En el ecuador de la tercera etapa
El Dongfeng lidera la flota desde el inicio de la regata ¡ñ El Mapfre navega segundo en una primera parte sin apenas viento
La tercera etapa de la vuelta al mundo a vela, de 4.670 millas entre Abu Dabi y Sanya (China), llega al ecuador de la prueba con el Dongfeng de Charles Caudrelier como l¨ªder de la flota. A poco m¨¢s de 2.000 millas para la l¨ªnea de meta, la flota navega por el golfo de Bengala con muy poco viento. Todos los barcos buscan estar en la mejor posici¨®n antes de llegar al complicado y temido estrecho de Malaca, un paso clave en el recorrido de esta 12? edici¨®n de la Volvo Ocean Race.
El Dongfeng chino contin¨²a en primer lugar despu¨¦s de 12 d¨ªas y busca hacer historia en caso de ganar la etapa, cuya meta est¨¢ en la ciudad de Sanya, sede del equipo. El Mapfre navega segundo y el Team SCA cierra la flota a casi 100 millas del equipo chino.
El Mapfre, mejora su rendimiento
El equipo espa?ol contin¨²a con su progresi¨®n y desde hace unos d¨ªas que vieron la oportunidad de recuperar la diferencia respecto con el grupo de cabeza, los de Xabi Fern¨¢ndez no han dado un respiro.?Ha sido en el golfo de Bengala, tras pasar al sur de Sri Lanka, donde tras una remontada se han colocado segundos y pelean mano a mano con el Abu Dhabi, que est¨¢ tercero a 2 millas de su popa y con el?Brunel, cuarto a 4 millas.
El objetivo de la embarcaci¨®n en esta tercera etapa es conseguir estar en el podio como declaraba poco antes de la salida el brasile?o Andr¨¦ Fonseca. A bordo del Mapfre, la tripulaci¨®n contin¨²a adapt¨¢ndose al ritmo de regata, y desde tierra Iker Mart¨ªnez analiza la situaci¨®n y dice estar contento de c¨®mo est¨¢ navegando el equipo.?
La nota negativa en el barco es que uno de los miembros de la tripulaci¨®n, el franc¨¦s Anthony Marchand, ha estado sin salir a cubierta las ¨²ltimas horas, por fiebre y malestar general, s¨ªntomas que lo han tenido fuera de guardia. Desde tierra, el m¨¦dico del equipo est¨¢ en contacto con el barco, ha pautado el tratamiento que Marchand tiene que seguir y est¨¢ realizando el seguimiento de la evoluci¨®n del tripulante.
Primera parte sin viento
El pasado 4 de enero, los seis barcos del Volvo Ocean Race zarpaban desde Abu Dabi bajo unas condiciones meteorol¨®gicas adversas, con una densa niebla que imped¨ªa ver a m¨¢s de cincuenta metros y una intensidad de viento que apenas alcanzaba los seis nudos. Con una previsi¨®n de vientos flojos para los primeros d¨ªas, la salida del golfo de Om¨¢n y cruzar el estrecho de Ormuz hasta el mar Ar¨¢bigo no fue tarea f¨¢cil. Durante las primeras 48 horas, la poca distancia entre las embarcaciones hac¨ªa que cada parte de posiciones fuese diferente, y es que con tan poco viento y tan poca distancia entre barcos, todo depend¨ªa de qui¨¦n gestionase mejor cada racha y cada calma.
Durante la primera semana, estos vientos ligeros o muy flojos favorecieron que la flota navegase pr¨¢cticamente junta durante la mayor parte del recorrido. Esta situaci¨®n no permit¨ªa a los equipos recurrir a ninguna t¨¢ctica para conseguir despegarse del resto y, en su defecto, algunas tripulaciones como la del Brunel intentaban ganar ventaja realizando maniobras en la oscuridad, sin encender luces que desvelasen sus movimientos. Y as¨ª fue como una noche en un silencio absoluto, los Bekking consiguieron ara?ar 3,5 millas al l¨ªder, el Dongfeng, tras un cambio a ciegas de las velas de proa.
Pasada la zona de exclusi¨®n de Ir¨¢n, un lugar lleno de obst¨¢culos y de limitaciones para navegar ¡ªcomo lo demostraban los cazas iran¨ªes que dibujaban la zona de exclusi¨®n en el aire¡ª, la costa de Pakist¨¢n dej¨® algo m¨¢s de viento a la flota. Sin embargo, la suerte no pareci¨® acompa?ar al Mapfre, que cay¨® a la cola de la clasificaci¨®n tras quedar atrapado con varios pl¨¢sticos enganchado en la quilla, lo que oblig¨® al equipo a realizar maniobras de marcha atr¨¢s para deshacerse de lo que estaba enganchado. Algo similar les ocurri¨® a otros equipos como el SCA o el Brunel, cuyas tripulaciones mostraban su pesar por el estado en el que se encontraban las aguas costeras de Pakist¨¢n e India. Desafortunadamente, las bolsas de pl¨¢stico y las l¨ªneas de pesca son muy claras y no se puede ver si est¨¢n enganchadas. La organizaci¨®n de la regata ya advert¨ªa antes del inicio de la prueba del riesgo que supon¨ªa los aproximadamente 300.000 barcos de pesca se calcula faenan a lo largo de la costa india, una de las zonas m¨¢s peligrosas del mundo para la navegaci¨®n.
Una decisi¨®n importante?
Poco a poco, la flota fue acerc¨¢ndose a Sri Lanka, el punto donde todos pensaban pod¨ªan empezar a marcarse las primeras diferencias importantes. El canal entre la India y la antigua Ceil¨¢n provoc¨® que la fuerza del viento aumentase de intensidad, permitiendo a los barcos navegar por primera vez a unos veinte nudos con el agua barriendo la cubierta de las embarcaciones.
Mientras tanto, en el equipo espa?ol se comenzaba a pensar en que pronto habr¨ªa que tomar una decisi¨®n importante: por d¨®nde dar la vuelta a la esquina. Sri Lanka cuenta con monta?as de gran altura, y el pico de Monte Pedro, de 2.524 metros, arroja una sombra de viento que puede alcanzar, apuntaba el control de regata, las 120 o 150 millas. Navegar cerca de tierra puede significar menos viento y desventes importantes, pero si la decisi¨®n es alejarse, implica tener que recorrer m¨¢s millas.
La flota navega por el golfo de Benengala. La temperatura sube y no hay ni una nube en el cielo. Tras navegar con viento fuerte, m¨¢s de veinticinco nudos las ¨²ltimas horas, las previsiones no son muy buenas. Los pr¨®ximos tres d¨ªas ser¨¢n dolorosamente lentos, con una brisa de 2-3 nudos, como dec¨ªa en el diario de a bordo Bouwe Bekking, patr¨®n del Brunel.
Posiciones: 03:40 CET
1/ Dongfeng Race Team; 2/ Mapfre; 3/ Abu Dhabi Ocean Racing; 4 / Team Brunel; 5 / Team Alvimedica y 6 / Team SCA
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