El fin de Ultras Sur, la c¨¢rcel de Soto

Antonio Men¨¦ndez, conocido en el entorno de Ultras Sur como El Ni?o Skin, llegaba en avi¨®n a Madrid desde Colombia el pasado domingo. Obsesionado con su f¨ªsico, tatuado ¡ªesv¨¢stica incluida¡ª y curtido en gimnasios, consumidor habitual de anabolizantes ¡ªentre otras sustancias¡ª, su culto al cuerpo le hab¨ªa llevado hasta el pa¨ªs latinoamericano para someterse a sendas operaciones de cirug¨ªa est¨¦tica. Una ¡°lipoescultura¡± de abdomen y una rinoplastia, despu¨¦s de haber pasado 10 de sus 31 a?os parti¨¦ndose la cara dentro y fuera del Fondo Sur del estadio Santiago Bernab¨¦u.

Hab¨ªa comprado el billete con el pasaporte de un primo suyo, ya que sus antecedentes penales le imped¨ªan salir de Espa?a. Su vuelo hizo escala en Lisboa y aterriz¨® en el aeropuerto de Barajas a las 16.30 de la tarde, con la faja puesta y los drenajes de la operaci¨®n reciente. All¨ª le esperaban varios agentes de la Polic¨ªa Nacional. Se lo llevaron detenido por en¨¦sima vez ¡ªprevio paso por el hospital ¡°para unas curas¡±-¡ª pero esta ocasi¨®n ser¨ªa la definitiva, la que acabar¨ªa con todos sus orgullosos m¨²sculos en la c¨¢rcel de Soto del Real (Madrid). Y la misma y simult¨¢nea suerte correr¨ªan sus amigos del alma, de quinta y de grada, Javier Oviedo Gonz¨¢lez ¡ªconocido como El Bombero¡ª y Daniel Fern¨¢ndez Amor, El Cani. Sus detenciones e ingreso en prisi¨®n suponen el fin de Ultras Sur.

La Operaci¨®n Ariete ¡ªdesarrollada por la Brigada Provincial de Informaci¨®n de Madrid en el peor momento de los movimientos ultras en Espa?a, cercados tras el reciente asesinato a palos de un hincha de Riazor Blues¡ª, se inici¨® por una denuncia por extorsi¨®n realizada en la comisar¨ªa de Vallecas el pasado mes de septiembre. Culmina as¨ª un proceso progresivo de decadencia de la facci¨®n de extrema derecha ¡ªOutlaw¡ª ligada al Real Madrid. Pero, en realidad, fueron ellos mismos los que sembraron la semilla de su destrucci¨®n.

¡®El Ni?o¡¯ fue detenido al llegar de Colombia, donde se hizo dos operaciones est¨¦ticas

Su ca¨ªda en picado comenz¨® en noviembre de 2013, cuando los m¨¢s altos dirigentes del club merengue, conscientes de que hab¨ªan perdido el control sobre la hinchada m¨¢s radical, optaron por expulsarles del estadio. Aquellos d¨ªas se hablaba de ¡°guerra civil¡± entre los Ultras Sur, de ¡°golpe de Estado¡±. Eran los tiempos de ?lvaro Cadenas y Jos¨¦ Luis Ocha¨ªta, dos legendarios del Fondo Sur. O mejor dicho, eran los tiempos en los que su liderazgo comenzaba a ser cuestionado por las nuevas generaciones. Cansados de ser los cachorros, de no llevarse un duro de su bar-sede Drakkar ¡ªdesde entonces Sherwood¡ª ni del merchandising y de partirse la cara en nombre de sus l¨ªderes, se enfrentaron a ellos a golpes ¡ªliderados por El Ni?o¡ª en las proximidades del estadio. Y ganaron. Pero s¨®lo en la calle, porque su violencia, su radicalidad ideol¨®gica y su desobediencia, hicieron a los directivos del club blanco temerse lo peor y, para evitar males mayores, cortaron por lo sano: les echaron.

