Despu¨¦s de 10 etapas, la Vuelta empieza en Andorra
La etapa reina, calificada de ¡°bestial¡± por los ciclistas, examina a los favoritos
A Joaquim Rodr¨ªguez no le extra?a casi nada de Andorra, pero la etapa de hoy le da miedo. No es miedo a lo desconocido, sino a lo conocido ¡°porque las tres veces que he corrido esta etapa he cascao¡±.
Tom Dumoulin, el l¨ªder, el contrarrelojista recreado en escalador que ha perdido peso, pero no fuerza, no conoce nada de lo que le espera pero sabe que ser¨¢ ¡°la etapa m¨¢s dura que he corrido nunca¡±. Alejandro Valverde, uno de los dos l¨ªderes del Movistar, asegura que ser¨¢ ¡°una etapa bestial, con un desnivel medio del ocho o nueve por ciento. Una barbaridad sobre todo despu¨¦s de una jornada de descanso, de un viaje cansado (de Castell¨®n a Andorra) y de dormir en altura¡±. Nairo Quintana siente que ¡°la monta?a me llama¡± y que debe responder, ¡°porque es mi terreno, aunque note el cansancio del Tour¡±.
No es palabrer¨ªa ni flashes para engrandecer la fiesta. Lo cierto es que la Vuelta a Espa?a comienza el mi¨¦rcoles, despu¨¦s de diez etapas en las que los ciclistas han llorado por el calor y por las ca¨ªdas. Si el ciclista es ¨¦l y su circunstancia, Andorra va a exigir lo mejor de ¨¦l, dejando las circunstancias a un lado. En las diez etapas precedentes, se han escalado 14 puertos, solo tres de primera, dos de segunda y 9 de tercera. Solo este mi¨¦rcoles en Andorra tendr¨¢n que superar seis, pero una de categor¨ªa especial, cuatro de primera y uno de segunda. Y todo en apenas 138 kil¨®metros. O sea, no habr¨¢ terreno llano. Se trata de subir y bajar, con desniveles que van del 6 al 14%, sin descanso y con miedo al desmayo.
En el af¨¢n por proteger el inter¨¦s de la carrera, la Vuelta opta al principio por etapas c¨®modas con finales explosivos. M¨¢s que diferencias se buscan emociones. Luego empieza la Vuelta. Y Andorra ha sido el lugar elegido para el segundo banderazo de salida. En diez etapas se han confirmado algunas cosas: que Dumoulin es un candidato serio, que Nairo Quintana no ha encontrado a¨²n la pedalada, que Froome va y viene tirando de pundonor, que Purito Rodr¨ªguez es regular, pero sus bombas a¨²n no explotan (aunque es segundo en la general) y que Alejandro Valverde tiene en su clav¨ªcula izquierda su tal¨®n de Aquiles: ¡°Si gano solo podr¨¦ levantar el brazo derecho para celebrarlo¡±.
Todos han so?ado esta noche con Beixalis (6,5 km, con tramos del 14% de desnivel), Ordino (10 km al 7%) Rabassa (14 km del 6 al 12%), La Gallina (11,7 km del 8,5 al 11%) y Els Cortals d?ncamp (8,7 km entre el 9 y el 11%), adem¨¢s del Alto de la Comella, de segunda categor¨ªa. Ni los propios ciclistas saben qui¨¦n estar¨¢ mejor y quien peor. Hasta ahora todos los llamados a la gloria han dado s¨ªntomas de grandeza y de flojera, salvo Dumoulin, que nunca ha estado mal y que ha empujado su corpach¨®n por las cumbres sin que le faltara el aliento. Tuvo que abandonar el Tour en la tercera etapa y se le nota la frescura frente a los rivales que vienen de la ronda francesa. Pero el ciclista de Maastricht es una inc¨®gnita. Su explosividad es indudable, pero le falta someterse al dictamen de las verdaderas etapas de monta?a, las que se resuelven al final pero se desgastan en los puertos precedentes.
Para a?adir emotividad y dificultad al asunto se anuncia lluvia
Para a?adir emotividad y dificultad al asunto se anuncia lluvia para este mi¨¦rcoles, o sea que si resultar¨¢ dif¨ªcil subir seis veces, no lo ser¨¢ menos bajar cinco veces, antes de llegar a la meta de Els Cortals d¡¯Encamp. Esperan despu¨¦s otras batallas, en Alto de Campoo, en la Ermita del Alba (con siete puertos) o en la sierra madrile?a (con cuatro puertos de primera). Pero todas las batallas est¨¢n en esta, en Andorra, a la que el Tour y la Vuelta recurren asiduamente, no en vano es un peque?o pa¨ªs rodeado de monta?as y comercio.
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