Contra el enorme Andrew Johnston chocaron todos en Valderrama

En los pasillos de la casa club de Valderrama, Manolo Pi?ero, uno de los hist¨®ricos del golf espa?ol, intenta consolar a Pep Angles, el ¨²ltimo joven que ha llegado con ambiciones. ¡°Al¨¦grate de que te haya pasado, porque eso significa que estabas ah¨ª. Si no intentas ganar no te pasa¡±, le dice el capit¨¢n del equipo ol¨ªmpico espa?ol al barcelon¨¦s, de 23 a?os, que intentaba ganar el primer torneo en el que participaba en el circuito europeo y se hundi¨® en el 11? (cu¨¢druple bogey) buscando con el drive un eagle que le mantuviera en la pelea. En el corrillo confortante est¨¢ tambi¨¦n su maestro de swing, V¨ªctor Garc¨ªa, quien a la vez es padre del anfitri¨®n y favorito, Sergio Garc¨ªa, de 36 a?os, a quien sobraron dos golpes, un dolor de mu?eca fastidioso y un fade exagerado con un hierro en el 18 para ganar su segundo Open de Espa?a, 14 a?os despu¨¦s de su victoria en Las Palmas, cuando a¨²n era El Ni?o. Garc¨ªa, con la mejor vuelta (67 golpes) del lluvioso domingo que empap¨® alcornoques y greenes, se qued¨® a dos golpes del colosal londinense de 27 a?os Andrew Johnston, una mezcla de Meat Loaf, el Samwell Tarly de Juego de Tronos y un gnomo de jard¨ªn, cuya victoria, su primer triunfo en el circuito europeo, es un tributo a la pluralidad del Tour.

Contra la solidez y el toque alrededor de green a lo John Daly de Johnston, y contra las trampas del campo de Valderrama, chocaron todos. Se qued¨® corto en remontada Garc¨ªa, pese a que llevaba en el cogote el aliento de su amigo Gareth Bale, quien se salt¨® las cuerdas para seguirle muy cerca, y se estrellaron el serio Martin Kaymer y el sereno holand¨¦s Joost Luiten, y tambi¨¦n Angles,el joven de Llavaneras, quien al menos se llev¨® una buena experiencia, y Pablo Larraz¨¢bal, de rojo y del Prat, quien se acab¨® rompiendo tras mantener una tensi¨®n enorme, desde el jueves cerca del liderato.

Ante la prensa, m¨¢s tarde, el feliz londinense Johnston mira y vuelve a mirar la peana del trofeo, en la que como medallas est¨¢n inscritos los nombres de los 44 ganadores anteriores. Lee Faldo, lee Langer, lee Ballesteros, y pone cara de alucinado. "Esto parece rid¨ªculo, ?no?", dice y despierta una gran carcajada. "Mi nombre junto al de todos estos... Esto es un sue?o".

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