Desde entonces han vagado por la noche madrile?a con los aires y el postureo de los matones, como porteros de las discotecas del grupo Kapital (Kontrol 34), trapicheando con sustancias ¡ª¡°anabolizantes y estupefacientes¡±, seg¨²n la polic¨ªa¡ª y dando rienda suelta a su impulsiva agresividad en cuanto cre¨ªan que lo requer¨ªa la ocasi¨®n. Pero no solo.

Han protagonizado tambi¨¦n violentos altercados contra sus hom¨®logos del Atl¨¦tico de Madrid, como cuando en la Nochevieja de 2014 asaltaron la sede rojiblanca, el Bar Durat¨®n, li¨¢ndose a palos y navajazos con quien encontraron a su paso. Entonces hubo tres heridos por arma blanca, uno de ellos muy grave.

Todos esos episodios han sido compatibles durante a?os con la gesti¨®n del Sherwood, con lujosas vacaciones compartidas en Ibiza y con sus empleos y negocios hosteleros. En muchas ocasiones ¡°porque sus v¨ªctimas retiraban las denuncias por miedo ¡ª¡°El Ni?o no perdona¡±¡ª o porque llegaban a un acuerdo econ¨®mico con ellas¡±, aseguran los investigadores, que les siguen desde muy cerca hace una d¨¦cada.

Javier, El Bombero, 35 a?os de musculatura anabolizada y con un historial delictivo que inclu¨ªa ¡°tentativas de homicidio¡± en sus d¨ªas libres, segu¨ªa acudiendo sol¨ªcito a las emergencias por incendios que llegaban al Ayuntamiento de Madrid. Sus compa?eros le describen como ¡°un t¨ªo muy profesional, trabajador y responsable¡±. El domingo, horas antes de ser detenido en su casa de Villalbilla (municipio pr¨®ximo a Alcal¨¢ de Henares), en presencia de su mujer y de su hijo de un a?o, se preparaba para entrar de guardia el lunes. ¡°No opuso ninguna resistencia¡±, cuentan los investigadores, que recuerdan que tambi¨¦n trabajaba como portero de discoteca para las empresas de seguridad de Luis Carlos Manzanares, el conocido empresario de la noche al que se le encarg¨® parte de la seguridad del Madrid Arena en aquella tr¨¢gica macrofiesta de Halloween en la que murieron cinco chicas aplastadas en una estampida de gente.

Una denuncia por extorsi¨®n en Vallecas llev¨® a la detenci¨®n de los hinchas

A Daniel Fern¨¢ndez Amor, El Cani, le fueron a buscar a casa de su madre, donde viv¨ªa, en un piso cercano al Paseo de la Florida. ?l, con 33 a?os, era quien hasta ahora regentaba el Sherwood y trabajaba tambi¨¦n como portero de discoteca para la misma empresa que sus colegas.

Ya en el hospital, el domingo, detenido y con el torso desnudo, El Ni?o segu¨ªa buscando su reflejo en los espejos y cristales que encontraba a su paso, como si las esposas no fuesen con ¨¦l. Su familia le esperaba en su casa de Boadilla del Monte, pero nunca lleg¨®. S¨ª lo hicieron los investigadores que se toparon ¡°con una aut¨¦ntica farmacia¡± que delataba todas sus adicciones. Lo mismo ocurri¨® en el caso de sus compinches, a los que tambi¨¦n se les requisaron diversas cantidades de estupefacientes.

Acostumbrados a la impunidad y a un vertiginoso tren de vida, entre los tres ¡ªcon la ayuda de otros dos conocidos, tambi¨¦n detenidos¡ª volvieron a intentar sacarle 10.000 euros a un viejo amigo vecino de Vallecas ¡°bajo amenazas de agresi¨®n¡±. Llov¨ªa sobre mojado y este denunci¨®. Ya antes le hab¨ªan robado haci¨¦ndose pasar por polic¨ªas y derribando su puerta con un ariete, el mismo que da nombre a esta operaci¨®n que pone el punto final a la larga historia de Ultras Sur.