El descaro de los 76ers

Isaiah Canaan, Jerami Grant, Richaun Holmes, JaKarr Sampson.

?Qui¨¦nes son esos tipos? ?Los ¨²ltimos campeones mundiales del peso medio? ?Los integrantes de un nuevo y mol¨®n grupo de R&B, tan guay que s¨®lo los m¨¢s enterados est¨¢n al tanto? ?Forman parte de una lista de afectados por el consumo de metanfetamina durante el embarazo?

No, no y, sorprendentemente, no.

Los humanos de la lista comparten haber jugado al menos 10 partidos esta temporada con el uniforme de los Philadelphia 76ers, un equipo tan malo (llevan un triunfo y 23 derrotas) que disputar¨¢ el resto de los encuentros de este a?o despu¨¦s de los partidos de la liga de hockey de los Philadelphia Flyers, la ¨²nica forma de garantizar que haya p¨²blico en las gradas.

Vale, lo del hockey me lo he inventado. Pero lo de los jugadores es verdad. Y la situaci¨®n calamitosa de los 76ers es a¨²n m¨¢s real. La mayor¨ªa de aficionados a la NBA estar¨¢n al corriente: tras tres temporadas tocando fondo despu¨¦s del desastroso fichaje de Andrew Bynum, el equipo se embarc¨® en una misi¨®n sin precedentes de fracaso voluntario perdiendo el m¨¢ximo n¨²mero de partidos para acumular elecciones en el ¡®draft¡¯.

Una estrategia poco novedosa en un mundo en el que muchos equipos se han dejado ganar con la esperanza, a menudo equivocada, de que una buena elecci¨®n cambiar¨ªa su suerte. Lo que convierte en singular la apuesta de los 76ers es su descaro. En las ¨²ltimas dos temporadas han ganado menos de 20 partidos y parece que ¨¦sta est¨¢n dispuestos a ahondar a¨²n m¨¢s en las profundidades de la ineptitud.

Los 76ers han contratado a Jerry Colangelo y los fans ya pueden estar tranquilos, no porque sea un genio, sino porque lo que no es, es un idiota

Pero parece que alguien ha dicho basta. Despu¨¦s de los sutiles avisos del comisionado de la NBA Adam Silver, la franquicia ha contratado como jefe de operaciones deportivas a Jerry Colangelo, ex director general de los Suns. Colangelo, cuyo ¨¦xito transformando la crispada federaci¨®n estadounidense de baloncesto pasar¨¢ a la historia, se ocupar¨¢ no s¨®lo de lo que suceda en la pista sino que tambi¨¦n tendr¨¢ que hacer limpieza fuera de ella. Esta ¨²ltima tarea probablemente ser¨¢ a¨²n m¨¢s importante despu¨¦s de que apareciese un v¨ªdeo del novato Jahlil Okafor (otro nombre mol¨®n) lanzando pu?etazos en las calles de Boston.

?Funcionar¨¢? Lo cierto es que podr¨ªa ser que s¨ª.

Jerry Colangelo tiene experiencia, contactos, sabe c¨®mo funciona el mundo del baloncesto y, sobretodo, es un tipo inteligente. No habr¨ªa aceptado el puesto si pensase que es una misi¨®n imposible.

El presupuesto de la franquicia arroja alguna luz sobre las perspectivas del equipo. Seg¨²n hoopshype.com las fichas de este a?o ascienden a 58 millones y el a?o que viene se rebajar¨¢n a 27, lo que deja un amplio margen de maniobra para que Colangelo pueda contratar a jugadores que no parezcan extras de una pel¨ªcula de baloncesto.

Los 76ers, sus aficionados y, en general, cualquiera que crea que los equipos deber¨ªan intentar ganar todos los partidos, pueden respirar tranquilos. Lo peor ya ha pasado. Y podemos confiar en ello no porque Jerry Colangelo sea un genio, sino porque lo que no es, es un idiota.