Un 2014 en femenino

?Selecciones femeninas preparadas para luchar por el oro en baloncesto, balonmano o waterpolo? ?Una espa?ola capaz de ganar a las asi¨¢ticas en b¨¢dminton? ?Una futbolista de la Pen¨ªnsula nominada al Bal¨®n de Oro? ?Campeonas en nataci¨®n? ?Y en atletismo? Alrededor del deporte femenino espa?ol se concentran tantas preguntas cargadas de sorpresa que quiz¨¢s ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil resumirlas en una sola: ?En qu¨¦ no est¨¢n ganando las deportistas espa?olas? Este es el repaso a un 2014 sin borrones, lleno de brillos, con triunfos en deportes colectivos e individuales, al aire libre y bajo techo, en piscinas y tartanes. ?xitos basados en el talento, construidos sobre la t¨¦cnica y amplificados por un intangible que queda resumido en el apodo de las ¨²ltimas triunfadoras: a las jugadoras de balonmano, plata europea, les dicen las guerreras.

Es un homenaje a las pioneras, que lucharon contra viento y marea Ruth Beitia

¡°Estos resultados son un merecido homenaje a las mujeres de los a?os 50, a las pioneras, que lucharon contra viento y marea por sacar el deporte femenino adelante¡±, reflexiona Ruth Beitia, campeona europea de salto de altura, quien, a los 35 a?os, lleva toda una vida en la elite y puede comparar los cambios. ¡°A nivel econ¨®mico, las cosas est¨¢n much¨ªsimo peor que antes, y el que hace deporte ahora lo hace porque le gusta¡±, a?ade. ¡°Yo, que estoy superorgullosa de lo conseguido, no quiero hacer bandera de ser mujer, sino que seamos reconocidas como deportistas, como uno m¨¢s, tener la misma repercusi¨®n, independientemente de ser hombres o mujeres¡±.

En 2014, las portadas se llenaron de cuellos femeninos luciendo medallas. Las hubo en disciplinas minoritarias como el b¨¢dminton (Carolina Mar¨ªn, oro mundial). En deportes de equipo globalizados, en los que la competencia es planetaria (plata mundial en baloncesto y europea en balonmano). Las especialidades de m¨¢s prestigio, como la nataci¨®n, santo y se?a de los Juegos, tambi¨¦n tuvieron sus protagonistas nacionales: en los Europeos, las espa?olas lograron 13 medallas (Ona Carbonell y sus compa?eras de la sincronizada; Da Rocha...); triunf¨® la selecci¨®n de waterpolo (oro); y brill¨® como nadie Mireia Belmonte (seis medallas europeas y cuatro mundiales), que adem¨¢s acab¨® el curso batiendo tres r¨¦cords mundiales en piscina corta. Los cert¨¢menes m¨¢s exigentes vieron cosas casi nunca vistas: a una espa?ola coronada en atletismo (Beitia) o peleando con las mejores en 400m (Terrero, bronce) y 3.000m obst¨¢culos (Martin, bronce). Las espa?olas, adem¨¢s, ganaron en golf (Ciganda, Mu?oz, Recari y Mozo celebraron la International Crown, su Mundial), en gimnasia r¨ªtmica (Aguilar, L¨®pez, Gavezou, Mohedano y Quereda lograron el t¨ªtulo mundial de mazas) o en vela (Alabau, campeona en RSX) y por primera vez se clasificaron para un Mundial de f¨²tbol, lo que le vali¨® a Vero Boquete la nominaci¨®n para el Bal¨®n de Oro.

¡°Siempre hubo explosi¨®n femenina, pero los medios de comunicaci¨®n estaban m¨¢s pendientes de lo que ocurr¨ªa en el deporte masculino¡±, dice Beitia. ¡°Los deportes de equipo no ten¨ªan la misma repercusi¨®n que tienen ahora, y segu¨ªan siendo campeonas... pero ahora los chicos no est¨¢n al cien por cien¡±, a?ade. ¡°Ha habido un gran baj¨®n en el f¨²tbol masculino; los de waterpolo eran imparables y ahora son las mujeres; en el balonmano, las chicas; en el baloncesto... esa es la explosi¨®n. Los Juegos de 2012 fueron el punto de inflexi¨®n¡±, cierra, recordando que el 65% de las medallas espa?olas (11 de 17) fueron femeninas. Dos a?os despu¨¦s, se mantiene la tendencia: las espa?olas han roto todas las barreras.