa perder el tiempo", excepto para los ex¨¢menes; iban a ser educadas en casa por ellos mismos, con el ajedrez como asignatura importante. Una parte de su m¨¦todo consist¨ªa en que Lazslo se encerraba en una habitaci¨®n con Susan, la hija mayor, lo que provocaba celos positivos en las peque?as: "Si quer¨¦is entrar ah¨ª, ten¨¦is que aprender a jugar al ajedrez", les dec¨ªa Clara.

Para minimizar el riesgo de que las tres ni?as fueran insociables, los Polgar abrieron las puertas de su casa de par en par a los ajedrecistas de la ciudad, que acud¨ªan a menudo para jugar con sus hijas. Esa actitud fue tal vez decisiva para que el experimento fuera positivo. A?os despu¨¦s, cuando las tres h¨²ngaras saltaron a la fama, pod¨ªan dar la imagen de ser tres monstruitos cuya ¨²nica destreza era visible en un tablero de 64 casillas. Pero, al conocerlas, la realidad no era as¨ª: las tres parec¨ªan totalmente normales, amables, sonrientes, bromistas y m¨¢s bien extravertidas. "Tambi¨¦n pod¨ªan haber sido genios de la m¨²sica o las matem¨¢ticas, pero elegimos el ajedrez porque es una amalgama perfecta de arte, ciencia y deporte", explicaba Lazslo.

La revoluci¨®n de las hermanas Polgar comenz¨® en la Olimpiada de ajedrez de Sal¨®nica (Grecia), en 1988. Las tres hermanas (de 19, 14 y 12 a?os) e Ildiko Madl destronaron a las sovi¨¦ticas, invencibles hasta entonces. La haza?a se repiti¨® en la siguiente Olimpiada (Novi Sad, Yugoslavia, 1990) pero lo ins¨®lito no termin¨® ah¨ª. Pronto se supo que la familia Polgar no deseaba participar en competiciones femeninas "porque s¨®lo se aprende jugando contra hombres", y que hab¨ªan disputado esas dos Olimpiadas bajo presiones del gobierno h¨²ngaro. El argumento del honor nacional y la promesa de un apoyo econ¨®mico les llevaron a aceptar pero, tras ganar las dos medallas de oro, decidieron no participar nunca m¨¢s en Olimpiadas femeninas.

Eso caus¨® un serio conflicto ante la siguiente (Manila, 1992): a pesar de proclamarse campeona absoluta de Hungr¨ªa en 1991 -uno de los mayores ¨¦xitos logrados por una mujer-, Judit fue seleccionada en calidad de suplente de la selecci¨®n masculina; y a pesar de terminar cuarta en ese mismo Campeonato de Hungr¨ªa, Susan ni siquiera fue convocada. Poco despu¨¦s, Sof¨ªa decidi¨® que no quer¨ªa ser jugadora profesional.

Pero los ¨¦xitos de Judit eran demasiado impresionantes. Logr¨® el t¨ªtulo de gran maestro absoluto a los 15 a?os, dos meses m¨¢s joven que Bobby Fischer. Su triunfo en Madrid 1994 fue el mejor resultado de una mujer en la historia hasta ese momento, superado despu¨¦s por la china Yifan Hou en Gibraltar 2012.

La lista de sus v¨ªctimas ilustres (en partidas lentas o r¨¢pidas) creci¨® tanto que lleg¨® a incluir nueve campeones del mundo: K¨¢rpov, Kasp¨¢rov, Spasski, Smyslov, Top¨¢lov, Anand, Ponom¨¢riov, J¨¢lifman y Kasimy¨¢nov. Su cumbre fue el 8? puesto en la lista mundial del 1 de enero de 2004, aunque tambi¨¦n fue impresionante que lograse el 4? puesto en Wijk aan Zee (Holanda) frente a los mejores del mundo poco despu¨¦s de ser madre por primera vez. A partir de ah¨ª, y sobre todo del nacimiento de su segundo hijo, su prioridad ya no era ganar torneos.?

Dos de sus an¨¦cdotas m¨¢s famosas son con Kasp¨¢rov en Linares. En 1994, Judit Polgar se lo encontr¨® en el ba?o de se?oras porque el ruso, acostumbrado a que el torneo hab¨ªa sido netamente masculino los a?os anteriores, lo utilizaba igual que el de caballeros. Ese mismo a?o, en la quinta ronda, un v¨ªdeo demostr¨® dos d¨ªas despu¨¦s que Kasp¨¢rov hab¨ªa hecho una jugada ilegal contra Judit para ganar la partida.?

Adem¨¢s de sus grandiosos ¨¦xitos deportivos, Judit siempre ha sido un modelo de comportamiento y buena imagen, a pesar de que ser una reina rodeada de reyes la ha hecho sufrir no pocas presiones. Por eso es, y todo indica que lo seguir¨¢ siendo durante mucho tiempo, la Gran Dama de la historia del ajedrez.