¡°Nos queda para siempre la emoci¨®n de ese segundo¡±

Gasol, de principio a fin, en una noche ¨²nica. Pau palme¨® el bal¨®n inicial del All Star, en emotivo duelo con su hermano, y Pau rebote¨® la ¨²ltima canasta en juego para el 163-158 final, con victoria del Oeste, un marcador r¨¦cord, exagerado, desbordante, como todo lo acaecido estos d¨ªas en Nueva York con el All Star de la NBA. Por encima de los n¨²meros, de nuevo las emociones, concentradas en los dos hermanos espa?oles, distintos, ajenos al paisaje del gran espect¨¢culo, como si lo sucedido en el Madison fuera una cuesti¨®n familiar. Y para la historia, un momento breve, pero intenso, el del salto inicial, una foto inolvidable.

¡°Ha sido algo muy bonito, un momento muy especial. A Marc simplemente le dije: ¡®Felicidades y a por el bal¨®n¡¯. Me lo llev¨¦ yo, pero eso fue lo de menos. ?l gan¨® el partido, que es lo m¨¢s importante. Lo que queda es la emoci¨®n de ese segundo¡±, coment¨® feliz Pau tras el duelo, todav¨ªa ba?ado por el sudor, a la nube de informadores que buscaban sus palabras.

¡°No estoy acostumbrado a tantas emociones. Esto en Memphis no me pasa. Me he levantado todo lo que he podido, que no es mucho, en el salto inicial, sobre todo para no quedar mal en la foto. Pero por encima de todo queda la sensaci¨®n, lo grande del momento, algo que no se repite¡±, a?adi¨® su hermano Marc, tambi¨¦n sin pasar por la ducha, acosado por decenas de periodistas.

Ser¨ªa dif¨ªcil encontrar en todo el Madison a dos tipos m¨¢s felices y risue?os que los Gasol, a pesar de que sus n¨²meros estuvieron lejos de sus mejores noches. Por muchas cosas, desde el detalle m¨¢s ¨ªntimo, como la presencia, por primera vez, de Julia, la hija de cinco meses de Marc, en la grada, hasta el m¨¢s resonante, como es el hecho de que dos hermanos, y espa?oles, saltaran por primera vez a la pista como titulares del All Star de la gran competici¨®n del baloncesto mundial.

¡°Ha ganado el baloncesto. Esto ha sido un hito no s¨®lo para nosotros, sino, sobre todo, para mucha otra gente, para muchos aficionados. Este escenario, Nueva York, el All Star¡­ Espero que la afici¨®n espa?ola se haya sentido orgullosa¡±, declar¨® el mayor de los Gasol, quien, para no romper su racha, tambi¨¦n marc¨® un doble doble (12 rebotes y 10 puntos). ¡°El baloncesto agradecer¨¢ lo que ha sucedido esta noche. Los que han crecido con mi hermano, con Navarro y con tantos otros, deben grabar en la memoria lo que aqu¨ª ha pasado. Yo, desde luego, pienso hacerlo¡±, explic¨® Marc.

Mientras hablaba, un periodista mostr¨® con su m¨®vil al peque?o de los dos hermanos una foto del salto inicial. ¡°Nadie me hab¨ªa dicho que iba a estar ah¨ª. No me gusta verme en las fotos, apenas tengo en casa, pero espero que esta sirva para que muchos ni?os vean que no hay nada imposible. Sobre todo, quiero disfrutar de este momento, disfrutarlo por todos ellos¡±, a?adi¨®.

Consumados los cinco d¨ªas de festejos del All Star, repletos de actos comerciales y culminados con el partido-fiesta de este domingo por la noche, vuelve la competici¨®n a la NBA, el segundo tramo de la temporada. Las apuestas comienzan a cruzarse a la espera de un nuevo duelo entre hermanos, entre Chicago y Memphis, en las finales. ¡°S¨®lo s¨¦ que mi pr¨®ximo partido es en Portland. Es lo ¨²nico que s¨¦ con seguridad del futuro. Eso s¨ª, reconozco que ser¨ªa maravilloso poder jugar la final, y hacerlo contra el equipo de mi hermano¡±, se?al¨® Marc. ¡°Veremos qu¨¦ pasa. Quedan muchos partidos y todos tenemos que ver c¨®mo volvemos a la competici¨®n tras este fin de semana tan largo y agitado. Veo complicada esa final, pero ser¨ªa una cosa estupenda. Ahora s¨®lo quiero pasar unos d¨ªas con la familia y cargar las bater¨ªas¡±, dijo Pau.

En el momento de la despedida, cuando los guardaespaldas de la NBA comenzaban a impacientarse, Marc se despidi¨® con un recuerdo para los suyos: ¡°Para mi familia, que siempre est¨¢ ah¨ª, y sobre todo, para los amigos de la infancia que han podido venir, la gente que siempre est¨¢ a tu lado, la que, por encima de todo, te despierta sentimientos, como mi hija. S¨®lo de pensar que estaba ah¨ª, vi¨¦ndome, me emociono¡±.

Menos sentimentales, m¨¢s m¨¢quinas, m¨¢s inhumanos, Russell Westbrook (Oklahoma), del equipo del Oeste, y LeBron James (Cleveland), del Este, fueron los mejores del encuentro, con unos n¨²meros, esta vez s¨ª, acordes con la fiesta que se vivi¨® en el Madison. Westbrook anot¨® 41 puntos, a s¨®lo uno del r¨¦cord que estableci¨® Wilt Chamberlain en 1962 y tambi¨¦n uno por encima de la marca de Michael Jordan en 1998. James dej¨® su marcador particular en 30 puntos.

¡°Es un honor estar junto a esos jugadores, sobre todo en un partido como el All Star¡±, se?al¨® Westbrook. ¡°No se me ocurre nada mejor. Jugar en el Garden, con este p¨²blico que tanto sabe de baloncesto. Representar a este deporte y a mi equipo es lo mejor que me puede pasar¡±, a?adi¨® James.