El rey sigue invicto en su trono

Una mala salida de Usain Bolt en las semifinales del 100 que se corrieron dos horas antes de la final bast¨® para que algunos agoreros vieran en ella una se?al (quiz¨¢s esperada) de un cercano declive del reinado del jamaicano. Pero un tropiezo lo tiene cualquiera, incluso el rey de la velocidad. A pesar de que Usain se qued¨® rezagado despu¨¦s de su quinto y sexto apoyos, en los que parec¨ªa mostrar una cierta falta de coordinaci¨®n o de tensi¨®n muscular suficiente en el tr¨ªceps sural, fue capaz de recuperarse y acabar ganando su semifinal, aunque fuera con un discreto tiempo de 9,96s.

En la final no hubo tropiezo. Bolt sali¨® con un buen tiempo de reacci¨®n (0,159s), mejor incluso que el de la final ol¨ªmpica de Pek¨ªn de 2008 (0,165s). Dio sus acostumbrados 41 pasos para llegar a meta, con amplitudes que fueron increment¨¢ndose progresivamente desde el inicio de carrera hasta el final, en el que m¨¢s de un paso pudo franquear por poco los 3m de longitud. En cuanto a la frecuencia de pasos (revoluciones del motor) la fue incrementando hasta aproximadamente la mitad de carrera y a partir de ah¨ª decay¨® ligeramente hasta el final. La frecuencia media a lo largo de toda la carrera fue ligeramente superior en Berl¨ªn 2009, en el mundial en el que estableci¨® su actual r¨¦cord de 9,58s. En Berl¨ªn dio 4,29 frente a 4,24 pasos en cada segundo ahora en Pek¨ªn. Respecto a la velocidad punta, lograda como siempre a unos 20m del final de carrera, fue algo menor que en Berl¨ªn qued¨¢ndose probablemente esta vez sin franquear los 45 kil¨®metros a la hora. El americano Justin Gatlin, segundo en la prueba sali¨® con un peor tiempo de reacci¨®n (0,165s), dio casi dos pasos m¨¢s que Bolt para llegar hasta la meta (43 pasos), aunque al ser pasos m¨¢s peque?os lo hizo con algo m¨¢s de frecuencia. Y en algunos instantes de la carrera superaba ligeramente al jamaicano, que finalmente con m¨¢s convicci¨®n en la victoria le acab¨® sacando una cent¨¦sima en la meta.

Esta carrera ha acercado un poco m¨¢s el sue?o de Usain de llegar a los pr¨®ximos juegos de R¨ªo como rey imbatido de la velocidad. Por otro lado tampoco parece imposible, por muy dif¨ªcil que sea (como siempre lo ha sido) si las lesiones y problemas le respetan, que se cumpla el sue?o de muchos de poder verle de nuevo batiendo el r¨¦cord del hect¨®metro.

Xavier Aguado J¨®dar es Bbomec¨¢nico, Catedr¨¢tico de la Universidad de Castilla-La Mancha (xavier.aguado@uclm.es)