Estados Unidos se divierte con el hueso de Lituania

Fall¨® Espa?a pero cumpli¨® Estados Unidos, que jugar¨¢ el domingo la final mundialista despu¨¦s de roer el hueso de Lituania durante la primera mitad y divertirse con ¨¦l en el segundo tiempo. Es lo m¨¢ximo que le duran los rivales a los campeones. Un par de asaltos como mucho. De regreso del intermedio ya se sabe el final de la pel¨ªcula. Y que pase el siguiente, piden cita los defensores del trono ol¨ªmpico y mundial. Lituania se tap¨® de los derechazos con el cuerpo a cuerpo de Valanciunas y Motiejunas, dos p¨²giles que combaten en la NBA, y con la inspiraci¨®n de Kuzminskas en el segundo cuarto. A partir de ah¨ª fue un quiero y no puedo ante la habitual melod¨ªa de Estados Unidos cuando el contrario afloja un segundo las piernas. Defensa, robo y contraataque. Una y otra vez. Y se acab¨® el suspense. No hay emoci¨®n que valga cuando la NBA aprieta el acelerador.

El d¨ªa del nacionalismo catal¨¢n dio paso a la noche del patriotismo estadounidense. La Diada mud¨® en el recuerdo de los atentados del 11-S cuando sonaba el himno y los norteamericanos arrancaron con hambre de bal¨®n. El subid¨®n emocional se encontr¨® pronto con otro escenario. Lituania no es una cualquiera, sino la actual bronce mundial y plata europea, un conjunto con cuajo por fuera y sobre todo por dentro. Faried y Davis se toparon con una se?ora pareja de p¨ªvots cara a cara. Valanciunas (Toronto Raptors) y Motiejunas (Houston) no son unas hermanas de la caridad ni las presas f¨¢ciles de otras noches, como en cuartos ante Eslovenia. Las torres estadounidenses ten¨ªan otro partido que jugar. Mucho m¨¢s f¨ªsico, m¨¢s bailar pegados y menos danza. Lituania entraba al choque y de las sacudidas sali¨® tocado EEUU, que empez¨® a coleccionar faltas. Curry, Harden y Faried cargaron con dos cada uno en cuatro minutos.

La maquinaria de las rotaciones permite a los campeones mantener las revoluciones siempre altas

Coach K oper¨® de inmediato. Cambi¨® de actores y de lenguaje. Rose se junt¨® a Irving como pareja de bases en la direcci¨®n y Klay Thompson sac¨® la tarjeta de presentaci¨®n desde los triples. Es un asesino silencioso el escolta. Aparece cuando nadie le espera, sin hacer mucho ruido, y asesta el hachazo a distancia, sin mancharse las manos. Dos bingos suyos y otro de Irving descolocaron a Lituania mientras el fortach¨®n Cousins tomaba el relevo bajo el aro (21-16). La t¨¦cnica que se gan¨® por revolverse ante Valanciunas dej¨® claro que de ese duelo saltaban chispas.

Estados Unidos hab¨ªa puesto en funcionamiento ya la maquinaria de las rotaciones. Coach K ha conseguido hilvanar casi dos quintetos paralelos que le permiten mantener las revoluciones siempre altas, los m¨²sculos y la mente frescos, y los celos de sus estrellas bajo control. Una f¨®rmula que no supo conjugar Espa?a.

Lituania envid¨® con los gemelos Lavrinovic en busca tambi¨¦n de un cambio de rumbo. La inspiraci¨®n la encontr¨® sin embargo en Kuzminskas, que en el segundo cuarto se forr¨® con 12 puntos ¨¦l solito. Fue su acierto el que alarg¨® unos minutos m¨¢s el forcejeo. Para entonces Lituania daba ya s¨ªntomas de ahogo para equiparar la intensidad de Estados Unidos. Los resoplidos se traducen en p¨¦rdidas, carreras viendo el n¨²mero en la espalda de los rivales y pocas opciones claras de tiro (32-22, 43-35 en el descanso).

El di¨¢logo se convirti¨® en mon¨®logo en dos minutos. Los titulares volvieron con el orgullo herido y dejaron claro qui¨¦n manda. Harden enchuf¨® cinco puntos de un plumazo, y Curry y Davis bordaron un 10-0 (53-35) que acab¨® con la resistencia de los herederos de Sabonis, cobijados en unos triples que no entraron (2 de 18), fuera de pista Motiejunas por las faltas.

El parte m¨¦dico en el rival es siempre el mismo: muchas p¨¦rdidas y malos porcentajes en los tiros de campo

La m¨²sica machacona de cada encuentro se volvi¨® a repetir. Los robos ponen a volar a los velocistas y el contrario acaba por ser un equipo con la lengua fuera. El alley oop de Irving a Davis para el 61-37 fue la acci¨®n de la noche y el sello de otra exhibici¨®n de la NBA. Si acaso les motivaba llegar a la centena de puntos para conservar el promedio del Mundial, pero se quedaron al borde.

Lituania acab¨® con el mismo parte m¨¦dico que otros derrotados. La defensa estadounidense provoca en el enfermo un bajo porcentaje de acierto en tiros de campo (un 30% en esta ocasi¨®n), un pu?ado de p¨¦rdidas (21) y un descenso en el n¨²mero de rebotes (12 menos). Nadie ha encontrado el ant¨ªdoto hasta que en juego est¨¢ el oro.