El Bar?a y el esp¨ªritu de Juanito
Perdi¨® de vista un instante Piqu¨¦ a Oyarzabal, quiz¨¢ porque el condecorado defensa andaba pensando con qu¨¦ ingeniosa frase nos iba a alegrar la vida en las redes sociales, y el delantero de la Real Sociedad, de 19 a?itos, clav¨® su cabezazo en la red de la porter¨ªa del FC Barcelona. Noventa minutos despu¨¦s, y certificada la derrota azulgrana en Anoeta, descubrimos que todav¨ªa hay Liga, un eufemismo que viene a querer decir que el Bar?a est¨¢ dispuesto a regalar el t¨ªtulo, un hecho poco cre¨ªble. Y menos cre¨ªble a¨²n si se atiende a las palabras de Luis Enrique, que se present¨® ante los periodistas tras el partido y, lejos de calificar de superficial, gratuito y poco profesional el an¨¢lisis de aquellos, como hizo en ocasiones anteriores, contest¨® con educaci¨®n a cuantas cuestiones le fueron educadamente planteadas. Asegur¨® que el l¨ªder sigue siendo el Bar?a, disculp¨® a sus jugadores (¡°no son m¨¢quinas, son personas¡±), apel¨® al escudo y ensalz¨® que era esta ¡°una maravillosa oportunidad de demostrar que somos el mejor equipo del mundo¡±. Y remat¨® sus acertadas palabras con el siguiente mensaje: ¡°Ahora es cuando necesitamos a todos los cul¨¦s¡±. Y a uno, en su ignorancia y cargado de demagogia, esas declaraciones le llevaron a recordar aquello que tanta chufla y jarana suele provocar, y provoca, en el Camp Nou, y que ha venido en llamarse El esp¨ªritu de Juanito.
All¨¢ por 1981, y en v¨ªsperas de un cl¨¢sico, a Helenio Herrera se le pregunt¨® por Juanito, entonces una de las grandes estrellas del Madrid. ¡°Ning¨²n problema. Juanito se marca solo¡±, contest¨® el exc¨¦ntrico entrenador del Bar?a. As¨ª que Juanito se marc¨® a s¨ª mismo en el Camp Nou y consigui¨® un gol, tras el cual corri¨® raudo al banquillo que ocupaba Herrera, hombre ya de edad provecta, para aconsejarle que se fuera a un asilo. Dicen que dijo una vez Helenio Herrera que con 10 futbolistas se juega mejor que con once, una memez que no ten¨ªa por qu¨¦ llevarle a un asilo pero s¨ª a alg¨²n contrastado centro de salud. El propio Luis Enrique lo neg¨® tras el partido de Anoeta: ¡°Con un jugador m¨¢s se defiende mejor¡±, dijo. Que es lo que no pudo hacer el Atl¨¦tico en el partido de Champions del pasado martes, en el que cay¨® 2-1 tras jugar una hora con un futbolista menos por la expulsi¨®n de Fernando Torres.
Parece adivinar Luis Enrique que al Bar?a ya no le vale con lo que est¨¢ haciendo y necesita un plus, algo que tenga que ver con las emociones. Porque ahora va a resultar que el f¨²tbol, adem¨¢s de la posesi¨®n, el toque y tener en n¨®mina al mejor jugador del mundo, es algo m¨¢s. El escudo, la afici¨®n, la motivaci¨®n. Frusler¨ªas de ese tipo. Y todo eso no cuadra con al menos uno de sus jugadores. He ah¨ª el ejemplo de Arda Turan, que antes de abandonar en junio el Atl¨¦tico en direcci¨®n al Camp Nou explic¨® as¨ª su adi¨®s: ¡°En el Atl¨¦tico se corre mucho¡±, dijo dejando la duda de por qu¨¦ no eligi¨® otra actividad profesional, el ajedrez por ejemplo.
Quiere agitar Luis Enrique el lado sentimental del barcelonismo y no le falta raz¨®n. Por ah¨ª tambi¨¦n se ganan batallas, por mucha risi¨®n que provoque a los guardianes del purismo azulgrana. Y una batalla futbol¨ªstica ser¨¢ el partido del mi¨¦rcoles ante el equipo m¨¢s batallador, el Atl¨¦tico, que a¨²n se lame las heridas del partido de ida, ese en el que la tarjeta roja a Torres lo decidi¨® todo. Dados los antecedentes, habr¨¢ que ver cu¨¢l es la reacci¨®n del ¨¢rbitro en el sorteo entre los capitanes previo al choque, no sea que Gabi le d¨¦ la mano a Iniesta con demasiada fuerza, lo que acarrear¨ªa su inmediata expulsi¨®n. Y que conste que esto ¨²ltimo es una broma. O no.
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