De Rufete a Mendes

El calendario ha emparejado de nuevo en el primer partido del a?o al Valencia con el Madrid en Mestalla, como sucediera en el curso anterior. 364 d¨ªas atr¨¢s, el conjunto valencianista era dirigido por Nuno Espirito Santo, el elegido por el propietario Peter Lim, que aterriz¨® de manera definitiva en el club de la capital del Turia en octubre del 2014, pero desde el verano anterior decid¨ªa en la entidad che. El Valencia derrot¨® 2-1 al Madrid de Ancelotti que inici¨® su declive en con el gol de Nicol¨¢s Otamendi que consolidaba al equipo de Nuno en la cuarta posici¨®n en la jornada 17. El valencianismo era feliz y cre¨ªa en el proyecto de Lim.

En el a?o transcurrido, mucho han cambiado las cosas en Mestalla: no existe direcci¨®n deportiva alguna tras la marcha forzada de Rufete y Ayala, ni una figura reconocida en el palco tras dejar el cargo Amadeo Salvo; los futbolistas fichados en verano auspiciados por Jorge Mendes no dan la talla; Nuno se enfrent¨® con el vestuario, simbolizado en Negredo, que entend¨ªa que en las alineaciones se priorizaba a los jugadores representados por Mendes, agente de Nuno, y amigo y socio de Lim; los malos resultados y la antipat¨ªa del aficionado che propiciaron el despido encubierto en cese voluntario de Nuno; y, finalmente, la llegada al banquillo de Mestalla de Gary Neville por amistad con Lim y sin ninguna experiencia como entrenador, desconocedor del idioma, de los jugadores y de la idiosincrasia del Valencia al igual que el due?o Lim. El conjunto che se encuentra a falta de dos jornadas para concluir la primera parte de la temporada, con 22 puntos, en mitad de la tabla con la sensaci¨®n de indefinici¨®n estructural y deportiva.

Otamendi simbolizaba lo mejor del Valencia: el car¨¢cter irreductible, la profesionalidad, la intensidad y pasi¨®n. El central argentino fue una apuesta de Rufete, fichado al Oporto por 12 millones de euros. Tambi¨¦n lo fue Mustafi, que no estar¨¢ presente ante el Madrid por lesi¨®n, adquirido al Sampdoria por ocho millones de euros antes de que se proclamara campe¨®n del mundo con Alemania. Otamendi y Mustafi formaron una de las parejas de centrales m¨¢s fiables de la Liga y de Europa, que solventaban los problemas defensivos del Valencia a?adiendo soluciones en ataque. Entre ambos firmaron diez goles en la anterior temporada.

En el verano pasado, con la clasificaci¨®n del Valencia para la Champions, Nuno se crey¨® legitimado para hacer desaparecer la direcci¨®n deportiva del club. Estorbaba la opini¨®n de Rufete y Ayala, que podr¨ªan no aprobar la llegada de futbolistas del s¨¦quito de Mendes, de dudosa val¨ªa, con escaso bagaje profesional en alguna de las incorporaciones (Santi Mina, Danilo o Bakkali), o sin un nombre en el f¨²tbol ( Ryan, Santos o Abdennour). Salvo el belga Bakkali, que lleg¨® libre, el desembolso efectuado por todos ellos, unos 65 millones, est¨¢n resultando una inversi¨®n de riesgo, a las que sumar las anteriores efectuadas por Lim (Negredo, Rodrigo, Enzo P¨¦rez, Cancelo y Andr¨¦ Gomes), por los cuales se pagaron otros 110 millones de euros. Solo el centrocampista Andr¨¦ Gomes (22 a?os), que cost¨® 15 millones y Joao Cancelo (21), que comienza a despuntar como carrilero, y que supuso un desembolso de otros 10, justifican su precio.

A Nuno le molestaba que le preguntasen qui¨¦n fichaba en el Valencia. ¡°Entre todos los que formamos el club¡±, respond¨ªa el t¨¦cnico portugu¨¦s. Ese ¡°todos¡±, eran Mendes que colocaba a sus representados en connivencia de Lim y del propio Nuno, con el dinero del Valencia prestado por el propio Lim, que en estos momentos est¨¢ dispuesto a condonar con una ampliaci¨®n de capital de 100 millones que el magante de Singapur se ha comprometido en asumir.

La venta de Otamendi al Manchester City, en la que intervino Mendes, la escasa relevancia de los fichajes aterrizados en Mestalla y los malos resultados en el inicio de temporada, fueron el caldo de cultivo para el despido de Nuno. ¡°El nuevo entrenador no tendr¨¢ que ver con Mendes¡±, anunci¨® Layhoon, la presidenta del Valencia. El sustituto del portugu¨¦s, Gary Neville, no tiene relaci¨®n laboral con Mendes, pero s¨ª intereses comunes con Lim, al que le une la amistad y la propiedad del Salford City, un club amateur de un distrito de Manchester. Neville posee el 10% del equipo de su infancia y Lim un 50%.

Sin experiencia alguna en los banquillos, salvo formar parte de la selecci¨®n inglesa como segundo de Roy Hodgson, cargo que seguir¨¢ compaginando con la direcci¨®n del conjunto che, Neville se ha encontrado en el Valencia un mundo nuevo, con jugadores a los que est¨¢ conociendo, con la barrera idiom¨¢tica como un h¨¢ndicap m¨¢s, improvisando sistemas para dotar de estabilidad a un equipo sin identidad ni una idea clara de juego. Con Neville en el banquillo, el Valencia ha sumado dos derrotas (Lyon y Villarreal), dos empates (Eibar y Getafe), y una victoria ante el Barakaldo, un Segunda B, en Copa. Llegada la apertura del mercado invernal, la afici¨®n del Valencia espera alg¨²n gesto de Lim con el fichaje de alg¨²n futbolista de renombre. Nadie se ha pronunciado al respecto en la entidad che. No existe en estos momentos una estructura en el Valencia para la toma de decisiones deportivas. Desde Singapur, manda Lim.