Una odisea de 17 horas
Nani Roma fue remolcado 679 kil¨®metros por un cami¨®n de asistencia, detenido por la polic¨ªa
La madrugada del pasado domingo quedar¨¢ marcada en la memoria de Nani Roma como una de esas noches en las que la calamidad te abraza para no desaparecer. Pasaban tres minutos de la una y cuarto de la madrugada cuando un Mini cubierto por un manto anaranjado, fruto de un ba?o de arena insoportable, hac¨ªa su entrada en el vivac de Villa Carlos Paz. Arrastrado por un todoterreno, en su interior, al actual campe¨®n de la prueba no se le escapaba ni una mueca del rostro. El tormento vivido hasta completar la etapa hab¨ªa acabado por agotarle f¨ªsica y mentalmente. Abandonado a su suerte en el kil¨®metro 10 de la primera especial, un problema con la bomba de aceite hab¨ªa tirado por tierra todas sus opciones de revalidar el t¨ªtulo. "No es el mejor d¨ªa de mi vida, ni mi mejor Dakar, pero es lo que hay. Es muy duro, el hecho de empezar la primera especial y que en el kil¨®metro tres tengas un problema...", resum¨ªa Roma con un tono de voz que se apagaba a medida que pronunciaba cada palabra. Minutos antes, tras ser consolado por Sven Quandt, director del equipo Mini, se ech¨® a llorar. Este lunes, al menos, pudo disputar la segunda etapa y llegar 22?, 32? en la general.
Ha sido una paliza, pero se tiene que aceptar, es parte del juego" Nani Roma
El d¨ªa anterior, el problema con el aceite hab¨ªa sido detectado siete minutos antes de que detuvieran el coche. Decisi¨®n que tanto Roma como Perin, su copiloto, tomaron como medida de precauci¨®n para tratar de evitar que la aver¨ªa inicial generase males mayores. "Intentamos cambiar los sensores, no sab¨ªamos exactamente lo que era y ten¨ªamos muchas dudas. Probamos todo y no sali¨® nada", a?adi¨® el piloto de Folgeroles. Pasaron tres horas hasta que el cami¨®n de asistencia lleg¨®. En ese momento, solamente hab¨ªan recorrido los 144 kil¨®metros del primer enlace (el tramo que va desde la salida de etapa hasta el comienzo de la especial cronometrada) en un tiempo cercano a las tres horas.
Una vez amarrado al remolque, los da?os del coche complicaron todav¨ªa m¨¢s el traslado del Mini. Sin frenos ni direcci¨®n, controlar el movimiento del veh¨ªculo result¨® una tortura. Adem¨¢s, durante el camino de vuelta, la nube de arena levantada por el cami¨®n envolv¨ªa totalmente el coche, complicando todav¨ªa m¨¢s el regreso al vivac. "Hemos estado cuatro horas haciendo la especial con una nube de polvo. Nos han pasado camiones y no nos ve¨ªan", se lament¨®. Como culmen, la polic¨ªa argentina detuvo el cami¨®n que remolcaba al espa?ol, que tuvo que ponerse en contacto con los organizadores del Dakar para que pudiera seguir su camino.
Los mec¨¢nicos repararon el coche del catal¨¢n 30 minutos antes del plazo l¨ªmite
El resumen final de tiempo que complet¨® Roma desde la salida hasta la llegada refleja la agon¨ªa vivida por el piloto espa?ol. De los 833 kil¨®metros totales s¨®lo pudo completar por s¨ª mismo 154, y fue arrastrado durante los 679 restantes, en un total de 16 horas y 58 minutos. "Ha sido una paliza, pero se tiene que aceptar, es parte del juego. Estos d¨ªas hemos hablado de lo satisfechos que est¨¢bamos de este Mini, de las alegr¨ªas que nos hab¨ªa dado, pero a veces la mec¨¢nica es caprichosa y pasan estas cosas", se sincer¨®.
Antes de su entrada, todo el equipo Mini se hab¨ªa concentrado para desplegarse lo m¨¢s coordinadamente posible alrededor del veh¨ªculo. Ocho mec¨¢nicos, completamente de negro, preparados para tratar de encontrar el problema en de un coche del que dispon¨ªan muy poca informaci¨®n. Fue verlo y lanzarse bajo sus tripas. El tiempo corr¨ªa en contra de los mec¨¢nicos que deb¨ªan reparar el coche antes de que le llegase el momento de arrancar en la etapa de ayer. Finalmente los mec¨¢nicos de la marca alemana no repararon a tiempo el 300 del catal¨¢n, al que tuvieron que hacer un motor nuevo, por lo que sali¨® una hora y media m¨¢s tarde del tiempo que se hab¨ªa fijado. De hacerlo en el puesto 16, el objetivo inicial, pasaron a hacerlo desde el 88. ¡°Ha sido muy duro. Nos ¨ªbamos encontrando con muchos coches parados pero m¨¢s lo fue el otro d¨ªa¡±, confes¨® el catal¨¢n, que lleg¨® en 22? lugar a la l¨ªnea de meta en un nuevo mal d¨ªa.
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