L¨ªmites, Spock y una pelea
La esperanza de vida ha aumentado en nuestro pa¨ªs m¨¢s de 40 a?os en un siglo. En tan breve espacio de tiempo la hemos duplicado y las causas son diversas, abarcando desde motivos sociales hasta sanitarios. Si esta tendencia se mantiene, la mitad de los ni?os que nacen ahora llegar¨¢n a los 100 a?os. La pregunta es pertinente: ?existe un l¨ªmite? ?En el siglo XXIII, por ejemplo, el ser humano vivir¨¢ doscientos a?os? Como la mente va a veces por libre, me viene a la cabeza otra noticia reciente sobre la pelea por bajar de dos horas en el marat¨®n. Y confirmo c¨®mo se parece la vida al deporte y el deporte a la vida. Siempre buscando el l¨ªmite, nunca dejando de intentar sobrepasarlo. En otro salto mental, recuerdo lo que cuenta el gran Alex Rovira, en su conferencia Creer, crear, lograr. Expone Rovira con el ejemplo de Roger Bannister, que los limites est¨¢n m¨¢s en nuestra cabeza que en ning¨²n otro lado. Bannister fue el primer corredor que corri¨® la milla en menos de cuatro minutos, uno de esos supuestos topes inalcanzables contra el que se llevaba a?os chocando. Muchos lo intentaron y siempre terminaban en fracasos, por lo que se pens¨® que quiz¨¢s nos hall¨¢bamos ante un l¨ªmite de nuestra especie. Lo curioso del caso fue que en cuanto lo logr¨® el corredor ingl¨¦s, en muy pocos meses unos cuantos atletas lo hicieron tambi¨¦n. El problema no estaba en las piernas, sino en la creencia que aquello era inalcanzable.
Hablando de creencias, cree nuestro gobierno que Zapatero ha sido desleal e inoportuno reuni¨¦ndose con Ra¨²l Castro en La Habana. Y como cada vez que este partido pol¨ªtico acusa a otros de este tipo de comportamientos, de ser agoreros, pesimistas, ver siempre el vaso medio vac¨ªo y resultar nocivos con la marca Espa?a, mi mente viaja al periodo 2004-2008, la primera legislatura de Zapatero, en la que el ya entonces expresidente Aznar, ese dechado de patriotismo, ese buenrollista profesional, se lo pas¨® viajando por el mundo practicando su ingl¨¦s y echando pestes de todos y de todo lo que estaba pasando en Espa?a. Curioso observar como la memoria llega hasta donde uno quiere hacerla llegar. Es evidente que la de nuestro actual partido gobernante no va m¨¢s all¨¢ del 2004 por lo que creo que necesitan un Roger Bannister que les libere de ese l¨ªmite temporal.
27/02 Viernes
Me marcho a Par¨ªs a pasar el fin de semana, que tener una mujer artista tiene sus ventajas. Vueling decide que el horario elegido para aprovecharlo al m¨¢ximo (de viernes por la ma?ana a domingo por la noche) es demasiado y decide unilateralmente cambiar la hora del vuelo de las doce de la ma?ana a las seis de la tarde. Como con las lentejas, las opciones que te dan ante esta situaci¨®n son que, o bien te las comes, o te las dejas. Ayer hablaba de l¨ªmites, hoy me pregunto donde est¨¢ el nuestro con las compa?¨ªas de bajo coste.
El caso es que ceno en una taberna donde al ser viernes, d¨ªa de partidos en la liga francesa, tienen puesta la tele. Eso s¨ª, sin volumen, lo que sin duda agradezco. En esto aparece en la pantalla una imagen entra?able para m¨ª. Es Marcelo Bielsa, el loco Bielsa, exentrenador del Athletic, ahora en el Marsella. Intento averiguar por su gestualidad si ha ganado o ha perdido, pero me resulta imposible. M¨¢s que nada porque como viene haciendo desde que decidi¨® ser entrenador, levanta muy pocas veces la cabeza y la mayor parte del tiempo habla m¨¢s para el micr¨®fono que para la audiencia. Aparece el resultado. Han ca¨ªdo en casa contra el Caen (2-3) y despu¨¦s de liderar la liga muchas semanas, ahora se encuentran terceros a cuatro puntos del Lyon y a tres del PSG. Da igual. Poco habr¨ªa cambiado en Bielsa con un 4-0. Lo s¨¦ porque tuve la fortuna de asistir en directo a su rueda de prensa despu¨¦s de uno de esos partidos ¨²nicos, sobre todo en simbolismo, que ha jugado el Athletic en su historia. Me refiero al 2-3 en Old Trafford frente al Manchester United, recuerdo para la eternidad. Acababan de jugar un partido soberbio en un m¨ªtico estadio, donde ganaron en el campo y en las gradas. Pues aquel Bielsa era el mismo que he visto hoy. Qu¨¦ gran entrenador, pero ?qu¨¦ tipo m¨¢s raro, vive dios!
