El Sporting se desata en Riazor

Quienes vean en el Sporting una mar¨ªa que no dispone de m¨²sculo econ¨®mico y por tanto de fuerza balomp¨¦dica ya pueden ir renovando su mirada. La modestia no est¨¢ re?ida con el talento y mucho menos con el orgullo, y son dos valores que el equipo asturiano emple¨® para llegar a Primera cuando nadie lo esperaba. No ha cambiado y ese detalle no deja de ser un ventaja. El Sporting emplea ahora las mismas armas para enfrentar a Real Madrid, Valencia o Deportivo que us¨® para oponerse a Alcorc¨®n, Lugo o Llagostera el ejercicio pasado. Tiene un camino claro y no se aparta de ¨¦l aunque a veces los partidos escriban guiones inescrutables o inesperados.

Porque nadie pod¨ªa aguardar que el Sporting tan corajudo, pero tan hu¨¦rfano de pegada como para no marcar en las tres primeras jornadas, se fuese al descanso en Riazor con tres goles que a la postre le dieron su primera victoria en este campeonato. Imposible imaginar que en diez minutos marcase dos tantos id¨¦nticos, sendos testarazos de Sanabria a unos pasos de la l¨ªnea de gol, tras rascar en reiteradas ocasiones la l¨ªnea de fondo en un inicio demoledor porque comenz¨® el Sporting con unos minutos memorables, profundo y amplio. Al Deportivo le super¨® el despliegue del rival porque tard¨® en ajustar las ayudas atr¨¢s, se vio dos abajo y reaccion¨® como se aguarda de los equipos que tienen argumentos, quiz¨¢s no tantos como los de quienes lo quieren ver m¨¢s cerca de Europa que de pelear su salvaci¨®n, tarea sobre la que no le conviene perder el foco.

Respondi¨® el equipo de V¨ªctor, encorajinado, pero tambi¨¦n con f¨²tbol. Marc¨® Juanfran casi de inmediato en un c¨®rner al primer palo que prolong¨® a la red y el Sporting se achat¨® unos minutos, se fue a defender muy atr¨¢s y qued¨® a merced del Deportivo, que encontr¨® opciones de todos los colores. Empat¨® Luis Alberto con chut pleno de dinamita que se col¨® por el palo que en teor¨ªa siempre defender un portero y casi de inmediato Sidnei se adelant¨® unos cent¨ªmetros al saque de una falta para marcar lo que puedo ser la remontada local. Con el hilo perdido, el Sporting encontr¨® aire cuando estaba cerca de ser noqueado. No conviene minusvalorarlo a la hora de considerar a este equipo de gladiadores, sostenido por una afici¨®n siempre presente. Encontr¨® una contra muy mal defendida por la zaga blanquiazul, vencida hacia la izquierda para dejar un pasillo por el que percuti¨® ?lex Men¨¦ndez, excepcional toda la tarde, para situar de nuevo en ventaja a su equipo.

Ten¨ªa un evidente problema defensivo el Deportivo, que se ajust¨® en esa fase con el esforzado Fay?al ayudando a cerrar el flanco zurdo. Tambi¨¦n lo hizo el Sporting, que, con todo, se aprest¨® a sufrir para defender la victoria. Vio como Lucas P¨¦rez mand¨® el bal¨®n al palo en un grosero error de su zaga y mal que bien pleg¨® velas sin ser capaz de volver a asustar a Lux. Baj¨® el nivel ofensivo y creci¨® el defensivo, decay¨® el Deportivo, necesitado como estaba de afrontar m¨¢s gasto en la creaci¨®n y al que no fortalecieron las variantes porque al cuarto de hora de la segunda parte abraz¨® el 4-3-3 y con ¨¦l alej¨® a Lucas del ¨¢rea, un pecado. Cuando V¨ªctor lo envi¨® de vuelta a posiciones m¨¢s centradas el partido ya mor¨ªa. Lo hizo con dos equipos exhaustos despu¨¦s de entregar, con menor o mayor fortuna todo, en una tarde que a¨²no todos los ingredientes que se le pueden demandar al f¨²tbol para que se convierta en un maravilloso espect¨¢culo.