La selecci¨®n femenina se rebela contra el entrenador
Las 23 jugadoras escriben una carta abierta tras caer eliminadas en su primer Mundial: "La preparaci¨®n no ha sido la correcta. Se ha terminado una etapa. Necesitamos un cambio"
Al final explotaron. Las jugadoras de la selecci¨®n femenina de f¨²tbol se han rebelado? contra el seleccionador en una carta abierta, despu¨¦s de que el mi¨¦rcoles acabara su primera participaci¨®n en un Mundial tras caer contra Corea del Sur. La carta apunta directamente a Ignacio Quereda, seleccionador del equipo femenino desde hace 27 a?os, y expresa de forma clara una realidad que se ha ido gestando en un vestuario que ahora ha roto el silencio: ¡°Es evidente que la preparaci¨®n del Mundial no ha sido la correcta, los amistosos inexistentes, la aclimataci¨®n escasa, el an¨¢lisis de los rivales y la forma de preparar los partidos insuficientes... y esta ha sido la din¨¢mica durante mucho tiempo¡±, denuncian las jugadoras.
Contactado por EL PA?S v¨ªa telef¨®nica, el seleccionador confirm¨® que hab¨ªa le¨ªdo la carta, aunque eludi¨® comentar su contenido. "No voy a hacer declaraciones hasta que llegue a Madrid¡±, dijo antes de embarcar en el aeropuerto de Toronto. Tampoco quiso contestar a si seguir¨ªa en el cargo tras las cr¨ªticas.
Espa?a obtuvo la primera clasificaci¨®n de su historia para un Mundial en septiembre. A partir de ah¨ª, en la preparaci¨®n para la cita m¨¢s importante en la historia del f¨²tbol femenino espa?ol han reinado las improvisaciones y la falta de organizaci¨®n. Espa?a lleg¨® al torneo tras dos meses sin jugar ni un amistoso. Desde octubre solo disputaron cinco, a excepci¨®n de Nueva Zelanda, con rivales menores. La federaci¨®n cerr¨® dos m¨¢s en Murcia, donde se concentr¨® el equipo la ¨²ltima semana, pero los rivales cancelaron los viajes, seg¨²n explic¨® el seleccionador. ¡°Estas cosas son corregibles, pero no son tan trascendentes¡±, opin¨® el t¨¦cnico en la Cope.
Tampoco se hizo la gira por Estados Unidos que hab¨ªa prometido el propio seleccionador y el equipo lleg¨® al torneo cuatro d¨ªas antes de su primer partido, sin tiempo para aclimatarse. Inglaterra lo hizo dos semanas antes, como la gran mayor¨ªa.
La sensaci¨®n de desgaste en el vestuario es antigua. Si no se expres¨® antes de forma m¨¢s clara fue por miedo a que el t¨¦cnico acabara prescindiendo de las rebeldes y pudieran quedarse sin su primer Mundial. Ahora ya no importan las represalias.
El torneo destap¨® las carencias de una selecci¨®n de inmenso talento. Salieron exhaustas a cada segundo tiempo y les temblaron las piernas de cara al gol. El resultado: un punto en tres partidos despu¨¦s de empatar ante Costa Rica y perder con Brasil y Corea. En su estreno contra la selecci¨®n tica, inferior a la espa?ola, Quereda se sac¨® de la manga un once poco trabajado, con jugadoras fuera de posici¨®n y exceso de mediapuntas. Prescindi¨®, por ejemplo, de su ¨²nica pivote, la excelente Virginia Torrecilla.
Las voces de las jugadoras ahora son un¨ªsonas. Tiene el equipo la sensaci¨®n de que debe explicarle a la afici¨®n lo que ha estado pasando realmente. Primero haciendo autocr¨ªtica, y luego destapando la falta de profesionalidad con la que ha sido tratado este grupo de deportistas de ¨¦lite. ¡°Sabemos que nuestro rendimiento podr¨ªa haber sido mejor¡±, reconocen.
El fin de una etapa
¡°Creemos que se ha terminado una etapa y que necesitamos un cambio. As¨ª se lo hemos transmitido al seleccionador y cuerpo t¨¦cnico. Si se pierde la confianza y no se es capaz de llegar a un grupo, es dif¨ªcil alcanzar objetivos¡±, abunda la carta enviada desde Toronto, donde? se encuentra la expedici¨®n. Las jugadoras dicen que Quereda es una persona distante y de trato cordial. Lo ha controlado todo personalmente, algunas piensan que por falta de asistentes en la federaci¨®n.
El s¨¢bado llegar¨¢n a Espa?a en dos fases. La federaci¨®n no ha preparado nada para recibirlas. ?ngel Mar¨ªa Villar, el presidente, amigo personal de Quereda, no apareci¨® por Canad¨¢. Se limit¨® a llamar a la plantilla antes de los partidos.
¡°Queda mucho camino por recorrer y muchas puertas que abrir. Este es un gran momento para nuestro deporte, con muchos retos y sue?os por delante y es responsabilidad de todos marcar el camino a seguir. Ver hacia d¨®nde vamos y c¨®mo lo hacemos¡±, concluye la misiva.
La carta: "El sentir de la selecci¨®n espa?ola de f¨²tbol"
Despu¨¦s de terminar nuestra participaci¨®n en el Mundial, es el momento de hacer balance y sacar conclusiones. Tanto a nivel individual como de grupo, las 23 jugadoras hemos hecho autocr¨ªtica y sabemos que nuestro rendimiento podr¨ªa haber sido mejor. Esta generaci¨®n tiene talento y compromiso para haber llegado mucho m¨¢s lejos.
A pesar de esto, y una vez asumida nuestra responsabilidad, tambi¨¦n queremos hacer p¨²blico el sentir del grupo, de las 23. Es evidente que la preparaci¨®n del Mundial no ha sido la correcta, los amistosos inexistentes, la aclimataci¨®n escasa, el an¨¢lisis de los rivales y la forma de preparar los partidos insuficientes... y esta ha sido la din¨¢mica durante mucho tiempo. Creemos que se ha terminado una etapa y que necesitamos un cambio. As¨ª se lo hemos transmitido al seleccionador y cuerpo t¨¦cnico. Si se pierde la confianza y no se es capaz de llegar a un grupo, es dif¨ªcil alcanzar objetivos.
Queda mucho camino por recorrer y muchas puertas que abrir. Este es un gran momento para nuestro deporte, con muchos retos y sue?os por delante y es responsabilidad de todos marcar el camino a seguir. Ver hacia d¨®nde vamos y c¨®mo lo hacemos.
Toronto, 19 de junio de 2015. Selecci¨®n espa?ola femenina.
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