M¨¢rquez y la t¨¢ctica de Jerez

Marc M¨¢rquez es mucho m¨¢s que una mu?eca extrovertida, m¨¢s que un cuerpo de goma que se descuelga de la m¨¢quina. Es todo cabeza. Adem¨¢s del equipo que tiene detr¨¢s, que le apoya y le anima en sus decisiones. Como aquella vez, hace pr¨¢cticamente un a?o, en la que quiso arriesgar con dos paradas en la sesi¨®n de clasificaci¨®n del s¨¢bado, en lugar de una, como hac¨ªan todos sus rivales. Fue en el GP de Espa?a del a?o pasado, en Jerez. El circuito, no demasiado largo (4,4 km), se prestaba a la prueba: sacar el m¨¢ximo partido de esos 15 minutos en los que se concentraba la lucha por la pole. Y, como acostumbra, arriesg¨® y gan¨®. Se apunt¨® la primera posici¨®n de la parrilla y lo hizo con el tiempo que logr¨® en el ¨²ltimo intento. Lo mismo ocurri¨® este s¨¢bado en Argentina.

Esta vez hab¨ªa unos cuantos metros m¨¢s por recorrer ¨Cconcretamente 4,8 km tiene el circuito de Termas¨C, pero el desgaste al que est¨¢n sometidos los neum¨¢ticos por el asfalto del trazado argentino, que se estren¨® en el calendario mundialista hace solo un a?o, era motivo suficiente para hacer el intento. El piloto de Honda sab¨ªa que las gomas m¨¢s blandas a su disposici¨®n (el compuesto duro, pues tambi¨¦n disponen de uno extraduro expresamente para esta carrera) eran excelentes a una vuelta, pero poco ¨²tiles despu¨¦s. La vida de ese neum¨¢tico de clasificaci¨®n era de apenas tres vueltas. As¨ª que mejor apostar por hacer dos paradas en el garaje y disponer no de dos, sino de tres gomas nuevas y frescas para atacar el cron¨®metro.

En la carrera, Jorge y Valentino tendr¨¢n un gran ritmo y ser¨¢n duros rivales¡± Marc M¨¢rquez, piloto de Honda

As¨ª lo hizo. Y aprovech¨® cada una de sus salidas. Fue el m¨¢s r¨¢pido en la primera vuelta lanzada. Y r¨¢pidamente regres¨® a su garaje. Lo hizo tambi¨¦n Aleix Espargar¨®, igual de avispado, aunque algo menos veloz con su Suzuki. Cuando ambos volvieron a la pista todav¨ªa ten¨ªan nueve minutos por delante para completar la haza?a. Mejoraron sus tiempos. El primero m¨¢s que el segundo, claro. Lo hizo el campe¨®n del mundo en unas cuatro d¨¦cimas. Y volvi¨® a repetir la t¨¢ctica. Al igual que Aleix. El primero exhibi¨® su insultante velocidad ¨Cqu¨¦ m¨¢s da si el de Argentina es, sobre el papel, un trazado de curvas r¨¢pidas, m¨¢s adecuado para las Yamaha¨C y baj¨® otro medio segundo (1m, 37'8s); el de Suzuki sigui¨® picando piedra, como durante todo el fin de semana, exprimi¨® su goma m¨¢s blanda (la del compuesto de dureza media, concesi¨®n de las open), y defendi¨® su segunda posici¨®n con u?as y dientes.

Termin¨® Espargar¨® a medio segundo de M¨¢rquez. Y m¨¢s contento que unas casta?uelas: ¡°Estamos muy contentos, es la tercera carrera y ya estamos en la primera l¨ªnea. Este proyecto es todav¨ªa muy nuevo, nos falta potencia, pero estamos cada vez m¨¢s cerca¡±, dijo. Aunque sabe que la carrera ser¨¢ otra cosa. ¡°Esta vez utilizamos una estrategia diferente. Aleix tambi¨¦n lo ha hecho y se ha demostrado que fue la elecci¨®n correcta¡±, declar¨® M¨¢rquez nada m¨¢s bajarse de la moto. El domingo ser¨¢ distinto. Cuando los pilotos oficiales calcen sus neum¨¢ticos extraduros los tiempos bajar¨¢n y nadie sabe con certeza cu¨¢nto resistir¨¢n, mucho menos cu¨¢nto aguantar¨¢n los duros, los que llevar¨¢n las Ducati. Lo sab¨ªa Iannone, que termin¨® tercero: ¡°No ser¨¢ f¨¢cil¡±. ¡°En la carrera Jorge y Valentino [quinto y octavo, respectivamente] tendr¨¢n un gran ritmo y ser¨¢n duros rivales¡±, apunta M¨¢rquez, modesto. Pero nadie parece tener mejor ritmo que ¨¦l.