Valer¨®n cierra su carrera futbol¨ªstica y abre la leyenda

A un mes de cumplir los 41 a?os de edad cuelga las botas Juan Carlos Valer¨®n, uno de los futbolistas con m¨¢s sutileza, clase y talento que han pisado los campos espa?oles en los ¨²ltimos dos decenios. Se va feliz, asegura, tras dejar un legado m¨¢s rico en categor¨ªa que en t¨ªtulos. Nunca gan¨® una liga, jam¨¢s levant¨® un t¨ªtulo europeo, apenas alz¨® una Copa del Rey, la del ¡°Centenariazo¡± en 2002, y lo hizo tras caer antes en tres. Jug¨® 46 partidos con la selecci¨®n espa?ola y conoci¨® el sinsabor de las eliminaciones en Holanda, Corea y Portugal unos a?os antes de que la Roja entregada a su estilo empezase a conquistar el mundo. Y sin embargo nadie puede discutir la fuerza de su relato futbol¨ªstico, ovacionado en todos los campos, incluso en los de los rivales m¨¢s encarnizados que se oponen a la camiseta que defiende.

Valer¨®n se marcha tras disfrutar de un ep¨ªlogo en casa. ¡°Han sido los tres a?os m¨¢s bonitos de mi carrera¡±, apunta. Los pas¨® en Las Palmas, club al que, seg¨²n asegura su presidente Miguel ?ngel Ram¨ªrez, quedar¨¢ unido como ¡°capitan de honor y embajador¡±, tambi¨¦n ligado a las categor¨ªas formativas en lo que puede ser un primer paso a un inmediato futuro como entrenador que el propio Valer¨®n no quiere confirmar ni desmentir. ¡°Por ahora no pienso en eso¡±, despeja. Dicen quienes le han tratado en un vestuario que entre sus principales valores se encuentra el del dictado ante situaciones de m¨¢xima ansiedad. ¡°Es el mejor psic¨®logo deportivo que conozco¡±, asegura su hermano Miguel ?ngel, que le precedi¨® en el camino a la elite, pero que tuvo que dejar el f¨²tbol tras las secuelas de una lesi¨®n en un partido de Copa contra el Barcelona.

Me siento bien con lo que estoy haciendo y no podr¨ªa so?ar un mejor final que despedirme con mi gente"

Valer¨®n tambi¨¦n tuvo que luchar contra ese infortunio que le llev¨® a pasar temporadas en blanco y a sufrir tres operaciones en su rodilla izquierda. A la postre el injerto de un cad¨¢ver y la participaci¨®n de un panel de m¨¢s de veinte expertos en medicina y readaptaci¨®n consiguieron llevarle de vuelta a los terrenos de juego. Tambi¨¦n su constancia. M¨¢s indomable mentalmente de lo que apuntaba su en apariencia fr¨¢gil condici¨®n, hombre de palabras justas, de timidez y respeto, con un profundo amor por la pureza futbol¨ªstica. ¡°El car¨¢cter es pedir la pelota y jugarla¡±, deja dicho mientras otros promueven el retorno del bal¨®n en largo y el esfuerzo en la segunda jugada. Tampoco amante de los extremismos: ¡°A veces la calidad se confunde con el juego bonito y vistoso, para m¨ª la calidad es el rendimiento y tener categor¨ªa¡±.

Ahora se va del campo, pero nunca del f¨²tbol. ¡°La decisi¨®n es m¨ªa. No ha sido diferente al final de otras temporadas, habl¨¦ con el club, con t¨¦cnicos y compa?eros y tras una reflexi¨®n creo que es el momento id¨®neo. Me siento bien con lo que estoy haciendo y no podr¨ªa so?ar un mejor final que despedirme con mi gente¡±, apunta el 21, dorsal que quiere que en Las Palmas herede Jonathan Viera. Antes tendr¨¢ minutos para despedirse de su gente este domingo en el partido contra el Athletic. ¡°Quer¨ªa irme sin hacer mucho ruido¡±, dice. Pero su leyenda se lo impide.