¡°Soy el mejor del mundo¡±

LeBron James atraves¨® a todo trapo el quinto cap¨ªtulo de su particular cruzada por el anillo de la NBA, pero ni siquiera as¨ª pudo cantar victoria. A medida que avanza la final se define con mayor nitidez el gui¨®n: LeBron contra los Warriors. Su antagonista, Stephen Curry, se crece d¨ªa a d¨ªa, pero dispone de un apoyo mucho m¨¢s cualificado. Los Warriors est¨¢n al completo. Los Cavaliers echan de menos a tres piezas esenciales: Kyrie Irving, Kevin Love y Varej?o. Golden State gan¨® el quinto partido (104-91) y domina la final por 3-2.

El equipo californiano acaricia ya el anillo que anhela desde que lo gan¨® por ¨²ltima vez en 1975. Como m¨ªnimo se ha asegurado dos oportunidades para decidir. La primera, la pr¨®xima madrugada con el sexto asalto, en Cleveland. En el caso de que los de Ohio sean capaces de restablecer la igualdad, el s¨¦ptimo y definifivo encuentro se disputar¨¢ en la madrugada espa?ola del viernes al s¨¢bado.

La tralla de LeBron y sus alardes parece sobrehumana. En el quinto encuentro obtuvo su segundo triple doble en esta final: 40 puntos, 14 rebotes y 11 asistencias. La ¨²ltima vez que se obtuvo un triple doble en la final de esta magnitud estad¨ªstica fue en 1969 y su autor fue Jerry West. Fue tambi¨¦n el octavo partido de Lebron con al menos 30 puntos, 10 rebotes y 10 asitencias en estos playoffs, lo que le iguala con el legendario Oscar Robertson. Pero su s¨²per producci¨®n no fue suficiente. JR Smith asumi¨® un papel relevante con 14 puntos y una serie de cuatro triples, pero s¨®lo fueron unos momentos. Luego LeBron volvi¨® a quedarse solo ante el peligro. ¡°?Siente menos presi¨®n en estas finales debido a que su equipo est¨¢ diezmado?¡±, le preguntaron a LeBron. ¡°No. Mantengo la confianza porque soy el mejor jugador del mundo. As¨ª de simple¡±.

David Blatt, que recibi¨® elogios por la defensa que practic¨® su equipo en el segundo y en el tercer partido, vuelve a estar en la diana. Pese a las bajas, se le critica porque ha reducido las rotaciones al m¨ªnimo. Y en el quinto partido tom¨® una decisi¨®n pol¨¦mica. Los Warriors ahogaron a Mozgov en el interior de la zona. Blatt prescindi¨® del p¨ªvot ruso, autor de 28 puntos y 10 rebotes en el cuarto duelo. Mozgov s¨®lo jug¨® nueve minutos. Los Cavaliers defendieron m¨¢s abiertos. Y Stephen Curry lo aprovech¨® para protagonizar su mejor actuaci¨®n en esta final, con siete triples y 37 puntos, 17 en el ¨²ltimo cuarto.

¡°Ellos cambiaron de estrategia. Tuve m¨¢s espacios y mis compa?eros me facilitaron el trabajo¡±, explic¨® el base de los Warriors. ¡°No hay gran cosa que hacer cuando tira como lo ha hecho. Estuvo extraordinario¡±, dijo Blatt. ¡°Hubo muchos factores que nos hicieron da?o en este partido. Curry fue uno de ellos. Y en muchos de los tiros que mete no hay demasiado que hacer, salvo quitarse el sombrero¡±, coment¨® LeBron. El duelo entre LeBron y Curry depar¨® momentos espectaculares. Uno anotaba un triple y el otro le contestaba con la misma moneda. Uno penetraba hasta la canasta, el otro hac¨ªa lo propio. LeBron pag¨® probablemente el cansancio. Jug¨® s¨®lo dos minutos m¨¢s que Curry, pero a diferencia del base de los Warriors, la estrella de los Cavaliers tiene que multiplicarse. A menudo es ¨¦l quien sube y distribuye el bal¨®n, o quien lo mantiene en su poder hasta que decide por d¨®nde desea desencadenar el lanzamiento. Casi todas las acciones de ataque de los Cavaliers pasan por sus manos. La infinita confianza que tiene en s¨ª mismo no le impide hacer autocr¨ªtica. ¡°Perd¨ª un par de bolas, un par de errores defensivos. Tengo que hacerlo mejor. No me pongo un techo en lo que soy capaz de hacer. S¨¦ que estoy asumiendo una gran carga, pero es lo que hay¡±, cerr¨®.