De Croacia a Argentina, ida y vuelta, por la Copa Davis
El padre de Daniel Orsanic, el capit¨¢n del equipo argentino, naci¨® en Croacia y emigr¨® a Argentina tras la Segunda Guerra Mundial
La de los Orsanic es una historia m¨¢s, como la de miles de inmigrantes europeos que, a lo largo de los 30 a?os que abarcaron la Primera y la Segunda Guerra Mundial, navegaron con sus sue?os rumbo a Argentina. Su desenlace es, sin embargo, muy distinto, porque ninguno ha regresado a Zagreb. No hasta ahora. Y el que lo hace es el que no naci¨® all¨ª. El hijo, que regresa como si a su padre o su abuelo croatas se les hubiera olvidado algo, es Daniel (1968, Buenos Aires), el capit¨¢n argentino de la Copa Davis. Como si la historia volviera a poner las cosas en su lugar, buscar¨¢ desde este viernes volver a Argentina con un trofeo que el pa¨ªs no ha conseguido nunca. Lo conseguir¨¢ si vence a Croacia en el Arena Zagreb, a lo largo de este fin de semana.
Branko Orsanic (1929, Osijek, Croacia) dej¨® Zagreb a los 15 a?os junto a su familia. Pas¨® tres meses en un campo de refugiados en Austria y luego se qued¨® en Italia por tres a?os. En 1948, a los 18, zarp¨® en un enorme barco petrolero hacia Buenos Aires. "Se llamaba Tucum¨¢n", recuerda. Su padre era diplom¨¢tico en Croacia y en Buenos Aires debi¨® comenzar a trabajar de alba?il. Branko, que en su tierra natal jugaba a la pelota paleta, comenz¨® a probar con el tenis. No fue hasta 1962 cuando se hizo profesor. Lo conoc¨ªan en todos lados, pero ¨¦l ense?aba en Arquitectura, un club de Agronom¨ªa, un barrio de clase media de Buenos Aires.
"Al principio me mov¨ª por los ambientes croatas de Buenos Aires", comenta en el club Arquitectura, su segunda casa. "Mucho no me gustaba, ellos son muy alegres, pero yo no soy para comer y tomar y ese tipo de cosas", reflexiona, mientras pide una taza de caf¨¦. "Decile que es para Branko, van a saber c¨®mo hacerlo", dispara. Arquitectura decidi¨® homenajearlo y por eso, la cancha n¨²mero tres del club lleva su nombre. "Y eso que todav¨ªa vivo", bromea. Mirta Barvarich, la presidenta, indica con certeza la importancia de Branko para la instituci¨®n: "Es el padre del tenis de Arquitectura", sentencia.
Cilic - Delbonis abren la serie, seguido de Karlovic - Del Potro
Este viernes desde las 14, el croata Marin Cilic, 6? del mundo, y el argentino Federico Delbonis, 41?, se enfrentar¨¢n por el primer punto de la serie. A contunaci¨®n, ser¨¢ el turno de Ivo Karlovic ante Juan Mart¨ªn del Potro. El dobles ser¨¢ el s¨¢bado a partir de las 15 y , por ahora, se medir¨¢n Franko Skugor y Ivan Dodig (Croacia), contra Leo Mayer y Guido Pella (Argentina). Eso puede variar, sin embargo, si los capitantes deciden incluir a Cilic o a Del Potro para fortalecer ese punto. El domingo, el gran partido de esta serie, Cilic - Del Potro, se jugar¨¢ en el cuarto punto desde las 14 y la final la cerrar¨¢n Delbonis y Karlovic. El sorteo del orden de los partidos se ha realizado este jueves en la Sala de Conciertos Vatroslav Lisinski, en el centro de Zagreb.
Su figura paterna se extiende, aunque ¨¦l prefiera disimularlo, a todo el equipo argentino de la Copa Davis, porque gran parte del cuerpo t¨¦cnico naci¨® en esas canchas porte?as, que ¨¦l a¨²n sigue frecuentando. Su hijo, el capit¨¢n Daniel Orsanic, es uno de ellos, pero tambi¨¦n los hermanos Guti¨¦rrez, Diego y Sebasti¨¢n, amigos de Orsanic desde peque?os en Arquitectura, tienen mucho que ver en este momento importante del tenis albiceleste. "Branko me llevaba a mi casa cuando termin¨¢bamos de jugar al tenis", rememora Patricia Matuk, la esposa de Diego Guti¨¦rrez, vicepresidente de la Asociaci¨®n Argentina de Tenis y, tambi¨¦n, socia de Arquitectura. All¨ª se conocieron todos y desde ese polvo de ladrillo, hace muchos a?os, comenzaron a construir el equipo que este viernes, con pocas figuras, bajo perfil y escaso favoritismo buscar¨¢ la primera Ensaladera de su historia.
Con un acento que a¨²n delata su pasado balc¨¢nico, Branko reflexiona: "Vos no esper¨¢s a que algo va a suceder en la vida. Nunca pens¨¢s en lo que va a suceder, o no. Ellos trabajaron y se destacaron. Estaban ah¨ª y los eligieron. A nadie se le ocurre decir 'yo quiero estar ah¨ª'. No haces las cosas a prop¨®sito. Suceden". Para Orsanic padre, la clave de todo est¨¢ en el trabajo en equipo. "La Asociaci¨®n Argentina de Tenis cambi¨® mucho con la llegada de Diego Guti¨¦rrez y atr¨¢s vino mi hijo, y luego Sebasti¨¢n, que es el coordinador de los equipos juveniles". "Hay una idea en com¨²n entre los j¨²niors y los jugadores profesionales", explica Matuk.
Branko Orsanic no regresar¨¢ a Croacia. Ver¨¢ el partido en su casa, tranquilo, junto con la madre de los Guti¨¦rrez, que es como de la familia. "?A vos te parece que mi hijo, que es el capit¨¢n del equipo se tenga que ocupar de m¨ª si tengo alg¨²n problema?", se pregunta ret¨®ricamente.
Mientras, Arquitectura, en el coraz¨®n de Buenos Aires, ser¨¢ una fiesta. "Todos vienen con banderas de Arqui y de Argentina", cuenta la presidenta Barvarich. Para el club es una revoluci¨®n pensar que tres socios que a menudo almuerzan all¨ª los fines de semana hayan entrado ya en la historia del tenis argentino. "Y Daniel dej¨® de jugar alrededor de los 13 a?os. Se fue a jugar al f¨²tbol y volvi¨® despu¨¦s de varios a?os a darle m¨¢s en serio", cuentan. Tras ellos, se convirti¨® en un gran doblista aunque nunca pudo sobresalir en el circuito ATP de singles. El domingo, si el destino, Del Potro, Delbonis, Mayer y Pella, pueden y quieren, ser¨¢ el primer capit¨¢n argentino en levantar la Copa Davis. Su padre estar¨¢ observ¨¢ndolo ansioso y con alguna prenda blanca y celeste, aunque prefiere ser cauto, como su hijo y sus jugadores, que ganaron todas las series de visitante y sin partir como favoritos. "No voy a decirles hasta ma?ana porque tengo 87 a?os", se despide.
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