El a?o m¨¢s dif¨ªcil para Guardiola
Cuestionado por parte de los medios de comunicaci¨®n y de la afici¨®n, el entrenador del Bayern se juega esta temporada su prestigio en Alemania
Josep Guardiola cerr¨® su fichaje por el Bayern M¨²nich tras una frugal cena en la casa que alquil¨® para pasar un a?o sab¨¢tico con su familia en Nueva York una vez que dej¨® el banquillo del Barcelona. Hab¨ªa hablado con Alex Ferguson, en nombre del Manchester United, y Pere, su hermano y representante, recibi¨® llamadas de clubes italianos, rusos y franceses. Pero ese octubre de 2012, cen¨® ensalada, at¨²n y, de postre, mandarinas, y firm¨® un contrato con Uli Hoeness en Manhattan. Aquella noche empez¨® a pensar en modo Bayern. ¡°Quiero ganar donde han ganado muchos, pero como no lo ha hecho nadie¡±, se ret¨®, mientras estudiaba alem¨¢n en la Gran Manzana y ve¨ªa ganar un triplete hist¨®rico al equipo que le iba a legar Juup Heynckes.
?Han pasado tres a?os y a contracorriente ha ganado las dos Bundesligas que ha disputado, una Copa, un Mundial de clubes y una Supercopa europea. Pero en dos ediciones consecutivas de la Champions cay¨® estrepitosamente en semifinales contra los dos grandes espa?oles. Y ahora acaba de perder el primer t¨ªtulo de la temporada, la Supercopa, contra el Wolfsburgo. El viernes, como manda la tradici¨®n, en tanto que campe¨®n de la Bundesliga, abrir¨¢ el fuego contra el Hamburgo, convencido de que revalidar el t¨ªtulo no ser¨¢ f¨¢cil y seguro de que algo subyace a la victoria: ¡°Hago lo que hago para sentirme querido¡±, dijo en la fiesta con la que cerr¨® los actos del 50? aniversario de la Fundaci¨®n Manresa. ¡°Y en el Bayern se siente muy querido¡±, aseguran en su entorno.
Aunque en las ¨²ltimas semanas el aire ha empezado a agitarse a su alrededor. El Bild, el primer diario de Alemania, le critica con dureza, lo mismo que antiguas glorias del Bayern como Mathaus y Effenberg. Y ha saltado a los medios de comunicaci¨®n por algunos incidentes p¨²blicos. Durante la reciente Audi Cup se encar¨® a gritos con De Jong, jugador del Milan, en el t¨²nel de vestuarios por una entrada en la que este lesion¨® al joven Kimmich, uno de los refuerzos esta temporada: ¡°?H¨¢zselo a la Juve, tiene 19 a?os, h¨¢zselo a la Juve!¡±. Al d¨ªa siguiente, tras el partido contra el Madrid, se enoj¨® al ser preguntado por un beso que lanz¨® a la grada al final del encuentro: ¡°?Podemos hablar de f¨²tbol? Era para unos amigos que me han venido a ver, pero... ?podemos hablar de f¨²tbol?¡±. Algunas versiones apuntan a que el beso fue una respuesta a los insultos de dos seguidores que, en perfecto castellano, le llamaban ¡°catalufo¡±, tal vez por otra de sus ¨²ltimas y controvertidas actuaciones: su presencia en la candidatura independentista a las pr¨®ximas elecciones catalanas.
¡°?Nervioso? Para nada. Est¨¢ supermotivado. Cree mucho en este equipo¡±, aseguran, sin embargo, sus colaboradores. ¡°Est¨¢ feliz, enchufado y muy centrado. Solo hay que mirar la pared de su despacho, llena de notas, ideas, conceptos¡ Est¨¢ en modo creativo¡±, ironizan. Por all¨ª pas¨® esta semana Goetze para aclarar unas declaraciones que, seg¨²n ¨¦l, se malinterpretaron. Otro incendio medi¨¢tico antes de empezar. ¡°Lo lleva bien porque sabe que la realidad es muy diferente a la que se vende¡±, dicen empleados del Bayern. Uno de ellos, de origen andaluz, insiste en que se ha integrado muy bien en los h¨¢bitos del club y bromea: ¡°A los alemanes nos sorprende que un espa?ol trabaje m¨¢s horas que nosotros¡±. Tambi¨¦n sostiene que la afici¨®n le es fiel, pese a que parte de los medios le hayan culpado primero de la salida de Kroos y este a?o de la de Schweinsteiger. La realidad, seg¨²n el propio club, es que los dos quisieron irse, pese a que Guardiola les pidi¨® que se quedasen. ¡°Ojal¨¢ alg¨²n d¨ªa volvamos a trabajar juntos¡±, le dijo Kroos al despedirse. Otra de las criticas a Guardiola m¨¢s comunes entre sus detractores es que su alem¨¢n ¡°es pobre de vocabulario¡±.
Contra todas las especulaciones, el t¨¦cnico asegura adem¨¢s que est¨¢ contento porque el equipo se ha reforzado a su gusto. Tiene m¨¢s desborde por la llegada del brasile?o Douglas Costa (24 a?os), procedente del Shakhtar, y de Kimmich, un chico de 19 a?os que viene de Segunda y es una apuesta personal. Y ha recuperado a jugadores con los que apenas pudo contar el curso pasado: Javi Mart¨ªnez, Thiago y Alaba, adem¨¢s de Robben y Ribery.
El Bayern es un club dif¨ªcil, en el que solo un entrenador en los ¨²ltimos 17 a?os, Ottmar Hitzfeld, ha encadenado m¨¢s de tres temporadas. Desde marzo, Pep tiene una oferta de renovaci¨®n, aunque muchos le ven m¨¢s fuera que dentro. ¡°Con Pep nunca se sabe. Pero no parece que haya tomado una decisi¨®n¡±, asguran en su entorno. ¡°Est¨¢ con las pilas puestas. Este tercer a?o lo vamos a pasar bien¡±.
El declive de su gran valedor
El gran valedor de Guardiola en el Bayern siempre fue el anterior presidente, Uli Hoeness, con quien mantiene una relaci¨®n especial. El t¨¦cnico fue a visitarle a la c¨¢rcel cuando estuvo preso por evasi¨®n fiscal y de vez en cuando a¨²n sube a verle al despacho que ocupa en las oficinas del club, ya sin cargo de responsabilidad. Tras la ca¨ªda de Hoennes, en el Bayern solo manda Karl Heinz Rummenigge. Pero, con todo, Guardiola a¨²n busca ser querido, ganar y celebrarlo con unas mandarinas. Y junto a Uli, a ser posible.
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