Javier Fern¨¢ndez: ¡°?No voy a ser Elvis en tres d¨ªas!¡±

Enfundado en un traje gris un cuerpo menudo acostumbrado a girar sobre s¨ª mismo a varios palmos sobre el hielo, Javier Fern¨¢ndez (Madrid, 25 a?os) visit¨® ayer la redacci¨®n de EL PA?S para charlar con los lectores en Facebook Live sobre los retos de esta temporada. El madrile?o aspira a ganar su tercer t¨ªtulo mundial de patinaje art¨ªstico consecutivo, su quinto europeo tambi¨¦n en l¨ªnea y conquistar por primera vez el Grand Prix, en un nuevo cap¨ªtulo de su rivalidad con el japon¨¦s Yuzuru Hanyu, campe¨®n ol¨ªmpico.

¡°El europeo es m¨¢s f¨¢cil porque no tengo a mis mayores rivales, los asi¨¢ticos y los norteamericanos¡±, explic¨® Fern¨¢ndez, que este a?o mantendr¨¢ su programa corto con La Malague?a, de aires flamencos, y abordar¨¢ un programa largo meti¨¦ndose en la piel de Elvis Presley. ¡°Todav¨ªa tengo muchas cosas que mejorar. ?No voy a ser Elvis en tres d¨ªas!¡±, bromeaba ayer mientras desgranaba el trabajo creativo que hay detr¨¢s de sus montajes. No solo vale con resolver las piruetas y saltos, sino que tiene que mezclarlo con la interpretaci¨®n art¨ªstica, uno de los puntos fuertes de su patinaje. Descart¨® que vaya a incluir un cuarto cu¨¢druple, tipo bucle, en su programa largo, como s¨ª har¨¢ Hanyu para intentar recuperar el trono. Prefiere ser conservador y mantener un ejercicio limpio.

Fern¨¢ndez repas¨® su d¨ªa a d¨ªa en Toronto, donde se entrena a las ¨®rdenes de Brian Orser. ¡°No salgo de fiesta en Canad¨¢¡±, asegur¨®. ¡°Lo mejor que tiene mi grupo de amigos, del patinaje y de la zona donde vivo, es que nos tratamos todos igual. He tenido momentos dif¨ªciles y mis amigos tambi¨¦n. Lo mejor es que estamos ah¨ª cuando nos necesitamos¡±. ?Y tambi¨¦n mir¨® m¨¢s all¨¢ de los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno de 2018 en Pyeongchang, el ¨²ltimo gran titulo que le falta. "En este deporte la edad no te da mucho m¨¢s. Tengo 25 a?os, ir¨¦ a los pr¨®ximos Juegos, en Corea, y despu¨¦s tendr¨¦ que hacer un estudio de si quiero seguir un a?o m¨¢s o cuatro. Seguramente lo deje", asegur¨®.?

Consciente del gran impulso que sus triunfos le han dado a su deporte, el campe¨®n expuso su preocupaci¨®n por conseguir m¨¢s recursos para que en el futuro salgan m¨¢s patinadores como ¨¦l. "Mis padres tampoco ten¨ªan una econom¨ªa boyante cuando empec¨¦. Tuvieron que trabajar extra para que yo estuviese patinado. Si yo soy campe¨®n del mundo y me cuesta conseguir patrocinadores, imag¨ªnate lo que le cuesta a una federaci¨®n o a una pista de hielo", argument¨® el patinador, que anunci¨® que est¨¢ creando una agencia de eventos, ayuda al deportista y a las pistas de hielo para que puedan poner las horas de hielo m¨¢s baratas y que los padres puedan pagar menos.

Las preguntas de los lectores sacaron el lado m¨¢s humano de un deportista que puede parecer un aut¨®mata sobre hielo, pero que se sonroja cuando le preguntan por sus amistades, que se ha comprometido a intentar dejarse un tup¨¦ como Elvis, que niega que sea un tard¨®n en el vestuario como dice su hermana, al que le emocionan los elogios y consejos de Plushenko, legendario patinador ruso, y que no se enter¨® ni de una palabra aquella vez que fue invitado a un programa de televisi¨®n en Jap¨®n junto a su novia.