Espa?a inicia la gesti¨®n del fracaso

Con las secuelas del monumental fiasco de Brasil, Espa?a regresa a la escena marcada por aquel varapalo y consciente de que le espera una larga penitencia. De momento, el consuelo resulta imposible, se den lo resultados que se den en los pr¨®ximos tiempos. Por mucho que tenga a la vista algunos amistosos de altos vuelos, como el de hoy en Francia o con Alemania en Vigo en noviembre. Partidos trampa en los que el equipo tiene mucho que perder y no tanto que ganar. Toca medirse ante la desconfianza general y aliviar una decepci¨®n como la de Brasil llevar¨¢ lo suyo.

En Par¨ªs, una zurra como las que se llev¨® en los amistosos frente a Portugal y Argentina tras su ¨¦xito mundial de 2010, desencadenar¨ªa una tormenta de consecuencias incalculables. Y Francia no es un adversario cualquiera, mantiene el bloque del Campeonato del Mundo y cuenta con jugadores de talento, como Benzema, Griezmann, Pogba, Valbuena¡­ En Espa?a, con la resaca de Sud¨¢frica, el desplome en los amistosos de hace cuatro a?os mereci¨® la indulgencia general. Hoy, no habr¨ªa indulto alguno.

Y, mucho menos, si esta Roja deste?ida no se muestra al menos consistente en la fase de clasificaci¨®n para la Eurocopa 2016 que arrancar¨¢ el pr¨®ximo lunes en Valencia contra Macedonia. Al equipo le aguardan una serie de partidos ante adversarios sin cartel: adem¨¢s del conjunto macedonio, Ucrania, Bielorrusia, Eslovaquia y Luxemburgo. Citas que no glorifican pero pueden acentuar la crisis.

Aunque mantenga las se?as de identidad, el equipo de Del Bosque deber¨¢ ser m¨¢s vers¨¢til

Sostiene Del Bosque que Espa?a afronta una transici¨®n, no una revoluci¨®n. Es razonable, si se tiene en cuenta que la gran mayor¨ªa de los que dieron el petardazo en Brasil no solo est¨¢n en activo, sino que son punteros de primera en los mejores equipos del planeta. En la cosecha quedan jugadores titular¨ªsimos en el Madrid, el Bar?a, el Atl¨¦tico, el Chelsea, el United, el City, el Bayern¡­ Solo Villa ha dejado el f¨²tbol de ¨¦lite. Aunque el bloque sea muy similar, cabe hablar de una nueva ¨¦poca.

El f¨²tbol tiende a ser amn¨¦sico y Espa?a ya no parte con el m¨¢ximo cr¨¦dito, sino con un considerable descr¨¦dito. Una cuesti¨®n que deber¨¢n metabolizar hasta el hueso los que permanecen y los que llegan, que no lo hacen precisamente en un periodo de optimismo, lo que puede complicar su adaptaci¨®n. El seleccionador ha reclutado a jugadores que no acaban de consolidarse en sus clubes, caso de Isco, Sanjos¨¦ y Bartra, o que todav¨ªa apenas tienen recorrido en primera fila, como Paco Alc¨¢cer. Otros tienen m¨¢s pista, como Kiko Casilla, Carvajal, Ra¨²l Garc¨ªa e Iturraspe, pero habr¨¢ que ver c¨®mo se abren paso en estos tiempos.

Espa?a inicia la gesti¨®n del fracaso

Con unos y otros, el equipo asume que est¨¢ ante un cambio de ciclo, no tanto nominal, sino por cuestiones an¨ªmicas y estil¨ªsticas. Por un lado, los que en su d¨ªa gestionaron el ¨¦xito ahora deben gestionar el naufragio. En cuanto al estilo, aunque se mantengan las principales se?as de identidad, el equipo est¨¢ obligado a mezclar otras variantes, a ser m¨¢s vers¨¢til. En la era del postxavismo habr¨¢ que introducir matices.

Cuestiones todas ellas que Espa?a tendr¨¢ que ir perfilando hasta llegar a su pr¨®xima gran cita, la Eurocopa de Francia 2016. Hasta entonces, con dos a?os por delante, se sabr¨¢ si la remontada es posible y Espa?a vuelve a tener pujanza o hay que rebobinar m¨¢s all¨¢ de 2008, cuando el pesimismo era cr¨®nico. Y con motivos.