Pau Gasol, del pato de Memphis al se?or Collins de Lakers
Los mil partidos y el ¨¦xito del jugador espa?ol en la NBA han discurrido en paralelo a una serie de episodios rocambolescos
La irrupci¨®n de Pau Gasol en la NBA le cost¨® 3 millones de euros m¨¢s el IVA. Esa fue la cl¨¢usula de rescisi¨®n que tuvo que negociar para desligarse del Barcelona. El p¨ªvot de Sant Boi no hubiera empezado el recuento de los mil partidos en la NBA que acaba de cumplir con motivo del duelo que Chicago perdi¨® el s¨¢bado ante Charlotte ¡ªm¨¢s otros 115 en los playoffs¡ª, de no haber superado una serie de episodios a cual m¨¢s rocambolesco.
El desfile de patos. El 27 de junio en Nueva York, Marisa, la madre de Pau, recalcaba: ¡°En casa, Pau no es una estrella¡±. El p¨ªvot de Sant Boi hac¨ªa patente su ambici¨®n: ¡°No vengo para estar en los banquillos¡±. Atlanta lo eligi¨® en el tercer puesto del draft y lo traspas¨® a Memphis. Un d¨ªa despu¨¦s, en la ciudad de Tennessee, Pau fue presentado como jugador de los Grizzlies en el Hotel Peabody, famoso por el desfile de patos que, desde hace 90 a?os, tiene lugar en la fuente situada en su hall. Pau, aquel d¨ªa, empez¨® a comprender que el jugador est¨¢ al servicio de los compromisos sociales y medi¨¢ticos que dispone la NBA. Al borde del colapso, sin apenas haber dormido, Pau supo desmarcarse de las preguntas que se le hicieron en el ingl¨¦s de la Am¨¦rica profunda que todav¨ªa no comprend¨ªa. ¡°Esta os la responder¨¢ mister Battier¡±. Era su compa?ero en el draft, un destacado estudiante de la Universidad de Duke, de quien se dec¨ªa que llegar¨ªa a presidente de Estados Unidos.
Primeros viajes. Pau Gasol se incorpor¨® a los Grizzlies solo diez d¨ªas despu¨¦s de los atentados del 11-S. ¡°Acababa de regresar de Turqu¨ªa, donde gan¨¦ la medalla de plata con la selecci¨®n en el Europeo. Fue muy impactante. Al principio no me lo cre¨ªa. Aquellos hechos me crearon una duda muy razonable respecto al viaje que ten¨ªa que emprender para quedarme a vivir all¨ª¡±, cont¨® a EL PA?S. Los problemas con los viajes afectaron a su familia. A finales de septiembre se trasladaron sus padres y sus hermanos. No pudieron llegar a su destino. Tras nueve horas de vuelo hasta Atlanta y nueve horas m¨¢s de infructuosa espera en la aduana, fueron devueltos a Barcelona por un problema en su documentaci¨®n.
Chanzas y Winnie the Pooh. La ¨²ltima etapa de Gasol en los Grizzlies fue, lesiones aparte, la m¨¢s dura de su carrera. Una parte del p¨²blico del FedEx Forum le culp¨® de los fracasos de un equipo al que ¨¦l llev¨® por primera vez a los playoffs (2004-2006). Un locutor compuso una mal¨¦fica canci¨®n. Le tildaba de ¡°mercenario¡±, de defender ¡°clavado en el barro¡± y se preguntaba ¡°?qui¨¦n quiere a un espa?ol llor¨®n?¡±. Luego, en su primer a?o con los Lakers, le acusaron de soft (blando) y le compararon a Winnie the Pooh, el osito que apareci¨® en algunas pel¨ªculas de Walt Disney. Pau se tom¨® la revancha imponi¨¦ndose despu¨¦s a los m¨¢s grandes p¨ªvots de la NBA de la ¨¦poca: Dwight Howard, Garnett o Tim Duncan.
Le espera el se?or Collins. Un d¨ªa de junio de 2007, le indicaron a Pau Gasol que el se?or Collins deseaba verle. Pau se encontraba ejercit¨¢ndose en el gimnasio del hotel Juan Carlos I de Barcelona, cuando apareci¨®. Se trataba ni m¨¢s ni menos que de Kobe Bryant, que se hospedaba en el hotel con ese apellido falso. Lo que a primera vista pareci¨® una conversaci¨®n de pura cortes¨ªa sembr¨® la semilla de uno de los traspasos m¨¢s espectaculares en la NBA durante los ¨²ltimos tiempos, el de Pau a los Lakers, donde jug¨® tres finales y gan¨® dos anillos. La historia de Pau, ahora, a sus 35 a?os, contin¨²a en los Bulls: mil partidos, superando a legendarios como Magic Johnson o Larry Bird, 15 temporadas y una competitividad a prueba de bomba.
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