Granada y M¨¢laga, a paso de tortuga
Empate a cero en un partido donde el local Succes goz¨® de dos claras ocasiones de gol y los de Gracia se defendieron de manera estupenda
Cuando uno se juega la vida, un punto puede ser la propia vida. Empate a empate, y ya van cuatro, el Granada se aferra a la salvaci¨®n mientras que el M¨¢laga, mucho m¨¢s equipo, m¨¢s compacto, se llev¨® otro que apenas le sirve en su pelea por alcanzar la s¨¦ptima plaza, de tintes europeos. El M¨¢laga es un conjunto espectacular en defensa, bien dirigido por Javi Gracia, pero al que le falta un delantero de tron¨ªo. Sin Charles, sancionado, solo tuvo dos ocasiones de gol en los dos primeros minutos de partido. Luego, apenas lleg¨® al ¨¢rea de Andr¨¦s Fern¨¢ndez a pesar del gran partido de Chory Castro. Ech¨® en falta la creatividad de Juanpi. El Granada s¨ª tuvo dos claras ocasiones de gol. En ambas el protagonista fue Success, que lo mismo provoc¨® el delirio que la desesperaci¨®n de la grada. El delantero fall¨® en dos ocasiones clamorosas, aunque en la segunda el portero Ochoa le arrebat¨® el bal¨®n con una rapidez felina. El valor real del empate solo se conocer¨¢ al final de la jornada, cuando jueguen los rivales directos de Granada y M¨¢laga. Puede ser un tesoro o un premio escaso. Lo que s¨ª deja el partido son dos conclusiones claras. Qu¨¦ completo ser¨ªa el M¨¢laga si tuviera dos buenos delanteros y c¨®mo le hace falta a Success traducir tanta potencia en calidad futbol¨ªstica.
Si el derbi regional se hubiera jugado como los dos primeros minutos, el M¨¢laga se hubiera impuesto con una goleada de esc¨¢ndalo. El Granada pelea con seriedad por la salvaci¨®n, a paso de tortuga, por lo que result¨® inexplicable su falta de tensi¨®n en los cinco primeros minutos. El M¨¢laga, con los deberes hechos y algunas posibilidades de pelear por Europa, barri¨® a su rival con un inicio de partido intenso, pleno de velocidad y desborde. Algo parecido a lo que ocurri¨® hace un par de jornadas en el choque disputado en Sevilla ante el Betis. Entonces fue Ad¨¢n el que salv¨® a los verdiblancos. En esta ocasi¨®n le toc¨® a Andr¨¦s Fern¨¢ndez, r¨¢pido en un rebote de su propia defensa despu¨¦s de una de las especialidades del M¨¢laga, el bal¨®n parado. A los dos minutos, el propio portero sali¨® algo tarde ante Cop, pero abri¨® los brazos para evitar el gol del croata, que pelea por jugar la Eurocopa con su selecci¨®n.
Los silbidos de la fiel afici¨®n del Granada tuvieron el efecto de despertar a sus jugadores, dormidos y sin tensi¨®n. Al mismo tiempo, el M¨¢laga se relaj¨®, lo que provoc¨® que las fuerzas se igualaran. El equipo de Jos¨¦ Gonz¨¢lez, con un atrevido planteamiento, encontr¨® premio a su juego despu¨¦s de que Success recibiera un pase muy bueno de Rochina. El delantero, solo ante Ochoa, lanz¨® fuera. Success es un futbolista con unas condiciones f¨ªsicas estupendas, aunque con evidentes limitaciones t¨¦cnicas. El d¨ªa que aprenda el oficio ser¨¢ un delantero temible. Ahora, es un potro desbocado.
Por eso, cuando en el minuto 78 se qued¨® solo ante Ochoa despu¨¦s de un gran pase de El Arabi, poco aficionados confiaron en que hiciera gol. Su incapacidad para superar al portero en carrera fue tremenda. Tambi¨¦n result¨® satisfactoria la reacci¨®n de Ocha, r¨¢pido para tocar el bal¨®n y evitar el golpeo de Success. La grada la tom¨® con el delantero mientras se preguntaba por qu¨¦ Jos¨¦ Gonz¨¢lez no agotaba los cambios y sacaba a Pe?aranda, autor del gol del Granada en San Mam¨¦s la pasada jornada. El talento venezolano se qued¨® en el banquillo y su equipo se tuvo que conformar con un punto. As¨ª, a paso de tortuga, el Granada intenta escapar del abismo de la Segunda.
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