28/02 S¨¢bado
Vaya hombre, se ha muerto Spock. ?Pero no viv¨ªan los vulcanos casi 200 a?os? Est¨¢ claro que su parte humana, la de su madre Amanda Grayson, ha podido m¨¢s que la de su padre, el embajador Sarek. Bueno, realmente el que ha fallecido ha sido Leonard Nimoy, pues Spock (se?or Spock en versi¨®n castellana, Mister Spock en el ingl¨¦s original) es y ser¨¢ inmortal. En fin, que se nos ha ido un gran icono cultural del siglo XX, las orejas probablemente m¨¢s famosas de la historia de la tele primero y del cine despu¨¦s (a su altura s¨®lo se me ocurre las de Yoda). Ya s¨®lo queda esperar el homenaje que le deber¨ªan rendir pr¨®ximamente en The Big Bang Theory.
Yo sigo por Paris, donde durante el agotador d¨ªa de turista/paseante que me he pegado (no conozco otra ciudad en el mundo donde sea tan bonito simplemente andar por sus calles) no ha dejado de ver franceses con camisetas, gorras y bufandas con su gallo bien plantado. Como sab¨ªa que no es d¨ªa de futbol de selecciones, la otra opci¨®n para tanto aficionado estaba clara: jugaba su selecci¨®n de rugby. M¨¢s concretamente frente a Gales. Tengo que reconocer que he sentido algo de envidia. Frente al monopolio exclusivo del f¨²tbol como deporte capaz de este tipo de movilizaciones que vivimos en nuestro pa¨ªs, resultar¨ªa muy saludable que al menos en ciertas ocasiones, alguna otra disciplina tuviese ese seguimiento. S¨¦ que es una causa perdida, pero bueno, so?ar es gratis.
¡°Sobran atletas, faltan artistas¡±. Lo dice Ivano Balic, ilustre balonmanista croata que jug¨® varios a?os en Espa?a y que en una encuesta de la Federaci¨®n Internacional ha sido considerado el mejor jugador de la historia. Balic habla de balonmano , pero esta frase podr¨ªa ser exportable a otras muchas disciplinas. No se trata de ponerse nost¨¢lgico, sino de constatar una realidad. La mejora f¨ªsica ha sido brutal en los ¨²ltimos tiempos, y condiciona muchas disciplinas de una manera no vista anteriormente. Sin entrar en debates sobre ¨¦pocas, hubo un tiempo donde con la t¨¦cnica era suficiente, sin necesidad de que tu f¨ªsico fuese destacable. Ahora, si no est¨¢s cachas, olv¨ªdate. Esto no explica en su totalidad la frase de Balic, pues habr¨ªa que introducir el factor estilo. Y como sigue siendo m¨¢s dif¨ªcil crear que destruir, pues en lo primero interviene el talento, proliferan apuestas donde la clave est¨¢ en el m¨²sculo, no en la capacidad art¨ªstica. Guste o no, esto es lo que hay.
01/03 Domingo
Llego a Madrid y me encuentro con un ¨¢rbitro de la ACB. Le pregunto de donde viene y me dice que de mi pueblo, donde se ha jugado el derbi Bilbao Basket-Baskonia. Cuando estoy a punto de montarme en el taxi le hago una se?al de qu¨¦ tal, y su gesto es de normalidad. Yo ya sab¨ªa que los hombres de negro hab¨ªan ganado claramente, pero mi sorpresa lleg¨® de camino a casa, cuando el taxista me dice algo as¨ª como ¡°vaya la que se ha montado en Bilbao¡±. ?Y eso? Pues ha habido una pelea multitudinaria. Busco el v¨ªdeo en mi tel¨¦fono y all¨ª est¨¢, una tangana en toda regla. Joder, menos mal que todo hab¨ªa sido normal.
Los m¨¢s puristas se aprestan a subrayar el da?o que hace al deporte situaciones e im¨¢genes como estas. Yo no lo creo, m¨¢s que nada porque entiendo que el aficionado es suficientemente maduro para distinguir las churras de las merinas. No resultan justificables y desde luego se merecen una sanci¨®n, pero cada cierto tiempo resultan inevitables y ah¨ª est¨¢ la historia para confirmarlo. Tanto contacto, tanta tensi¨®n, tanta mecha a punto de hacer estallar el polvor¨ªn... La cuesti¨®n no est¨¢ en evitarlas totalmente, pues para eso tendr¨ªamos que vivir en un mundo ideal, sino en afrontarlas con la suficiente autoridad como para que se dilate el tiempo entre una y otra, sabedores todos lo que les puede deparar comportamientos de este tipo.
Y claro, como cada vez que ocurre un hecho as¨ª, los medios hacen memoria y aparecen listas de hechos parecidos acaecidos anteriormente, que quedaron inmortalizados con sus respectivos v¨ªdeos. Trat¨¢ndose de baloncesto, pues no pod¨ªa faltar lo ocurrido hace ya 32 a?os, en un Madrid-Bar?a donde fui protagonista. Es lo que tienen estos hechos, que pasan a formar parte de la memoria colectiva y te convierten en justo reh¨¦n de tu poco ejemplarizante comportamiento.
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