Ambici¨®n sin gol del Atl¨¦tico ante el PSV

La falta de gol, su gran asignatura pendiente en este curso, penaliz¨® al Atl¨¦tico en Eindhoven. La valent¨ªa con la que se emple¨® el equipo y tambi¨¦n Simeone en su planteamiento no reflej¨® ese inc¨®modo cero a cero para la vuelta. Le queda el regusto amargo de esa apuesta atrevida en casa del campe¨®n holand¨¦s, que sali¨® vivo, pero fue controlado y pasado por encima por su rival en la mayor parte del encuentro. Once contra once, los jugadores de Simeone fueron mejores y contra diez, la ¨²ltima media hora, asumieron el control total del juego. En ese tramo la falt¨® una mayor claridad en los ¨²ltimos pases, pero apenas tuvieron sobresaltos y metieron al PSV en su campo, que se defendi¨® con todo para alargar su vida en esta eliminatoria hasta los card¨ªacos 90 minutos que se esperan en el Calder¨®n

El partido lo presidi¨® desde el inicio el voltaje nervioso de las eliminatorias de la Copa de Europa. Esa corriente que convierte el juego en un toma y daca donde m¨¢s favorecido por las imprecisiones que por los aciertos. Apareci¨® ese gusanillo que hace temblar las piernas a la hora de tocar el bal¨®n y descompone los posibles planes. Si Simeone buscaba un mayor control de la pelota con la titularidad de ?liver no la tuvo porque todo vir¨® a un ida y vuelta que nac¨ªa en cada p¨¦rdida.

De entrada la apuesta por ?liver gener¨® que el PSV respetara al Atl¨¦tico m¨¢s de los esperado. No fue a buscarle arriba, pero quiso ser un equipo corto, de l¨ªneas juntas en la zona media, con la defensa adelantada. Ah¨ª vio el agujero el Atl¨¦tico y pudo sentenciar la eliminatoria en el primer tiempo. El equipo de Simeone ense?¨® oficio buscando con insistencia esa rendija que ofrece la lentitud de Bruma y H¨¦ctor Moreno para correr hacia atr¨¢s. A los tres minutos el zaguero mexicano se vio sorprendido por un bal¨®n largo a su espalda que recogi¨® Vietto. El punta argentino lleg¨® con la suficiente ventaja como para meter la puntera y picar suavemente la pelota por encima de Zoet. La trayectoria mansa hacia el gol la cort¨® Bruma bajo palos. Por un socav¨®n similar y a la carrera tambi¨¦n se col¨® Koke que se precipit¨® con un intento de vaselina inocente. Esa debilidad fue acentuada de nuevo con otra pelota larga para Griezmann que hurg¨® en la herida. El franc¨¦s tambi¨¦n opt¨® por un toque suave, pero se encontr¨® con el dominio del mano a mano que exhibi¨® Zoet. El meta primero le achic¨® los espacios al franc¨¦s para despu¨¦s aguantarle lo suficiente y sacarle con la manopla el intento delicado y a media altura de cruzarle la pelota. En esas tres ocasiones tuvo el Atl¨¦tico el partido y puede que la eliminatoria. De nuevo asom¨® esa falta de gol alarmante. Esta vez no se puede decir que el Atl¨¦tico no gener¨® ocasiones por falta de juego. Los tres estuvieron enfilados para marcar.

Aliviado por esos errores el PSV apenas tuvo capacidad de respuesta. No pes¨® Guardado en la salida del bal¨®n y tampoco la velocidad de sus extremos, Narsingh y Locadia. Filipe Luis firm¨® una noche sobria y perfecta en el cierre y no perdi¨® ning¨²n uno contra uno. Al otro lado tambi¨¦n Juanfran estuvo soberbio. Los dos laterales contaron con las ayudas de sus centrales y contribuyeron a evitar que floreciera ese juego por las alas tan acad¨¦mico y cl¨¢sico de la escuela holandesa que deb¨ªa tener como finalizador a Gast¨®n Pereira, la opci¨®n elegida por Cocu para suplir la baja del sancionado De Jong. Fue el uruguayo el que ayud¨® a Propper a penetrar en el ¨¢rea hasta plantarse ante Oblak, que le sac¨® con el pecho el remate. Esa fue la ¨²nica ocasi¨®n que tuvo el PSV, al que solo los rugidos de su afici¨®n sostuvieron.

La salida del vestuario del Atl¨¦tico confirm¨® su ambici¨®n. Desde el inicio del segundo acto se meti¨® en el campo del PSV. Al equipo de Cocu le pes¨® demasiado la baja de De Jong no solo porque con ¨¦l en el campo su equipo embotella m¨¢s a los contrarios, sino porque tambi¨¦n le ofrece desahogo en la salida con su juego de espaldas. Ahogado el PSV en una presi¨®n valiente del equipo de Simeone, el partido fue todav¨ªa m¨¢s del Atl¨¦tico. Gabi con un disparo lejano volvi¨® a confirmar que era la noche de Zoet. ?liver empez¨® a pesar m¨¢s en el juego y una combinaci¨®n suya con Juanfran la desperdici¨® Torres. El chico fue el que m¨¢s kil¨®metros recorri¨® y el que firm¨® un mejor porcentaje de pases en un partido de menos a m¨¢s.

La expulsi¨®n de Gast¨®n Pereiro por doble amarilla entreg¨® por completo el gobierno del encuentro a los colchoneros. Se meti¨® atr¨¢s el PSV sin ning¨²n rubor, tratando de mantener ese empate a cero que le diera vida en el Calder¨®n. Simeone tuvo claro el trazo del encuentro con esa ventaja num¨¦rica y mantuvo a ?liver. Prefiri¨® dejar fuera a Sa¨²l para dar entrada a Correa. No hay reproches para el t¨¦cnico porque todo lo que trat¨® de cambiar siempre fue con la intenci¨®n de dominar el partido y sentenciar la eliminatoria. No pudo, pero lo busc¨®.