Cadena perpetua para Aaron Hern¨¢ndez, estrella de la NFL

La vida de la exestrella de f¨²tbol americano Aaron Hern¨¢ndez, de 25 a?os, acab¨® poco despu¨¦s de las 10 de la ma?ana de este mi¨¦rcoles, cuando un jurado le declar¨® culpable de asesinato en primer grado, tras un juicio de nueve semanas ampliamente seguido por la prensa estadounidense. En el Estado de Massachusetts donde fue juzgado, este cargo implica de forma autom¨¢tica la cadena perpetua sin opci¨®n a la libertad condicional.

Aunque, en realidad, la promisoria vida del que fuera el ala cerrada de los New England Patriots, con los que lleg¨® a jugar una final de la Super Bowl, hab¨ªa empezado a desmoronarse en el momento en que fue arrestado por la muerte de un conocido y antiguo jugador semiprofesional de f¨²tbol, Odin Lloyd, de 27 a?os, en junio de 2013.

Lloyd, que fue el novio de la prometida de Hern¨¢ndez, Shayanna Jenkins, apareci¨® muerto por seis disparos en un campo cerca de la casa de Hern¨¢ndez en North Attleboro, Massachusetts. Hern¨¢ndez acababa de firmar en aquel entonces un contrato por 40 millones de d¨®lares con su club, sellando el comienzo de una nueva vida para un joven de origen puertorrique?o que parec¨ªa as¨ª haber superado de forma definitiva una infancia y adolescencia en dif¨ªciles circunstancias familiares, en la empobrecida y complicada ciudad industrial de Bristol, Connecticut.

Mientras escuchaba "culpable", sus manos temblaban y miraba hacia donde su madre y su prometida lloraban desconsoladamente

Pero nada m¨¢s ser arrestado, y sin querer esperar a conocer la culpabilidad o inocencia de la hasta entonces joven promesa de la NFL, los Patriots le rescindieron el lucrativo contrato, acabando de un plumazo con quien promet¨ªa convertirse en la pr¨®xima historia de ¨¦xito deportivo. En estos dos a?os, han ido surgiendo nuevos episodios oscuros, incluido otro posible asesinato doble, que han dado un vuelco radical a lo que paerc¨ªa ser una historia de superaci¨®n personal.

La aparente impasibilidad con que Hern¨¢ndez, de 25 a?os, atendi¨® todo el juicio le abandon¨® en los ¨²ltimos minutos, cuando el jurado ley¨® el veredicto que no le dej¨® a la juez otra opci¨®n que enviarlo tras las rejas por lo que le queda de vida.

Mientras se escuchaban uno tras otros los cargos de culpabilidad, sus manos, que fueron esposadas nada m¨¢s sonar el primer ¡°culpable¡±, comenzaron a temblar fuertemente. Y aunque Hern¨¢ndez trataba de mantener el gesto imperturbable, no pudo evitar mirar repetidamente hacia donde su madre y su prometida lloraban desconsoladamente. Al otro lado de la bancada, tambi¨¦n la madre de la v¨ªctima, Ursula Ward, lloraba en silencio.

Aunque los abogados de Hern¨¢ndez apelen la sentencia,este todav¨ªa podr¨ªa ser juzgado por la muerte de dos hombres a los que presuntamente mat¨® de varios disparos a la salida de un club nocturno en 2012, un caso con el que fue relacionado despu¨¦s de su arresto por el asesinato de Lloyd y por el que fue encausado en mayo del a?o pasado.