Mejor goles que puntos para el Barcelona en Riazor
Liderado por la pegada de Luis Su¨¢rez y el juego de Iniesta, el equipo azulgrana defendi¨® su liderato en la Liga BBVA con un fest¨ªn ante un Deportivo paralizado
El Barcelona no es un equipo de puntos sino de goles, consecuente con la n¨®mina de su plantilla, presidida por el tridente formado por Messi, Luis Su¨¢rez y Neymar. A juzgar por su actuaci¨®n en Riazor, la defensa del gol average resulta m¨¢s estimulante para los azulgrana que administrar la mayor de las diferencias que haya podido tener respecto al Atl¨¦tico (+9) y el Madrid (+12). Atrapado en la tabla despu¨¦s de encadenar tres derrotas consecutivas (Madrid, Real Sociedad y Valencia) y ceder un empate (Villarreal), el Barcelona detuvo su ca¨ªda con un marcador rotundo la jornada en que se dudaba de su condici¨®n de l¨ªder de la Liga. A m¨¢s presi¨®n, mejor fue su respuesta, sobre todo por parte de Su¨¢rez, que ya ha marcado m¨¢s goles que el fen¨®meno Ronaldo el a?o de Robson (49 ante 47). El uruguayo fue un martillo que golpe¨® sin parar las delicadas asistencias de Messi y el juego primoroso de Iniesta. Nadie domina el tiempo y el espacio como Iniesta, la zurda de Messi es ¨²nica en el mundo y pocos artilleros tienen la pegada de Su¨¢rez.
Los goles amenizaron un partido que el Bar?a empez¨® en la sala de espera de Riazor. No era protagonista sino espectador, previsible en la alineaci¨®n y pasivo en el despliegue, sin m¨¢s novedad que la de Bartra, titular por la sanci¨®n de Piqu¨¦. Tampoco hab¨ªa marcador al que mirar porque los encuentros del Atl¨¦tico y el Madrid empezaban m¨¢s tarde y no antes, como era costumbre, y en el banquillo azulgrana solamente se echaba de menos a Aleix Vidal, descartado sorprendentemente por Luis Enrique. Ha decidido el entrenador que el tridente no lo toca ni Dios. As¨ª que el Bar?a ganar¨¢ o perder¨¢ la Liga y la Copa con la delantera que capitul¨® en la Champions despu¨¦s del triplete alcanzado la temporada pasada en Berl¨ªn. Y la insistencia del t¨¦cnico se vio recompensada en A Coru?a.
Luis Su¨¢rez apenas tard¨® diez minutos en poner el 0-1. El uruguayo no necesita que el equipo juegue bien ni mal para marcar goles, sino que se mueve por instinto y por rachas, como los mejores 9. El Bar?a tocaba al pie, sin profundidad ni ritmo, muy contemplativo, pendiente de los pases interiores de Iniesta, cuando la pelota acab¨® en el c¨®rner derecho del marco de Manu. Rakitic bot¨® el saque de esquina y Su¨¢rez enganch¨® el bal¨®n con la zurda despu¨¦s de ganar la espalda a Sidnei. El central reclam¨® una falta que no pareci¨® ni advirti¨® Burgos Bengoetxea. El tanto anim¨® al espantado Barcelona. El equipo hab¨ªa encontrado la manera de ganar un encuentro vital a partir de la jerarqu¨ªa de Iniesta y de la bota de Su¨¢rez. El charr¨²a repiti¨® poco despu¨¦s, habilitado por el toque de Messi, en una acci¨®n iniciada de nuevo por el excelente Iniesta.
Su¨¢rez perdon¨® incluso el 0-3 antes del descanso cuando el Barcelona ya hab¨ªa conseguido domar el partido a pesar de su manifiesta inestabilidad defensiva, expresada en el disperso Alves. No supo rematar el Deportivo sus reiteradas llegadas propiciadas por la poca intensidad del Bar?a. Bravo gateaba, Bartra achicaba y no atinaba Borges. Muy d¨¦bil en su ¨¢rea, impreciso y nervioso, el Bar?a estuvo en cambio especialmente l¨²cido en las transiciones de Iniesta y en el golpeo de Su¨¢rez. El segundo gol convirti¨® definitivamente el partido en un mon¨®logo azulgrana, paralizado como se qued¨® el Deportivo.
Los goles fueron cayendo acompasadamente en el marco de Manu, el tercer portero del equipo de V¨ªctor del Amo. Luis Su¨¢rez marc¨® dos m¨¢s, para un total de cuatro, y asisti¨® en los de Rakitic, Messi y Neymar. El encuentro se puso tan dulce para los azulgrana que se cumplieron los mejores deseos de su hinchada, como por ejemplo, que marcara Neymar despu¨¦s de cinco jornadas de sequ¨ªa y que tambi¨¦n viera premiada su actuaci¨®n Bartra: in¨¦dito durante la temporada, el central expres¨® su calidad ofensiva con el 0-7.
Luis Su¨¢rez apenas tard¨® diez minutos en poner el 0-1. El uruguayo no necesita que el equipo juegue bien para marcar, se mueve por instinto
Los azulgrana recuperaron sus mejores sensaciones ofensivas hasta completar un mambo: 0-8. Volvieron a ser contundentes en el ¨¢rea despu¨¦s de que Su¨¢rez acabara con el desbloqueo provocado por la derrota ante el Madrid. A falta de cuatro partidos, el Bar?a encontr¨® el punto de inflexi¨®n necesario para competir por el t¨ªtulo a base de goles.
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