El Athletic quiere la Copa

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JAVIER P?REZ, Vila-real

La Copa es un t¨ªtulo mayor para el Athletic, no en vano posee 23 galardones. Gran parte de su hermosa historia la ha forjado en la competici¨®n copera, a la que rinde pleites¨ªa y veneraci¨®n. Es su torneo. Y le debe respeto. Se lo concedi¨® Valverde en El Madrigal apostando por el que entendi¨® que deb¨ªa ser su mejor once para hacer buena la remontada de pasi¨®n de siete d¨ªas atr¨¢s ante el Villarreal al calor de San Mam¨¦s, al que nunca le falla el aliento y que insufla ¨¢nimo y fuerza a sus jugadores.

No negoci¨® la Copa el Athletic como s¨ª lo hizo el Villarreal que est¨¢ en otros menesteres. La Champions venidera, el glamour y el dinero de la m¨¢xima competici¨®n de clubes a nivel continental, le seduce m¨¢s que nada, incluso dejando escapar la posibilidad de alcanzar un t¨ªtulo que no posee, salvando menos estaciones que en la Liga. Conservar hasta el final de temporada el cuarto puesto que ostenta, es lo que verdaderamente interesa al Villarreal de Roig.

Marcelino cambi¨® de arriba abajo al equipo. Y le fue mal en el primer acto superado por un Athletic superior en el centro del campo y fiable en las ¨¢reas. Wiliams consigui¨® un nuevo gol de ventaja en la eliminatoria que supo conservar con criterio en la primera mitad, y con esfuerzo y concentraci¨®n en el segundo acto, ante un Villarreal con m¨¢s ardor que f¨²tbol mejorado con la entrada de Soldado, Jonathan dos Santos y Denis Su¨¢rez al final.

Salvo Iago Herrer¨ªn en la porter¨ªa por Iraizoz, el Athletic dispuso de todo, tambi¨¦n lo mejor en ataque, con Wiliams y Aduriz. El m¨ªnimo que ped¨ªa Valverde a los suyos era mantener la renta alcanzada en San Mam¨¦s tras remontar dos goles de desventaja ante un Villarreal con una versi¨®n rebajada, pr¨¢cticamente los mismos jugadores que form¨® en Bilbao, incluyendo a Rodri, exquisito centrocampista de 19 a?os del filial, con sus futbolistas m¨¢s determinantes descansando. La Copa interesa, pero menos, deducci¨®n f¨¢cil vista la alineaci¨®n expuesta por Marcelino.

Al Athletic de Valverde le define la intensidad y la presi¨®n adelantada que efect¨²a. Y a ello se dedicaron los leones desde el inicio con la direcci¨®n de Be?at, ante un Villarreal menor pero, con todo, de buen pie. Entend¨ªa el t¨¦cnico rojiblanco que su equipo necesitaba marcar para no verse sorprendido, que defender el resultado de la ida podr¨ªa resultar un suicidio ante los amarillos. Y a los 20 minutos consigui¨® su prop¨®sito el Athletic, beneficiado por la apat¨ªa amarilla que dej¨® que Laporte cruzara el centro del campo, permitiendo que el central franc¨¦s filtrara un pase a Wiliams. Musacchio y Bailly no atendieron a cerrar el desmarque profundo del delantero vasco de origen liberiano y Wiliams, que crece partido a partido, resolvi¨® cruzando el esf¨¦rico ante la salida de Barbosa.

La reacci¨®n del Villarreal fue tan loable como est¨¦ril ante un Athletic bien dispuesto, m¨¢s dotado y compenetrado, con mejores argumentos y dos jugadores en ataque enormes y en estado de gracia, como Wiliams y Aduriz que ponen el broche al trabajo coral del conjunto de Valverde. El Villarreal no le alcanzaba con su esfuerzo para inquietar a Iago Herrer¨ªn al que los guantes le serv¨ªan para mantener calientes las manos.

Ya en segunda mitad, en el inicio, Samuel Garc¨ªa tuvo que retirarse del terreno de juego lesionado. Su sustituto, Soldado, tard¨® cinco minutos en entrar en el terreno de juego, realizando el delantero valenciano un ligero calentamiento mientras atend¨ªa las explicaciones de Rub¨¦n Ur¨ªa, el segundo de Marcelino. Para entonces, el Athletic ya se encontraba inc¨®modo ante el arranque de orgullo amarillo, con Velasco Carballo, el ¨¢rbitro del encuentro, advirtiendo a Aduriz que iba a ser expulsado si reiteraba sus protestas. El bal¨®n era del Villarreal, ya en el ¨²ltimo tramo del encuentro con Jonathan dos Santos y Denis Su¨¢rez en el c¨¦sped. Cambios tard¨ªos. El Athletic supo mantener la seriedad y la calma para pasar a cuartos de final de una Copa a la que siempre aspira.