Anand espanta los malos recuerdos
El indio afronta las partidas 5? y 6?, que el a?o pasado perdi¨® ante Carlsen
El ajedrez es la ¨²nica actividad en la que dos personas mantienen una relaci¨®n muy intensa durante cuatro o cinco horas seguidas sin tocarse ni hablarse. Eso contribuye a que duelan mucho las derrotas, como las que Viswanathan Anand sufri¨® hace un a?o en las partidas 5? y 6? contra Magnus Carlsen, quien le destron¨®. Ahora el indio parece m¨¢s fuerte, y tendr¨¢ la iniciativa de las piezas blancas este viernes en la 5? del Mundial de Sochi (Rusia) con el marcador empatado (2-2).
Un d¨ªa despu¨¦s de perder la corona en su ciudad natal, Chennai, Anand explic¨® as¨ª lo que le ocurri¨® en esas dos partidas aciagas: ¡°Mi objetivo durante las cuatro primeras era ganar la confianza perdida por los resultados mediocres a lo largo del a?o. Y de hecho empec¨¦ a sentir mejor¨ªa tras la 3? y 4?. Pero jugu¨¦ muy mal la 5?, y fastidi¨¦ en una partida la estrategia de todo el duelo. Tras dormir muy poco esa noche, en la 6? busqu¨¦ un empate bals¨¢mico, pero volv¨ª a jugar muy mal. Ah¨ª me sent¨ª destrozado¡±. Tanto en Sochi, como en los meses anteriores a este Mundial, Anand contesta muy vagamente a cualquier pregunta relacionada con lo que ocurri¨® en Chennai, como si lo tuviera enterrado en su memoria.
Todo indica que su estado an¨ªmico es mucho mejor ahora. Para empezar, porque el a?o le ha ido muy bien, con una victoria impresionante en el Torneo de Candidatos (marzo) a los 44 a?os, y otra de mucho m¨¦rito en la Final de Maestros de Bilbao (septiembre). Adem¨¢s, porque el martes fue capaz de ganar muy bien la 3? tras perder el domingo la 2? con un juego muy deficiente, y el mi¨¦rcoles aguant¨® la presi¨®n de Carlsen en la 4? durante cinco horas sin sufrir apenas.
F¨ªsicamente est¨¢ igual de bien que en 2013, cuando perdi¨® seis kilos antes del Mundial. Quienes le han visto ahora en el gimnasio del hotel en Sochi aseguran que hace sesiones de cierta dureza, no s¨®lo de mantenimiento. Y su programa de los meses de preparaci¨®n siempre incluye dos horas diarias de ejercicio f¨ªsico.
Anand tiene muy presente que Carlsen, de 23 a?os, alargar¨¢ todas las partidas cuanto pueda para ir minando la resistencia f¨ªsica del aspirante. El israel¨ª Bor¨ªs Gu¨¦lfand es el m¨¢s viejo de la ¨¦lite, con 46 a?os; en 2012 perdi¨® la final del Mundial frente a Anand en Mosc¨². Y ve as¨ª la importancia del fondo f¨ªsico: ¡°Cuenta poco en las primeras partidas, aunque sean largas, si hablamos de alguien como Anand, que se cuida mucho e incluye siempre el gimnasio en su preparaci¨®n. En este Mundial, al mejor de doce partidas, hay un d¨ªa de descanso despu¨¦s de cada dos; por tanto, un jugador en buena forma debe aguantar sin problemas dos partidas seguidas de cinco horas o m¨¢s. Ahora bien, el cansancio acumulado, y acrecentado por la tremenda tensi¨®n nerviosa de un duelo como este, puede ser un factor decisivo en las ¨²ltimas partidas si se llega a ellas con el marcador igualado¡±.
Por otra parte, las 43 horas que separan el final del cuarto asalto y el principio del quinto habr¨¢n sido muy duras para los respectivos equipos de analistas. Carlsen fracas¨® estrepitosamente en la apertura del tercero, cayendo en una preparaci¨®n casera de Anand. Si el noruego volviera a fallar en ese aspecto, estar¨ªa recibiendo un torpedo en la l¨ªnea de flotaci¨®n que dejar¨ªa su gran punto d¨¦bil al descubierto. Esas cuatro o cinco horas de comunicaci¨®n silenciosa pero muy intensa entre dos ajedrecistas son mucho m¨¢s llevaderas si los primeros movimientos implican poco o ning¨²n esfuerzo. El martes, Anand hizo de memoria sus primeras 24 jugadas, mientras Carlsen se retorc¨ªa en su asiento, maldici¨¦ndose por haber ca¨ªdo en la trampa.
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