Ligas infantiles: ni?os humillados por goleada
El f¨²tbol se resiste a las reglas para evitar resultados bochornosos en los partidos entre ni?os
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Suena el pitido inicial en el estadio de Valorio, en Zamora. El club deportivo Amor de Dios, de rojo, recupera el bal¨®n, abre hueco por la banda y el centro colgado al medio del ¨¢rea acaba en gol. No ha pasado ni un minuto de juego. Llega el segundo minuto y entra el segundo gol en la porter¨ªa del C. D. B. Virgen de La Concha. Vestidos de amarillo y negro, como peque?as avispas, este equipo de f¨²tbol-7 (los partidos se juegan en la mitad de un campo de f¨²tbol-11) de la categor¨ªa alev¨ªn (11 y 12 a?os) no hab¨ªa conseguido ganar ni una sola vez durante toda la liga. Y en este ¨²ltimo encuentro contra el Amor de Dios tampoco lo consigui¨®; de hecho, acabaron con la peor goleada: 1-26 (seg¨²n el conteo del periodista) o 1-21 (seg¨²n el del ¨¢rbitro).
Su entrenador, Nicol¨¢s Velasco, justifica que muchos de sus jugadores son menores de la edad que corresponde a esa categor¨ªa. En todo caso, asume con deportividad la derrota, como parece que tambi¨¦n lo hacen los chavales. Pero ?qu¨¦ han aprendido esos ni?os (ganadores y perdedores) despu¨¦s de semejante resultado? ?Qu¨¦ lecci¨®n han recibido de unos padres que hacen chuflas durante todo el tiempo e increpan al ¨¢rbitro por un fuera de juego cuando sus hijos van ganando por 11 goles?
El mundo del f¨²tbol se resiste a un tipo de reglas, muy extendidas en otras disciplinas, que tratan de evitar estos resultados escandalosos. Unas palizas que para muchos llegan al terreno del ensa?amiento, de la humillaci¨®n y no deben tener cabida en unas categor¨ªas donde lo importante es que los chavales ¡°desarrollen habilidades b¨¢sicas de movimiento, se diviertan y pasen tiempo con los amigos¡±, se?ala Wade Gilbert, profesor de la Universidad Estatal de California en Fresno. Gilbert es experto en deporte base en Estados Unidos, donde las mercy rules (reglas de clemencia) o slaughter rules (reglas contra carnicer¨ªas) est¨¢n muy extendidas en la mayor¨ªa de deportes infantiles, incluso en las ligas de instituto y, en el caso del b¨¦isbol, hasta de universidad.
Educaci¨®n emocional
¡°Una de las ense?anzas m¨¢s importantes del deporte es la de saber perder, la tolerancia a la frustraci¨®n¡±, se?ala el pedagogo Juan Antonio Planas. ¡°Pero si hablamos de educaci¨®n emocional y afectiva, no se puede consentir que se llegue a la humillaci¨®n cuando los equipos est¨¢n muy descompensados. Querer acabar completamente con el rival, casi como si fuera una guerra, ya no es deportivo¡±.
En Espa?a, la mayor¨ªa de ligas auton¨®micas y los campeonatos estatales de baloncesto establecen hasta infantil (13 a?os) que el acta se cerrar¨¢ cuando un equipo gane por m¨¢s de 50 puntos; se sigue jugando, pero el marcador no se mueve. ¡°A partir de cadete, esa regla se elimina, en parte porque las diferencias de f¨ªsico y calidad disminuyen considerablemente¡±, explica un portavoz de la Federaci¨®n Espa?ola de Baloncesto. La de Balonmano de?Castilla y Le¨®n establece la misma regla (pero a 20 goles de distancia) y las reglas de minibalonmano (de 6 a 12 a?os) de la Federaci¨®n Espa?ola establecen un conteo especial para limitar los marcadores finales.
En el f¨²tbol, estas medidas son muy minoritarias y consisten en no registrar en la clasificaci¨®n goleadas de m¨¢s de 10 goles (as¨ª lo hacen, por ejemplo, en Asturias y en la Comunidad Valenciana). Pero la gran mayor¨ªa de federaciones, aunque se lo hayan planteado en alg¨²n momento, no tienen nada parecido. La catalana, de hecho, tuvo en vigor esa norma, pero la retir¨® a petici¨®n de los clubes.
