Fernando Torres, el regreso m¨¢s esperado
El Atl¨¦tico cierra la vuelta del punta a la espera de que Cerci confirme su marcha al Milan
Cerrado el acuerdo con el Milan por el que Alessio Cerci jugar¨ªa cedido en la entidad lombarda hasta junio de 2016, la vuelta de Fernando Torres al Atl¨¦tico de Madrid es la historia de un regreso con una fuerte carga emocional por lo que supusieron en su d¨ªa su aparici¨®n, su consagraci¨®n y tambi¨¦n su salida. Siete a?os y medio despu¨¦s de su marcha al Liverpool, tras pasar por el Chelsea, y tras esta ¨²ltima y breve cesi¨®n al Milan, el canterano volver¨¢ al Atl¨¦tico, donde siempre confes¨® que retornar¨ªa. Jugador y club han hecho un esfuerzo en el apartado econ¨®mico para que sus caminos vuelvan a cruzarse. La operaci¨®n solo podr¨ªa truncarse si Cerci, pretendido por el Inter, se negara a jugar en el Milan. Adriano Galliani, director general del club italiano, dio por cerrado el mi¨¦rcoles por la noche el acuerdo que incluye al exjugador del Torino. Entre hoy y ma?ana se rematar¨¢n los ¨²ltimos flecos.
Simeone busca recuperar el contragolpe con el punta, de 30 a?os
Torres se fue del Atl¨¦tico con 23 a?os y regresa con 30 para afrontar la recta final de su carrera con un contrato que le unir¨¢ al club en el que se form¨® por lo que resta de temporada y la siguiente. En su vuelta se entremezclan los sentimientos de afecto rec¨ªprocos, la necesidad de Simeone de recuperar el contragolpe y la expectaci¨®n por el rendimiento que ser¨¢ capaz de ofrecer. El c¨®ctel contiene todos los ingredientes ilusionantes de los regresos deseados, pero tambi¨¦n sus dificultades. Ni Torres es el mismo jugador que se march¨®, ni el club se asemeja al que dej¨® en 2007. Por entonces, el futbolista estaba por encima del nivel deportivo de la entidad. Ahora, Torres regresa a uno de las mejores versiones del Atl¨¦tico de la historia y ¨¦l necesita darle un impulso a su carrera tras un par de temporadas apagado. Hay la sensaci¨®n de que o recupera su da?ina verticalidad en el Atl¨¦tico o no lo har¨¢ en ning¨²n sitio. Las dudas que pueda generar su regreso no est¨¢n en su cabeza o en su coraz¨®n, sino en sus piernas, en saber si su poderosa zancada volver¨¢ a ser determinante.
Cuenta con el viento a favor de su calado entre el sentir de la grada y el empe?o que ha puesto Simeone para que regrese tras el intento fallido de este verano. El rol que desempe?ar¨¢ ya se lo ha transmitido el cuerpo t¨¦cnico. Ante la presencia de Mandzukic, El Ni?o ser¨¢ un futbolista importante, pero no en todos los partidos. Mandzukic ha cambiado el estilo ofensivo del equipo, m¨¢s ambicioso en t¨¦rminos de jugar en campo contrario y tener una mayor posesi¨®n de bal¨®n, pero Simeone quiere m¨¢s alternativas ofensivas. Con el delantero croata, cuando el Atl¨¦tico se repliega para defender en campo propio no tiene un futbolista que lo estire jugando en largo. Que Torres regrese, no significa solo una vuelta al pasado para ¨¦l, tambi¨¦n lo es para el estilo del equipo.
Torres emergi¨® con el Atl¨¦tico penando en Segunda Divisi¨®n. Debut¨® en el Calder¨®n ante el Legan¨¦s el 27 de mayo de 2001. Fue Garc¨ªa Cantarero el que le di¨® la alterntaiva. Luis Aragon¨¦s le dio la alternativa y se preocup¨® de pulirle los controles en carrera y la definici¨®n. Ante las turbulencias financieras y deportivas que azotaban a la entidad, la grada adopt¨® al Ni?o como un s¨ªmbolo y un cimiento de esperanza sobre el que sostenerse en esos d¨ªas tan oscuros en la historia del club. Con apenas 17 a?os y el rostro moteado de pecas que resaltaban sus aires de juvenil, tuvo que soportar desde el primer minuto la presi¨®n de ser la bandera del Atl¨¦tico. La hinchada le reconoci¨® desde el primer d¨ªa como uno de los suyos y lo esgrimi¨® como motivo de orgullo: colchonero hasta el tu¨¦tano y con una dimensi¨®n internacional fuera de toda duda. La temporada siguiente a su debut, el Atl¨¦tico regres¨® a Primera. Cuatro cursos sin obtener la clasificaci¨®n para la Champions y una jugosa oferta del Liverpool, de 35 millones de euros, propiciaron su marcha tras marcar 91 goles en 244 partidos. Torres quer¨ªa volar m¨¢s alto y el club necesitaba el dinero. Fuera de Espa?a se consagr¨® como internacional con la conquista de dos Eurocopas y el Mundial de 2010.
En su periplo por Inglaterra, Torres marc¨® 81 goles en 141 partidos con el Liverpool, pero no conquist¨® ning¨²n t¨ªtulo con los reds. En el mercado invernal de 2011 se fue al Chelsea por 59 millones de euros, el traspaso m¨¢s caro de la historia entre clubes de la Premier. Con los blues disput¨® 172 encuentros, marc¨® 45 tantos y conquist¨® la Champions y la Copa inglesa. Ya campe¨®n de Europa y del mundo con Espa?a, ni bajo la direcci¨®n de Villas Boas, ni bajo las de Di Matteo y Mourinho, Torres logr¨® afianzarse en Stamford Bridge. Su breve paso por el Milan tambi¨¦n respond¨ªa a un viejo anhelo, por la admiraci¨®n que siempre le despertaron Van Basten y el club rossonero. Desde all¨ª, condenado al ostracismo por el t¨¦cnico Inzaghi, ha encontrado el puente definitivo para culminar un regreso muy esperado.
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