El malestar de Bale

Gareth Bale hab¨ªa conseguido recuperar su mejor versi¨®n en las ¨²ltimas semanas. Despu¨¦s de un a?o y medio complicado, marcado por las lesiones, las reca¨ªdas y su bajo rendimiento, el gal¨¦s era feliz con Rafa Ben¨ªtez. El t¨¦cnico madrile?o hab¨ªa cumplido los deseos de Bale, que ansiaba salir de la banda en la que le hab¨ªa situado Carlo Ancelotti durante sus dos temporadas al frente del Madrid. La destituci¨®n del entrenador madrile?o, el pasado lunes, desmont¨® el programa de restauraci¨®n de la estrella de Gales. Su representante, Jonathan Barnett, lleva dos d¨ªas denunciando a la prensa brit¨¢nica que su cliente est¨¢ muy decepcionado con la salida de su valedor. No todo el vestuario del Madrid contempl¨® con indiferencia el destino de Ben¨ªtez.?

La directiva pens¨® que el espa?ol relanzar¨ªa su carrera. El ya exentrenador del Madrid lleg¨® el pasado mes de junio al club con la encomienda de hacer feliz a Bale. Para ello, le indicaron que lo m¨¢s recomendable era sacarle de la banda derecha para trasladarle a la izquierda o a la mediapunta, en donde gozar¨ªa de mayor libertad. Ben¨ªtez cumpli¨®. El t¨¦cnico busc¨® para el gal¨¦s una funci¨®n m¨¢s desahogada en un r¨¦gimen de permutas que le permit¨ªa jugar en todos las zonas del ataque sin comprometerse excesivamente en las tareas defensivas. Sus comienzos en la zona central del ataque no fueron buenos y Bale no tard¨® en escuchar las primeras cr¨ªticas de parte del Bernab¨¦u, que reclamaba al jugador en la banda izquierda, posici¨®n en la que hab¨ªa explotado en el Tottenham. Con el tiempo, sin embargo, comenz¨® a mostrar su mejor versi¨®n.

Nadie podr¨¢ acusar a Ben¨ªtez de no haber respetado su compromiso de elevar el nivel de Bale. Lo que no consigui¨® hacer el entrenador fue ajustar la BBC al funcionamiento colectivo del equipo. Bale lleg¨® al partido contra el Valencia en un buen momento despu¨¦s de sumar cuatro goles y dos asistencias en las dos ¨²ltimas jornadas. Se present¨® como m¨¢ximo asistente de la Liga con ocho pases de gol y en Mestalla se desat¨® con el tanto que parec¨ªa salvar a su salvador, pero el Valencia empat¨® y Ben¨ªtez fue destituido al d¨ªa siguiente. Justo cuando Bale parec¨ªa alcanzar el pico de su producci¨®n.

Zidane le arropa en su primer d¨ªa

El gal¨¦s teme perder ahora la comodidad alcanzada estos meses con el entrenador. Zidane tratar¨¢ de conquistar su coraz¨®n. El franc¨¦s puede exhibir credenciales. En 2013 reconoci¨® haber insistido en su fichaje. "Desde el primer momento anim¨¦ al presidente en que hiciera un esfuerzo en la contrataci¨®n de Bale", dijo en una entrevista a Real Madrid TV.?

El gal¨¦s teme perder ahora la comodidad alcanzada estos meses con el Ben¨ªtez.

Ayer, en su primera rueda de prensa, Zidane quiso mostrar especialmente su gran respaldo a Bale instantes despu¨¦s de reconocer el malestar del jugador por la marcha de Ben¨ªtez. "Entiendo que pueda estar molesto porque era importante para ¨¦l, pero yo voy a darle el mismo cari?o que ten¨ªa con Rafa. Es un jugador muy importante para la plantilla y fundamental para el equipo. Le voy a dar todo el cari?o para que juegue bien. Es un jugador fundamental para el equipo. Le voy a dar todo mi apoyo", dijo.

Posible regreso a Inglaterra

Lo cierto es que labor de Zidane con Bale va a ser decisiva para el futuro del futbolista en Madrid. En Inglaterra ya se especula con su posible regreso a la Premier a final de temporada. Lo har¨ªa de la mano del Manchester United, equipo que seg¨²n el Daily Mail?ofrecer¨ªa una cantidad cercana a los 100 millones de euros.?

Adem¨¢s, seg¨²n apunta la prensa brit¨¢nica, intentar¨¢n convencerle con uno de sus ¨ªdolos, Ryan Giggs. Su compatriota, actualmente asistente de Louis Van Gaal, se antoja esencial en el Manchester United para lograr el fichaje de Bale, un viejo deseo del club ingl¨¦s, que pele¨® con el Madrid por su fichaje en 2013.

El papel que le otorgue Zinedine Zidane en su nuevo Real Madrid marcar¨¢ el porvenir del astro gal¨¦s, que hoy mi¨¦rcoles se ha entrenado por primera vez a las ¨®rdenes del franc¨¦s.