Los goles marcan los desempates al final de la liga y los ni?os quieren ser pichichi, explica por tel¨¦fono una portavoz de la Federaci¨®n de Castilla y Le¨®n de F¨²tbol. Adem¨¢s, a?ade, se trata de ligas federadas, que tienen m¨¢s exigencia que otras m¨¢s informales. ¡°Cualquier deportista debe tener hambre de competici¨®n, de ganar¡±, completa un portavoz de la federaci¨®n castellano manchega.
Equipos muy descompensados
¡°El f¨²tbol es el deporte rey en Espa?a y lo que nos gusta es la competici¨®n. El problema es que los padres no quieren ver deporte; quieren ganar¡±, opina Jos¨¦ ?ngel Pel¨¢ez, presidente de Federaci¨®n de F¨²tbol de Cantabria. Pel¨¢ez s¨ª ha propuesto introducir en su regi¨®n una serie de reglas nuevas para los m¨¢s peque?os, como dividir algunos grupos de estas categor¨ªas para hacer competiciones m¨¢s igualadas, que en la difusi¨®n de los resultados haya l¨ªmite de goles o retirar el criterio de golaveraje para los desempates al final de la liga. ¡°Hay que evitar que los ni?os se vayan hundidos, que odien el deporte. No se trata de evitar este tipo de resultados porque se van a producir; hay mucha desigualdad entre los equipos¡±, a?ade Pel¨¢ez.
Veamos el ejemplo que ha desencadenado todo este debate en Cantabria: el pasado mes de abril, el equipo alev¨ªn del Racing de Santander (en el que todos los ni?os quieren jugar, as¨ª que va eligiendo entre los mejores de toda la regi¨®n) se enfrentaba al Calasanz, un equipo modesto que se compone b¨¢sicamente de los chavales de su barrio. En el descanso, el Racing ganaba por 0-15 y los jugadores del Calasanz estaban destrozados; algunos, llorando, se negaban a volver a salir al campo. Ante ese panorama, el monitor del equipo d¨¦bil pidi¨® al del fuerte que les dijera a sus pupilos que aflojaran. Este se neg¨®, argumentando que, para ¨¦l, el respeto al rival era dar siempre el 100% y que estaba entrenando a ni?os que pod¨ªan llegar a ser profesionales. El partido acab¨® 1 a 34 y al poco tiempo el club racinguista se vio obligado a pedir disculpas.
Y, por mucho que algunas federaciones insistan en que son muy raros, solo hay que echar un vistazo al Twitter de los equipos o las p¨¢ginas de las federaciones para encontrar ejemplos parecidos esta misma temporada: Sevilla FC Alev¨ªn 22-0 Camino Viejo CF; Real Madrid FC Infantil 16-0 Alameda de Osuna; Espanyol alev¨ªn 20-0 L'Hospitalet B. Y no solo se trata de equipos inferiores de clubes grandes; por ejemplo, el Victoria C.F. B gan¨® 22 a 0 al Orzan S.D. A en la categor¨ªa alev¨ªn de A Coru?a. Tambi¨¦n fue muy pol¨¦mico en Sevilla un 53-0 del Atl¨¦tico Aznalc¨¢zar al Palomares Junior.
?Penalizar por marcar goles?
Las reglas de clemencia siempre se encuentran con firmes detractores, incluso en Estados Unidos, un pa¨ªs absolutamente acostumbrado a ellas, pues muchos padres y entrenadores las consideran contraproducentes porque desincentivan el esfuerzo, desvirt¨²an la esencia de la competici¨®n, env¨ªan a los ni?os un mensaje equivocado sobre la dura realidad de la vida y pueden ser incluso m¨¢s humillantes para el equipo perdedor. En California, la pol¨¦mica lleg¨® a varios medios de comunicaci¨®n en 2013, cuando la Northern California Federation Youth Football League decidi¨® imponer multas de 200 d¨®lares (unos 180 euros) y suspender a los entrenadores dos semanas si un equipo gana por m¨¢s de 35 puntos en la liga de f¨²tbol americano de 7 a 13 a?os. Muchos padres estaban furiosos y tambi¨¦n algunos entrenadores, que defend¨ªan la integridad del juego y las ense?anzas vitales que ofrece el saber perder, tambi¨¦n cuando se pierde de paliza. El responsable de la federaci¨®n, Bill Fox, asegur¨® sin embargo que en esas edades el objetivo es, ¡°simplemente, que los chavales lo pasen bien¡± y record¨® que muchos abandonan el deporte cuando sufren resultados muy abultados.
