¡°Son como los mosqueteros¡±

Los argentinos presumen de Maradona; los brasile?os, de Pel¨¦; y los uruguayos de Francescoli. El Barcelona, de Messi, Neymar y Luis Su¨¢rez. Entre mates, asados y risas, pero, sobre todo, entre balones, forjaron una amistad que empez¨® en el vestuario, se consolid¨® fuera de la ciudad deportiva, y la disfruta el Camp Nou. ¡°Si es que tal cosa existe, cada uno representa la idiosincrasia del f¨²tbol de cada pa¨ªs. Neymar, la finura de un brasile?o; Messi, la gambeta de un argentino; y Su¨¢rez, la guapeza (el coraje) de un uruguayo. Los tres, una armon¨ªa de s¨ªmbolos¡±, entiende el escritor argentino Eduardo Sacheri (Buenos Aires, 1967), guionista de El secreto de sus ojos, ganadora del Oscar a la mejor pel¨ªcula extranjera (2010).

No es que solamente son buenos futbolistas, es que est¨¢n perdidamente enamorados del f¨²tbol¡± , dice Alejandro Ferreiro,? escritor uruguayo

¡°Por la manera en la que tratan a la pelota, parece que los tres encontraron en el f¨²tbol la cosa m¨¢s importante de la vida. No puedo imaginar una comida familiar de Messi, Neymar o Su¨¢rez sin una pelota cerca. No es que solamente son buenos futbolistas, es que est¨¢n perdidamente enamorados del f¨²tbol¡±, explica el escritor uruguayo Alejandro Ferreiro (Montevideo, 1968) autor de la novela Portland. ¡°Tiene que influir que en el vestuario puedan hablar de cosas que comparten¡±, a?ade Ferreiro; ¡°somos vecinos, somos del barrio. No est¨¢n frente a alguien que en su vida tom¨® mate o nunca vio un carnaval. La m¨²sica que Neymar canta, es una m¨²sica que tanto Luis como Leo conocen y perciben¡±.

¡°Creo que los tres se entienden tan bien porque ninguno de ellos es ego¨ªsta, son uno por los tres y los tres por uno, como los mosqueteros de Dumas¡±, concede el escritor brasile?o Luis Fernando Ver¨ªssimo (Porto Alegre, 1936), autor de las reputadas historietas El analista de Bag¨¦ o Ed Mort. De los 172 goles que ha marcado el Barcelona en la temporada 120 han sido obra de sus tres delanteros (Messi, 58; Neymar, 38; y Su¨¢rez, 24), un 69,77%. De las 131 asistencias de gol que se han repartido los muchachos de Luis Enrique, 55 (27 el argentino, 21 el charr¨²a y siete el brasile?o) las han cedido el trio sudamericano, un 42%.

Neymar, la finura de un brasile?o; Messi, la gambeta de un argentino; y Su¨¢rez, la guapeza (el coraje) de un uruguayo¡±, entiende Sacheri

¡°Messi se apoya en Neymar y Su¨¢rez seg¨²n lo pida la jugada. No se mira a s¨ª mismo, estudia a todos. No piensa en su gol, sino en el gol del Barcelona. En la verticalidad de Su¨¢rez y en la habilidad de Neymar, Leo ha encontrado dos aliados que lo interpretan a la perfecci¨®n¡±, explica Sacheri. ¡°Adem¨¢s¡±, a?ade el argentino; "Neymar y Su¨¢rez saben presentir lo que Messi est¨¢ viendo que puede suceder¡±. ¡°Messi, que es el faro que ilumina todo, est¨¢ mucho menos comil¨®n (chup¨®n) y los tres se dieron cuenta que existe belleza en compartir la pelota¡±, interviene Ferreiro. Y completa Ver¨ªssimo: ¡°Messi los recibi¨® como complementos para su f¨²tbol, y Su¨¢rez y Neymar no se sienten cohibidos frente a Leo¡±.

¡°Qu¨¦ los tres est¨¦n juntos en el cuadro m¨¢s importante del momento es un poco de justicia para con la historia del f¨²tbol. Justicia po¨¦tica con el dribling. La gambeta no la ten¨ªa el f¨²tbol ingl¨¦s. Esa manera de jugar la desarrolla el d¨¦bil. Eso nos pertenece. Ese es nuestro aportaci¨®n al f¨²tbol¡±, concluye Ferreiro. Mientras Messi, Neymar y Su¨¢rez se divierten en el campo, la pelota escribe su historia.