Donald Trump: ?Inglaterra te necesita!
Lo va a tener dif¨ªcil la Federaci¨®n inglesa para sustituir a Allardyce, pero el estadounidense ser¨ªa un buen candidato
¡°Tiempos desesperados, remedios desesperados¡±. Proverbio latino.
La Federaci¨®n inglesa de f¨²tbol busca un nuevo seleccionador tras la dimisi¨®n forzada esta semana de Sam Allardyce. Big Sam fue cazado con una c¨¢mara oculta contando, pinta de vino (s¨ª, de vino) en mano, lo f¨¢cil que era romper las reglas oficiales para el fichaje de jugadores. El v¨ªdeo sali¨® en la prensa y se tuvo que ir.
Lo va a tener dif¨ªcil la Federaci¨®n ahora. Allardyce puso el list¨®n muy alto durante los 67 d¨ªas que estuvo a cargo de la selecci¨®n inglesa. Las estad¨ªsticas demuestran que ser¨¢ recordado tambi¨¦n como el primer y, quiz¨¢, el ¨²ltimo seleccionador ingl¨¦s imbatido, con un r¨¦cord de victorias del 100%. Un partido jugado, uno ganado.
Se habr¨¢ de demostrar un poco de imaginaci¨®n a la hora de elegir entre los posibles candidatos. La Federaci¨®n inglesa podr¨ªa empezar por tomarse en serio un v¨ªdeo en el que el exjugador franc¨¦s del Manchester United y hoy actor Eric Cantona propone sus servicios como nuevo seleccionador, solemnemente prometiendo que si fuese ¨¦l el elegido jamas volver¨ªa a perder contra Islandia. ¡°Yo, futuro potencial seleccionador ingl¨¦s¡±, declara Cantona mirando a la c¨¢mara, ¡°prometo nunca perder contra una peque?a isla g¨¦lida cuyo portero es un director de cine y cuyo entrenador es un dentista¡±.
Cantona hizo el v¨ªdeo en broma, pero bromas han sido la mayor¨ªa de los nombramientos que se recuerdan para l¨ªder de la selecci¨®n inglesa de f¨²tbol. Especialmente notables fueron los casos de los dos extranjeros, Sven-Goran Eriksson y Fabio Capello, que se murieron de la risa haciendo un m¨ªnimo de trabajo y cobrando sueldos de medio mill¨®n de euros por partido.
La verdad es que Cantona, pese a que su experiencia como entrenador no haya ido m¨¢s all¨¢ del f¨²tbol playa, es una de las opciones m¨¢s serias que hay. Pero quiz¨¢, para evitar una repetici¨®n del mal trago que ha dejado Allardyce, lo indicado ser¨ªa buscar a alguien que no ha sucumbido a la corrupci¨®n que corroe el f¨²tbol profesional. Quiz¨¢ se tenga que buscar un l¨ªder que se haya consagrado fuera del mundo del f¨²tbol.
Ya que los espa?oles est¨¢n de moda ¨²ltimamente en el f¨²tbol ingl¨¦s, una opci¨®n podr¨ªa ser Pedro S¨¢nchez, recientemente dimitido como secretario general del PSOE, o incluso, si la federaci¨®n est¨¢ dispuesta a esperar hasta despu¨¦s del d¨ªa de Navidad, al presidente de gobierno en funciones, Mariano Rajoy-una garant¨ªa de que se perpet¨²e la tradici¨®n de la selecci¨®n inglesa de jugar un f¨²tbol indeciso y sopor¨ªfero. Una apuesta m¨¢s revolucionaria, aunque con el potencial de sembrar cierta confusi¨®n t¨¢ctica (ni de izquierdas ni de derechas sino todo lo contrario), ser¨ªa el l¨ªder de Podemos, Pablo Iglesias, otro que podr¨ªa estar buscando trabajo en a?o nuevo.
Hablando de revoluciones, la opci¨®n bolivariana podr¨ªa ser Nicol¨¢s Maduro, el presidente de Venezuela. Para empezar, sus compatriotas estar¨ªan infinitamente agradecidos a los ingleses si se lo sacaran de una vez de encima. Existir¨ªa el riesgo, eso s¨ª, de que durase poco m¨¢s tiempo que Allardyce, que cayese en la ingenuidad de revelar ante otra c¨¢mara oculta las millonadas que sus camaradas se han apropriado a costa del proletariado venezolano. Pero como una de las cr¨ªticas m¨¢s frecuentes de los jugadores de la selecci¨®n inglesa es que son unos ni?os ricos mimados, Maduro quiz¨¢ sea precisamente el revulsivo que necesitan. Tocar¨ªan fondo, no habr¨ªa ni papel higi¨¦nico en el vestuario, y de las cenizas chavistas el viejo f¨¦nix de Albi¨®n podr¨ªa volver a tomar vuelo.
El mejor candidato, por supuesto, ser¨ªa Donald Trump, otro que podr¨ªa estar buscando una nueva misi¨®n antes de fin de a?o en el caso de que el electorado estadounidense resulte incapaz de reconocer su talento. Trump tendr¨ªa el m¨¦rito de saber crear buen ambiente en el vestuario. Colocar¨ªa a sus jugadores con ex miss universos y les ofrecer¨ªa la oportunidad de ganar m¨¢s dinero que nunca como embajadores de sus campos de golf o cadenas de hoteles cinco estrellas. Su mensaje, id¨¦ntico al que encandil¨® a la naci¨®n inglesa en la campa?a por el Brexit, resonar¨ªa con la afici¨®n de Albi¨®n. ¡°?Recuperemos nuestro pa¨ªs!¡±, clama Trump. ¡°?Hag¨¢moslo grande una vez m¨¢s!¡±. Con sus arengas en el vestuario, Trump alimentar¨ªa un ambiente de xenofobia desenfrenada contra los rivales extranjeros, acorde con el car¨¢cter nacional ingl¨¦s, y aunque quiz¨¢ su equipo tendr¨ªa una tendencia a marcar autogoles la defensa ser¨ªa, por lo dem¨¢s, un muro.
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