Jes¨²s Espa?a: marat¨®n o adi¨®s

Jes¨²s Espa?a tiene 37 a?os y una pasi¨®n que no se agota: correr. Correr pero, correr en serio, con ambici¨®n, compitiendo con los mejores del mundo, como el campe¨®n de Europa de 5.000 metros en 2006 ha hecho hasta ahora. Por eso, cuando el atleta de Valdemoro regres¨® frustrado del Mundial de Pek¨ªn 2015 por no haber rendido como su estado de forma le indicaba, telefone¨® a su entrenador, Juan del Campo. ¡°Ya no pinto nada en el 5.000¡±, le dijo crudamente. ¡°Si aspiro a ser finalista en los Juegos, tengo que dar el salto al marat¨®n¡±.

Del Campo, que conoce la capacidad anal¨ªtica de su pupilo, c¨®mo es capaz de sacar conclusiones despu¨¦s de cada carrera, no dud¨® nada cuando le respondi¨® apoyando su decisi¨®n. ¡°Es un salto necesario. El tiempo pasa y se apaga la chispa necesaria en las carreras cortas¡±, dice el t¨¦cnico. Para competir con los africanos y clasificarse en una final necesita tener un 1.000m final de 2m 22s, un tiempo del que Jes¨²s ya no es capaz. ¡°As¨ª que le dije: o pasas al marat¨®n o lo dejas. Pero solo tienes un tiro¡±.

¡°Pens¨¦ que tras la operaci¨®n que sufr¨ª en 2012 volver¨ªa a mi nivel de 13m pelados, pero ahora he visto que no ha sido posible. Mi camino ahora es la carretera¡±, dice el atleta a menos de cinco meses de su salto a lo desconocido, que tendr¨¢ lugar el pr¨®ximo 21 de febrero en el marat¨®n de Sevilla. ¡°Correr¨¦ con un solo objetivo, conseguir la m¨ªnima para los Juegos de R¨ªo¡±, dice Espa?a, a quien no le asustan ni la distancia del marat¨®n (42,195 kil¨®metros) ni los nuevos entrenamientos a los que deber¨¢ someter a su cuerpo. ¡°Soy novato en la prueba y asumo el reto con prudencia, paciencia y mucha capacidad de entrenamiento. Ser¨¦ conservador corriendo, pero no temo los entrenamientos. Siempre he hecho tiradas largas sin problemas y con gusto y ahora har¨¦ m¨¢s. Lo ¨²nico es que me va a costar hacerlo m¨¢s lento que antes, cambiar el chip¡±.

Las mejores marcas de Espa?a son 13m 4,73s en 5.000m, 28m 26s en un 10.000 que corri¨® fuera de forma y 1h 4m en media marat¨®n. Hace 20 a?os, Abel Ant¨®n, un atleta puro de pista con marcas similares dio el mismo salto con un ¨¦xito fulgurante. Gan¨® el primer marat¨®n que corri¨® (Berl¨ªn 96), fue dos veces campe¨®n del mundo y baj¨® de 2h 8m.

Por debajo de 2h 10m

A Ant¨®n, adem¨¢s, se le parece por la forma de correr, por una zancada agresiva que en teor¨ªa estaba re?ida con la eficiencia que exige el marat¨®n. El paso del tiempo, sin embargo, ha roto la teor¨ªa: los nuevos maratonianos, los capaces de correr cada kil¨®metro en 2m 54s tienen carrera de mediofondistas, no la antigua, m¨¢s plana y pendular. De tiempos justamente no quiere hablar Espa?a (¡°despu¨¦s de haber entrenado unas semanas me har¨¦ prueba de lactato para ver qu¨¦ ritmo puedo mantener¡±, dice) y Del Campo se muestra evasivo. ¡°Evidentemente, por los tiempos que tiene en distancias m¨¢s cortas, Jes¨²s tiene capacidad para bajar de 2h 10m¡±, dice el entrenador. ¡°Hay peores fondistas que corrieron por debajo de esa barrera porque pose¨ªan una carrera muy econ¨®mica, eficiente. La clave es la capacidad mental. Jes¨²s es un atleta de retos. Y ahora siente el cosquilleo de un reto nuevo, un arma contra las dificultades¡±.