Paul Elvstr?m, leyenda de la vela ol¨ªmpica
El regatista dan¨¦s fue el primer deportista en lograr cuatro oros ol¨ªmpicos consecutivos
Paul Bert Elvstr?m, leyenda de la vela ol¨ªmpica que logr¨® cuatro oros consecutivos, falleci¨® el pasado mi¨¦rcoles en su casa en Hellerup, al norte de Copenhague, a los 88 a?os. Dan Ibsen, director ejecutivo del Royal Danish Yacht Club, comunic¨® su muerte.
El dan¨¦s marc¨® una ¨¦poca en la historia de la vela internacional, donde destac¨® en la clase?Snipe, esa que pare ¨¦l era imprescinible conocer para poder dominar el arte de navegar. Elvstr?m domin¨® plenamente las pruebas mundiales durante d¨¦cadas y consigui¨® hacer evolucionar la vela deportiva al introducir m¨¦todos de entrenamiento y de navegaci¨®n nunca antes vistos. Preparaba concienzudamente cada regata por medio de una rigurosa preparaci¨®n de los aspectos t¨¦cnicos y f¨ªsicos tanto en tierra como en el agua. Desarroll¨® la t¨¦cnica de echarse hacia atr¨¢s y sacar el cuerpo del barco? -hasta permanecer casi paralelo con el agua- para ganar estabilidad y obtener mayor rendimiento de las embarcaciones. Este m¨¦todo fue r¨¢pidamente copiado y hoy es una posici¨®n empleada habitualmente en competici¨®n.
El regatista nunca hablaba de sus innovaciones sino que se presentaba directamente en el campo de regatas con ellas para causar desconcierto entre sus rivales, que no entend¨ªan c¨®mo su barco era m¨¢s r¨¢pido que el resto. Para el brit¨¢nico Ben Ainslie, que en Londres 2012 igual¨® el r¨¦cord ol¨ªmpico de Elvstr?m, el dan¨¦s ¡°fue una inspiraci¨®n para cualquiera que haya puesto un pie en un barco de vela¡±.
40 a?os en la ¨¦lite
Elvstr?m naci¨® el 25 de febrero de 1928 en Hellerup, el mismo lugar donde ha vivi¨® toda su vida despu¨¦s de comprar la casa de sus padres. Apodado el great dane, su pasi¨®n por la vela comenz¨® en el Oresund, el estrecho que separa Dinamarca de Suecia. Su impresionante carrera se inici¨® en 1948 cuando, a los 20 a?os, gan¨® su primera medalla de oro ol¨ªmpica en la clase Firefly. El dan¨¦s continu¨® su dominio hasta convertirse en uno de los pocos deportistas que ha llegado a participar en ocho ediciones de los Juegos Ol¨ªmpicos. En sus m¨¢s de 40 a?os de carrera (1948-1988), fue el primer deportista en ganar cuatro medallas de oro individuales en otros tantos Juegos Ol¨ªmpicos consecutivos: la primera en la clase Firefly, en Londres en 1948 y las tres siguientes en la clase Finn, en Helsinki en 1952, Melbourne en 1956 y Roma, donde gan¨® su ¨²ltima medalla en 1960. Para entonces las presiones sobre ¨¦l hab¨ªan aumentado. Adem¨¢s de competir, hab¨ªa entrenado al rey Constantino II de Grecia en los mismos Juegos. Elvstr?m, que a¨²n no hab¨ªa cumplido los 33 a?os, decidi¨® posponer su carrera ol¨ªmpica y concentrarse en su familia y un negocio de vela, que hab¨ªa iniciado pocos a?os antes.
El dan¨¦s volvi¨® a competir en otras cuatro Olimpiadas, aunque sin lograr medalla. Treinta y seis a?os? despu¨¦s de su primer oro, se atrevi¨® a participar con su hija Trine en la clase Tornado (1984 y 1988), convirti¨¦ndose en el ¨²nico equipo padre-hija que ha participado en unos Juegos. A su palmar¨¦s ol¨ªmpico hay que sumar 11 medallas de oro conseguidas en siete clases de barcos diferentes en los Campeonatos del Mundo y 8 t¨ªtulos de campe¨®n de Europa. ¡°Fue uno de los m¨¢s grandes. Siempre ha habido un gran respeto por ¨¦l, y ¨¦l es uno de los motivos de que Dinamarca se convirtiera en una potencia en el mundo de la vela¡±, se?al¨® en un comunicado el presidente del comit¨¦ ol¨ªmpico nacional, Niels Nygaard.
La corona roja, todo un s¨ªmbolo
En 1954, puso en marcha su propia empresa, Elvstr?m Dinghy Sails. ?l mismo dise?¨® el conocido logotipo de la corona roja, que fue estampado en velas, m¨¢stiles y barcos alrededor del mundo y que a¨²n hoy sigue siendo el sello distintivo de la empresa. La compa?¨ªa se convirti¨® en l¨ªder en dise?o e ingenier¨ªa y es una de las mayores empresas fabricantes de velas de Europa. M¨¢s all¨¢ de los ¨¦xitos deportivos, la trascendencia de Elvstrom tambi¨¦n se debe a las ideas que puso en marcha, algunas de las cuales acabaron siendo parte del equipamiento habitual de un barco. Zapatos antideslizantes o un chaleco salvavidas menos voluminoso que los existentes en la d¨¦cada de los cincuenta. El legendario navegante tambi¨¦n dej¨® escritos varios libros y art¨ªculos sobre reglamento y t¨¢cticas de regata.
Elvstr?m fue elegido mejor deportista del siglo XX en 1996 por el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Dan¨¦s, y fue el primer representante del deporte en recibir la real orden de Dannebrog. Continu¨® navegando en sus ¨²ltimos a?os hasta que la enfermedad de Parkinson se lo impidi¨®.
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