Del coma y la par¨¢lisis al debut en Primera

¡°Un d¨ªa me levant¨¦, me quise quitar el pijama y no pude, no pod¨ªa levantar los brazos. Fue tremendo. Es como si usted ahora quisiera coger un bol¨ªgrafo, su cerebro quiere hacerlo, pero la mano no responde¡±, relata Fabio Pisacane, defensa del Cagliari que debut¨® en la Serie A este domingo a los 30 a?os y despu¨¦s de haber superado una grav¨ªsima enfermedad que le dej¨® en coma 22 d¨ªas. Sufri¨® el s¨ªndrome de Guillain-Barr¨¦, un trastorno neurol¨®gico en el que el sistema inmunitario ataca al sistema nervioso. Es la lucha de tu cuerpo contra tu cuerpo. Las se?ales no llegan y los m¨²sculos no responden. En el peor de los casos se llegan a sufrir par¨¢lisis que pueden causa la muerte.

Pisacane ten¨ªa 14 a?os el d¨ªa que intent¨® quitarse el pijama y no pudo. Llevaba un mes en G¨¦nova. Hab¨ªa dejado N¨¢poles para irse solo ¡ª¡°y con la maleta llena de sue?os e ilusiones¡±¡ª a las categor¨ªas inferiores del Genoa. Quer¨ªa ser futbolista profesional. So?aba con la Serie A. ¡°En un primer momento esa ma?ana pens¨¦ que era el ¨¢cido l¨¢ctico, que igual estaba pagando el esfuerzo de los entrenamientos. Pero no, no era ninguna de las dos cosas. Fue un shock¡±, explica en conversaci¨®n telef¨®nica antes de viajar a Tur¨ªn para medirse a la Juve.

¡°Me hicieron unas pruebas, pero nadie encontraba una explicaci¨®n. Recuerdo todav¨ªa la frase que me solt¨® el doctor del equipo: ¡°En los 30 a?os que llevo en la profesi¨®n, nunca hab¨ªa visto una cosa as¨ª¡±, rememora ahora. Le sacaron l¨ªquido de la m¨¦dula y desde un hospital de Roma lleg¨® el diagn¨®stico. ¡°La triste noticia¡±, como la llama ¨¦l.

Recuerda perfectamente la fecha de entrada y de salida del hospital, los d¨ªas que estuvo en coma y en reanimaci¨®n. ¡°Cuando veo ahora las fotos no me reconozco¡±, cuenta. Recuerda tambi¨¦n c¨®mo empeoraba a diario y las curas que no funcionaban. ¡°Cada vez iba a peor. El tratamiento moderno no funcionaba [la plasmaf¨¦resis: se extrae la sangre y se procesa de forma que los gl¨®bulos blancos, rojos y las plaquetas se separen del plasma. las c¨¦lulas de la sangre se devuelven luego sin el plasma, que el organismo sustituye r¨¢pidamente]. Estaba un d¨ªa bien, pero por la noche me encontraba de nuevo igual o peor. La ¨²nica alternativa que quedaba para salvarme la vida era el m¨¦todo antiguo de la cortisona. Le dijeron a mi padre que eso no iba a funcionar. Pero a m¨ª la cortisona me salv¨® la vida¡±, explica ya recuperado del todo. Una vez que se supera la enfermedad, esta no deja secuelas. ¡°Es como cuando te curas de la gripe¡±, dice el defensa.

"Un d¨ªa me levant¨¦, me quise quitar el pijama y no pude, no pod¨ªa levantar los brazos. Fue tremendo"

Su padre siempre estuvo a su lado. ¡°Mi suerte fue tener a un padre que es una roca. Le dijeron que no sab¨ªan ni si pod¨ªa sobrevivir, imag¨ªnese poder jugar al f¨²tbol. Sin embargo, nunca me dej¨® entrever lo que me estaba pasando. Le dec¨ªa: ¡®Pap¨¢, yo un d¨ªa quiero salir de aqu¨ª aunque sea con muletas¡¯. Me respond¨ªa: ¡®Hijo, vas a salir de aqu¨ª por tu propio pie¡±.

Un a?o de rehabilitaci¨®n?

Entr¨® en el hospital un 9 de septiembre (a?o 2000) y sali¨® un 18 de diciembre. La rehabilitaci¨®n dur¨® un a?o. ¡°Ten¨ªa que volver a reactivar los m¨²sculos empezando de cero y m¨¢s en el estado en el que estuve en el hospital¡±, asegura. Pasados esos 12 meses ya estaba jugando partidillos. Un a?o m¨¢s tarde llam¨® al director de la cantera del Genoa que le fich¨® con 14 a?os y le dijo que estaba recuperado y que quer¨ªa volver a jugar.

Empez¨® poco a poco en las categor¨ªas inferiores hasta llegar a equipos de Segunda. En uno de ellos, un director deportivo de un equipo rival le ofreci¨® 50.000 euros para perder. Dijo que no. Y lo denunci¨®. Desde entonces (2011) es embajador mundial de la FIFA para la legalidad. ¡°?C¨®mo iba a aceptar eso! Era impensable que yo, que hab¨ªa tenido una segunda oportunidad para ser futbolista, no protegiera y tutelara el f¨²tbol¡±, afirma.

Siempre crey¨® que pod¨ªa volver. El domingo, despu¨¦s de cumplir su sue?o de debutar en Primera, rompi¨® a llorar. ¡°Nunca tir¨¦ la toalla. Recuerdo que lo primero que le dije a mi padre cuando empez¨® la par¨¢lisis fue: ¡®Si no puedo jugar al f¨²tbol, mejor que me muera¡¯. Era un ni?o de 14 a?os. Ahora con 30 pienso que la vida es un bien tan valioso que no se puede comparar con ning¨²n deporte ni con ninguna otra cosa material. Amo la vida porque me ha dado cosas m¨¢s importantes que el f¨²tbol: mi mujer y mis dos hijos. Hoy juego para que est¨¦n orgullosos de m¨ª. No soy ni Cristiano ni Messi, ni tengo su trascendencia, pero s¨ª me gusta hacer llegar un mensaje a para todos los ni?os que me ven desde casa", dice.?