¡°Solo quieren hacerse fotos conmigo amigos y familiares¡±

Si el discurso pol¨ªtico se ha llenado durante los ¨²ltimos a?os de met¨¢foras futbol¨ªsticas, no es extra?o que estas aparezcan tambi¨¦n en actos relacionados con deportes minoritarios. "Lo que ha hecho Lucas es como cuando la selecci¨®n espa?ola gan¨® el Mundial de f¨²tbol. Adem¨¢s, el trofeo se parece". El presidente de la Federaci¨®n Espa?ola de Deportes de Invierno, May Peus, se refer¨ªa as¨ª este martes en la sede del Consejo Superior de Deportes a la haza?a lograda por Lucas Eguibar el pasado domingo: a sus 21 a?os se proclam¨® campe¨®n del Mundo de boardercross. Y eso que sigue viviendo?junto al mar, en su San Sebasti¨¢n natal, en un pa¨ªs sin tradici¨®n de nieve y sin pistas adaptadas a su joven ¡ªes ol¨ªmpica desde 1998, cuatro a?os despu¨¦s de su nacimiento¡ª?modalidad de carreras sobre tablas de nieve. ?l se lo toma con mucha calma y humildad. Cuando le recuerdan que, mientras ¨¦l se convert¨ªa oficialmente en el mejor del planeta en su modalidad, medio pa¨ªs segu¨ªa el cl¨¢sico Barcelona-Madrid, Eguibar se encoge de hombros: "Aunque coincidi¨® con un espect¨¢culo tan grande, se ha visto mucho en todos los medios. Estoy muy contento".

Como no entreno tanto en nieve, tiro m¨¢s del f¨ªsico que de la t¨¦cnica¡±

Si bien el tambi¨¦n campe¨®n del Mundial Junior en 2013 y diploma ol¨ªmpico en los Juegos de Sochi en 2014 ¡ªcon un s¨¦ptimo puesto¡ª admite que lo que le ha faltado es "tocar m¨¢s nieve" durante el a?o, asegura que ha suplido esta carencia "tirando m¨¢s del aspecto f¨ªsico que de la t¨¦cnica". Entiende, eso s¨ª, que el siguiente paso l¨®gico ser¨¢ trasladarse a donde tenga monta?as cerca. "Es necesario. Si me dedico a esto, tengo que entrenar cada d¨ªa y si me tengo que ir lejos, yo sin problema. Siempre estoy encantado de estar en la nieve", sonr¨ªe.

Victoria de Lucas Eguibar en Veysonnaz. / TURI SKI

En el boardercross, de cuatro a seis competidores se baten en velocidad sobre sus tablas, sorteando saltos y pasando a izquierda o derecha de las postas. Las colisiones y ca¨ªdas no son infrecuentes. "Es lo que llama de este deporte", se jacta Eguibar, "saber que un error puede suponer la diferencia entre quedar sexto o quedar primero. Es de riesgo, de impacto". ?Y no es cruel para el deportista? "No, no, no. Porque es como eso que se dice del rugby, 'un deporte de bestias jugados por caballeros'. Respetamos mucho al contrario e intentamos no jugar sucio".

Eguibar reflexiona unos segundos cuando se le plantea qu¨¦ representa su victoria para este deporte, y responde, seco: "Esperanza. Una muestra de que hay gente aqu¨ª que puede conseguir grandes cosas"

"De momento seguimos hablando de un deporte muy minoritario", prosigue, "los que me paran para hacerme fotos son solo amigos, amigos de amigos y familiares. Estoy encantado de que la gente me vea y me siga, claro. Yo mismo he tenido siempre ¨ªdolos. Como Alex Cullin [el australiano que pod¨ªa haberle arrebatado el t¨ªtulo mundial si ganaba en la ¨²ltima carrera, pero qued¨® tercero]. Cuando entr¨¦, ¨¦l lo estaba ganando todo. Le llevo admirando much¨ªsimos a?os, y espero poder ganarle m¨¢s veces a partir de ahora".

El donostiarra tiene claro el ingrediente principal de la receta para seguir superando a los?riders?de otros pa¨ªses con m¨¢s tradici¨®n: "Competimos con pa¨ªses como Austria, Estados Unidos o Canad¨¢, en los que los chicos nacen con una tabla debajo del brazo, viven en la nieve. Nosotros no tenemos eso. Pero por falta de ganas no va a ser".