Ultras de ¡°alto riesgo¡±
Entre un 20% y un 30% de los miembros del Frente Atl¨¦tico y los Bukaneros tienen antecedentes policiales La muerte de Romero Taboada lleva a los no violentos a ¡°replantearse el camino¡±
Este fin de semana s¨ª se les esperaba. El s¨¢bado se enfrentaba el Real Madrid con el Celta de Vigo en el Santiago Bernab¨¦u, y el domingo el Rayo Vallecano contra el Sevilla en Vallecas. Tres equipos con grupos ultras de extrema izquierda en su seno ¡ªlos Celtarras, los Bukaneros del Rayo y los Biris sevillanos¡ª llegar¨ªan a la capital una semana despu¨¦s del asesinato de Francisco Javier Romero Taboada, el hincha de los Riazor Blues que muri¨® tras ser apaleado y arrojado al r¨ªo Manzanares en una monumental y descontrolada reyerta entre la afici¨®n de ultraizquierda del Deportivo y la de ultraderecha del Frente Atl¨¦tico. Dos campos madrile?os tomados por la polic¨ªa, un dispositivo de 250 agentes desplegados en d¨ªas consecutivos, era la respuesta a una semana en la que las noticias del f¨²tbol parec¨ªan m¨¢s propias de las p¨¢ginas de sucesos que de las de deportes.
El Madrid expedienta a 17 hinchas por sus c¨¢nticos
El Real Madrid abri¨® ayer expediente a 17 socios del club por proferir c¨¢nticos contra el Barcelona, Messi y Catalu?a, durante el encuentro del s¨¢bado contra el Celta en el Bernab¨¦u. Esta es la primera vez que se da publicidad a una iniciativa de este tipo por parte de la direcci¨®n del equipo blanco.
La decisi¨®n se conoci¨® poco despu¨¦s de que se supiera que la Liga de F¨²tbol Profesional (LFP) hab¨ªa tomado la decisi¨®n de denunciar los c¨¢nticos ofensivos que se realizaron en ese encuentro y en el disputado en Vallecas entre el Rayo y el Sevilla (0-1). Seg¨²n explic¨® un portavoz, el organismo notificar¨¢ "ante el Comit¨¦ de Competici¨®n" los c¨¢nticos recogidos por los "informadores" presentes en algunos de los partidos de esta jornada. A partir del 15 de diciembre, cuando est¨¢ previsto que entre en vigor la nueva bater¨ªa de medidas acordada por el Consejo Superior de Deportes (CSD), Liga y Federaci¨®n Espa?ola para combatir la violencia en el f¨²tbol, comenzar¨¢n a aplicarse sanciones entre las que se encuentra el cierre parcial de gradas por c¨¢nticos xen¨®fobos, racistas o insultos.
En esta ocasi¨®n todos los encuentros fueron calificados de ¡°alto riesgo¡±. Seg¨²n los datos de la polic¨ªa, entre el 20% y el 30% de los miembros del Frente Atl¨¦tico (¡°reducido en los ¨²ltimos tiempos a un millar¡±) y de los Bukaneros (¡°unos 300¡±) tienen antecedentes policiales, en su mayor parte ¡°por lesiones, amenazas, ri?as tumultuosas, tr¨¢fico de drogas, delitos contra la propiedad...¡±. Y, aunque el Real Madrid expuls¨® a la facci¨®n m¨¢s radical de los Hammerskin ¡ªde ideolog¨ªa neonazi¡ª de sus gradas hace aproximadamente un a?o, Antonio Men¨¦ndez, El Ni?o, convertido desde entonces en l¨ªder de los Ultras Sur, entra y sale del estadio blanco con el llamado Javi ¡°el bombero¡±, despu¨¦s de haber salido de la c¨¢rcel, seg¨²n constatan fuentes policiales.
¡°Los clubes lo saben, pero no les interesa perder su foco de animaci¨®n, les regalan entradas, aunque las revenden a mitad de precio, les dejan sus espacios, les dan acceso a los jugadores...¡±, aseguran agentes expertos en ultras. ¡°El Real Madrid y el Barcelona echaron a los m¨¢s violentos, pero en el resto de equipos ah¨ª siguen¡±.
Mimetizados por la violencia, convencidos ¡ªen la extrema izquierda y la derecha¡ª de que la vida es ¡°la lucha¡±, los ultras ¡°de alto riesgo¡± son aquellos que, como El Ni?o¡± adem¨¢s de tener antecedentes penales, han llegado incluso a cambiar de colores, aunque no de ideolog¨ªa. En el caso de Men¨¦ndez, pas¨® del Frente Atl¨¦tico a los Ultras Sur, lo que a posteriori gener¨® una escisi¨®n entre los rojiblancos, que ocupan sendos fondos de su campo.
Especialistas y conocedores de estos grupos aseguran que, pese a ser pronto para percibir cambios internos vinculados a los graves acontecimientos recientes, ¡°s¨ª existe cierta disidencia, por ejemplo en el Frente Atl¨¦tico: gente no violenta que dice que no se puede seguir por ese camino¡±.
Existe cierta disidencia, por ejemplo en el Frente Atl¨¦tico: gente no violenta que dice que no se puede seguir por ese camino"
La ideolog¨ªa no se ve ni en sus actitudes violentas ni en su est¨¦tica. Unos y otros visten sudaderas y anoraks con capucha y esl¨®ganes desafiantes, zapatillas deportivas y lucen espaldas ensanchadas por horas de gimnasio. ¡°Lo ¨²nico que les distingue un poco son las drogas que consumen¡±, asegura un agente. ¡°Los de extrema izquierda son m¨¢s de hach¨ªs y pastillas, y los de extrema derecha le dan m¨¢s a la coca¨ªna¡±.
Este fin de semana no ocurri¨® nada. O mejor, ocurri¨® lo que sucede habitualmente. Que los ultrasur del Real Madrid se dieron cita en su local, el Sherwood, en las inmediaciones del Bernab¨¦u. Un templo ultra, sin signos, ni banderas, as¨¦ptico, un espacio rectangular con tres pantallas y una barra en la que se sirven cientos de botellines de cerveza.
Gran parte de la hinchada sevillista lleg¨® a Vallecas en seis autobuses, que fueron interceptados por la polic¨ªa a media hora de la capital. ¡°Hubo identificaciones, registros y advertencias¡±, se?alaba un aficionado andaluz. Pero siguieron su camino: ¡°No llevaban nada¡±, confirman fuentes policiales. ¡°Los Biris no vinieron¡±, aseguraban fuentes cercanas al equipo hispalense. Por su parte, los Bukaneros, con su cuartel general en un local de la calle Dolores Folgueras, dirigieron el estadio del Rayo desde su grada, aplaudieron a sus ¡°hermanos¡± sevillistas y se unieron con ellos en un solo grito: ¡°Frente Atl¨¦tico, asesino¡±.
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