Kranevitter, el Busquets de Yerba Buena llega al Atl¨¦tico
El conjunto se Simeone se refuerza con el centrocampista procedente de River, que ficha por cinco temporadas, aunque se incorporar¨¢ en el mercado invernal
El Atl¨¦tico de Madrid ha hecho oficial el fichaje de Claudio Mat¨ªas Kranevitter, centrocampista argentino de 22 a?os procedente de River Plate y una de las figuras emergentes del f¨²tbol argentino. Kranevitter se incorporar¨¢ al Atl¨¦tico en el pr¨®ximo mercado invernal y ha firmado por cinco temporadas. Se trata de un jugador espigado y de largas piernas, que respira respira hondo y se toma el tiempo necesario para explicar los movimientos t¨¢cticos y que su interlocutor los entienda: ¡°Hay cuatro sectores de la cancha donde el equipo presiona con m¨¢s intensidad, y el t¨¦cnico me pide que sea yo el que marque el momento de esa presi¨®n¡±.
De verbo sencillo y trato amable, el muchacho habla con la humildad, los conocimientos y la calma de un maestro avezado mientras juega al f¨²tbol con la precisi¨®n y la simpleza de un veterano. Los datos dicen que solo tiene 22 a?os y que ni siquiera ha cumplido el centenar de partidos en Primera Divisi¨®n, pero cuando el bal¨®n comienza a rodar, el muchacho (Yerba Buena, Tucum¨¢n, 1993), multicampe¨®n con el River Plate y ya jugador del Atl¨¦tico de Madrid a partir de enero, parece que ya lo supiera todo: el lugar exacto donde ubicarse, el momento oportuno para anticipar, el destino del siguiente pase¡
Marcelo Gallardo, el entrenador que dio a ese chico callado y sereno el mando de su conjunto, conoce a la perfecci¨®n los tiempos del f¨²tbol suramericano y sabe que los equipos se arman y se desarman a ritmo de v¨¦rtigo, y que nada se puede hacer ante el poder econ¨®mico de los clubes europeos. Su River ganador de todas las copas del continente ¨CLibertadores, Sudamericana y Recopa- est¨¢ condenado al desguace, la mayor¨ªa de las figuras se marchar¨¢n y llegar¨¢ el momento de reinventarse. Sin duda encontrar¨¢ sustitutos adecuados para casi todos los que emigren; sin duda, nadie ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil de reemplazar que Mat¨ªas Kranevitter.
¡°El Colo es una pieza clave, fundamental para nosotros¡±, reconoc¨ªa Gallardo hace un a?o, cuando el pibe que a sus 14 a?os decidi¨® dejar a sus padres y sus seis hermanos para recorrer los 1.250 kil¨®metros que separan Tucum¨¢n de Buenos Aires ya levantaba murmullos en el ambiente futbolero argentino. Y no se equivocaba.
Pieza clave de River Plate, con 14 a?os abandon¨® su Tucum¨¢n natal para enrolarse en uno de los grandes del f¨²tbol argentino
Admirador confeso de Javier Mascherano y Bastian Schwensteiger, nadie entendi¨® mejor que el juvenil Kranevitter el principio guardiolano de presionar en los cuatro segundos posteriores a la p¨¦rdida del bal¨®n; nadie incorpor¨® m¨¢s r¨¢pido la necesidad de tocar de primera y hacia adelante una vez que la recuperaci¨®n era un hecho. Gallardo le ense?aba v¨ªdeos de Sergi Busquets y el juvenil que de peque?o ayudaba a su familia trabajando de caddie, y que alguna vez lleg¨® a pensar que tal vez ser¨ªa mejor probar suerte con el golf, se convirti¨® en la mejor copia del hombre del Bar?a, en el eje de un equipo tan agresivo como lucido.
A veces, es necesaria la ausencia de un futbolista para comprobar su trascendencia en el estilo de juego de su equipo. El 22 de septiembre de 2014, el Colo se fractur¨® el quinto metatarsiano del pie derecho y aunque los triunfos continuaron, aquel River ya no volver¨ªa. A su regreso, el muchacho que en Buenos Aires echa de menos las empanadillas de carne que su mam¨¢ sigue cocinando en Tucum¨¢n, se encontr¨® con un conjunto igual de efectivo pero m¨¢s utilitario. Tuvo que adaptarse, y la realidad es que no le cost¨® nada hacerlo. Sigui¨® aportando su car¨¢cter ganador, su comprensi¨®n del juego, su sencillez para cortar, quitar y encontrar la mejor opci¨®n de pase¡
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.