La segunda mayor federaci¨®n de f¨²tbol base, la American Youth Soccer Organization, que re¨²ne a medio mill¨®n de jugadores y jugadoras de 5 a 19 a?os, ha rechazado en m¨¢s de una ocasi¨®n este tipo de reglas. "Solo penalizan a un equipo por hacer lo que se le ha dicho que tiene que hacer, marcar goles", dice su gu¨ªa para ¨¢rbitros, entrenadores y padres. La primera asociaci¨®n, la US Youth Soccer, con tres millones de chavales inscritos, tampoco contempla este tipo de reglas, pero numerosas asociaciones estatales, regionales y ligas de instituto s¨ª las tienen.
En todo caso, hay un punto intermedio, explica Wade Gilbert: el de quienes creen que son los entrenadores los que mejor pueden manejar los partidos que est¨¢n muy descompensados para que acaben en ensa?amiento, sin necesidad de obligar a cumplir reglas de clemencia. Es esto lo que plantean varias federaciones espa?olas, Como Castilla-La Mancha o Catalu?a, que insisten, adem¨¢s, en que las goleadas disparatadas tampoco ocurren tan a menudo.
¡°Quiz¨¢ pueda ser as¨ª dentro de 10 a?os¡±
¡°Quiz¨¢ pueda ser as¨ª dentro de ocho, 10 a?os. Pero ahora hace falta meterlo en los reglamentos¡±, dice con cierta resignaci¨®n Jos¨¦ ?ngel Pel¨¢ez. El pedagogo Juan Antonio Planas est¨¢ de acuerdo: ¡°Lo normal es que fueran t¨¢citas y no hiciera falta su regulaci¨®n. Pero dado que la excesiva competitividad y, a veces, el menosprecio hacia el rival, va en aumento, es precisa su regulaci¨®n¡±. ¡°Desde el Consejo Superior de Deportes se defiende como ideario los valores del deporte, pero [este tipo de reglamentos] no son competencia directa de este organismo¡±, aporta al debate un portavoz de este ¨®rgano dependiente del Ministerio de Educaci¨®n.
Los ni?os y la ni?a del Virgen de La Concha (en esta categor¨ªa las plantillas pueden ser mixtas), que celebraban junto a sus padres con una merendola el ¨²ltimo partido de liga, as¨ª parecen asumirlo. Tambi¨¦n su entrenador, Nicol¨¢s Velasco, que dice que resultados como el de ese d¨ªa no suelen ser normales (aunque les han metido una media de casi 13 goles por partido y ellos han marcado menos de uno) e insiste en la diferencia de edad de sus chavales respecto al resto. ¡°Nuestra liga ser¨¢ la pr¨®xima¡±, asegura.
De relojes parados a multas
Se acab¨® el partido. En muchos deportes de base termina el partido si se llega a una diferencia muy abultada. Por ejemplo, 10 entradas en b¨¦isbol o 10 goles en muchas ligas de f¨²tbol en EE UU.
Se cierra el acta. A partir de cierta ventaja, el reloj deja de correr y se cierra el acta, pero se sigue jugando hasta el final. Ocurre en los campeonatos nacionales de baloncesto hasta los 13 a?os o en las ligas de futbol sala de Murcia.
Clasificaci¨®n sin goleadas. Una idea parecida a la anterior que se aplica en el f¨²tbol base asturiano, en el gaditano y se puede extender al resto de Andaluc¨ªa y Cantabria: no se reflejan las grandes goleadas en la clasificaci¨®n.
Un jugador m¨¢s. En la liga infantil de f¨²tbol de Shangh¨¢i, si un equipo gana por m¨¢s de cinco goles el otro puede pedir que se congele el marcador y jugar con uno m¨¢s. Los goles ya no suben al marcador, pero le cuentan al jugador al final de temporada.
Conteo especial. Las reglas de la Federaci¨®n Espa?ola de Balonmano de mini balomano (de 6 a 12 a?os) establecen que cada partido se divide en dos partes. El que marque m¨¢s goles en la primera tendr¨¢ un punto, y lo mismo en la segunda, con lo que el resultado solo podr¨¢ ser de 0-0, 1-0, 1-1 o 2-0.
Castigo. En algunos casos se recurre a multas. Lo hace la Federaci¨®n de F¨²tbol Americano de base del Norte de California al equipo que gane por m¨¢s de 35 puntos, y suspende 15 d¨ªas al entrenador.
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