Suton, gloria para un superviviente

La canasta de Goran Suton a dos segundos para el final en el Palau Blaugrana no fue una canasta m¨¢s. Le dio un triunfo sorprendente a su equipo, el Joventut, ante un rival al que no venc¨ªa a domicilio desde 2006. Pero tras esa canasta, tras la carrera profesional de este p¨ªvot de 29 a?os y 2,08 metros, subyace una epopeya vital, la de un ni?o de siete a?os que tuvo que abandonar su casa junto a su madre y su hermano para huir de las bombas que ca¨ªan sobre Sarajevo, donde ¨¦l hab¨ªa nacido en 1985, solo un a?o despu¨¦s de que se celebraran all¨ª los Juegos Ol¨ªmpicos de invierno. Con una maleta por todo equipaje, se fueron a Gornji Milanovac, una peque?a ciudad en el centro de Serbia. ¡°?bamos para dos semanas y estuvimos siete a?os¡±, recuerda Goran. Transcurr¨ªa el a?o 1992. Se hab¨ªa desatado en toda su crudeza el conflicto de los Balcanes.

Su caso, como el de otros muchos, estaba lleno de matices. Su madre Zivana es serbia y ortodoxa; su padre Miroslav, croata y cat¨®lico. Y viv¨ªan en Bosnia, adonde regresaron cuando acab¨® la guerra en 1995. Solo se encontraron ruinas y una situaci¨®n social insufrible. Jugaban al baloncesto en el patio trasero de la casa que ten¨ªan cerca de Sarajevo. ¡°Cuando se nos escapaba la pelota e iba a parar fuera de la casa, nuestro abuelo nos prohib¨ªa ir a buscarla por temor a que pudiera estallar una de las minas que hab¨ªan dejado tras la guerra¡±, declar¨® Darijan, hermano de Goran, en un reportaje publicado por The New York Times en abril de 2009.

No fue una cuesti¨®n de baloncesto. Quer¨ªamos cambiar de vida, buscar? oportunidades para poder vivir mejor¡± Goran Suton

La vida se les hizo insoportable all¨ª. Muchas personas mataban o mor¨ªan a causa de la limpieza ¨¦tnica que emprendieron algunos grupos. ¡°Vi cosas horribles, gente por la calle sin piernas... Un desastre, una tragedia¡±, dijo Darijan. La familia trat¨® en vano de encontrar a un primo de su padre, en paradero desconocido. Hab¨ªan o¨ªdo que podr¨ªa haber muerto en un asesinato en masa. Acudieron a una gran carpa donde se amontonaban los huesos. ¡°Ol¨ªa tan mal que casi vomito¡±, se?alaba Darijan. Fue la gota que colm¨® el vaso. Los padres de Goran y Darijan ten¨ªan familia en Estados Unidos y decidieron emigrar all¨ª. ¡°No fue una cuesti¨®n de baloncesto. Quer¨ªamos cambiar de vida, buscar nuevas oportunidades para poder vivir mejor¡±, matiza Goran.

Se establecieron en Lansing, Michigan. ?l ten¨ªa 14 a?os, empezaba a destacar por su estatura y hab¨ªa jugado con la selecci¨®n cadete de Bosnia, aunque su nacionalidad es croata. Poco despu¨¦s obtuvo la nacionalidad estadounidense. Pronto destac¨® en la Universidad de Michigan, donde era entrenado por Tom Izzo. En 2009, obtuvo su mayor ¨¦xito con los Spartans al llegar a la final universitaria. La perdieron contra Carolina del Norte, un equipo de estrellas que han hecho carrera en la NBA como Danny Green (San Antonio), Ty Lawson (Denver), Wayne Ellington (Lakers) y Tyler Hannsbrough (Toronto). Utah Jazz eligi¨® a Suton en el puesto n¨²mero 50 del draft. No pudo entrar en la NBA. Inici¨® su carrera en Europa: el Spartak de San Petersburgo, el Biella italiano y el Cibona y el Cedevita croatas. Hasta que el pasado verano, el Joventut se fij¨® en ¨¦l y lo contrat¨®.