¡°Los ¨¢rbitros pasamos miedo¡±
Los colegiados claman contra las agresiones y relatan incidentes, a menudo no denunciados por temor. Seg¨²n la Comisi¨®n Antiviolencia, aumentaron un 40% en 2015-2016 y un sindicato clandestino ha denunciado 24 solo en enero
¡°Durante la media parte vi que el partido se estaba calentando. Era un derbi. Solicit¨¦ que acudiera la Polic¨ªa Local. Se neg¨®. Lo derivaron a los Mossos. Cuando acab¨® el partido un jugador me agredi¨®, me dio una patada en la cabeza. Los Mossos, como si no estuvieran¡±. Lo cuenta un ¨¢rbitro catal¨¢n que en el momento de los hechos ten¨ªa 18 a?os. No desea hacer p¨²blico su nombre. Como muchos de los ¨¢rbitros consultados teme las posibles represalias. El ¨¢rbitro present¨® una denuncia. Un juez declar¨® culpable al agresor y le mult¨® con 156 euros, despu¨¦s de que el Comit¨¦ de Competici¨®n le impusiera una sanci¨®n de 15 partidos. Este es solo un ejemplo de las agresiones que a menudo padecen los ¨¢rbitros encargados de dirigir los m¨¢s de 20.000 partidos de f¨²tbol que se celebran cada fin de semana, en un deporte que ronda el mill¨®n de licencias en Espa?a.
¡°Genera inquietud el creciente n¨²mero de incidentes que tienen como objetivo preferente a los ¨¢rbitros, motivo por el cual la Guardia Civil est¨¢ trabajando intensamente en la l¨ªnea de mejora de su seguridad¡±, resume en sus conclusiones la Comisi¨®n estatal contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte. El informe sobre la temporada 2015-2016 registra un aumento de un 47% en los incidentes contra los ¨¢rbitros (78 incidentes en la campa?a 2014-2015 y 115 en la 2015-2016) y un incremento en los n¨²meros de partidos con incidentes: uno de cada 70 en la temporada 2014-2015 y uno de cada 57 en la temporada 2015-2016.
Los datos han sido elaborados con la informaci¨®n facilitada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad dependientes de la Secretar¨ªa de Estado (Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y Guardia Civil) y la Ertzaintza. Otro dato elocuente es que el 93,9% de los incidentes se han producido en partidos de f¨²tbol. Varios ¨¢rbitros han constituido un sindicato que ellos mismos reconocen como "clandestino" y que se ha dado a conocer, b¨¢sicamente, a trav¨¦s de una p¨¢gina en Facebook. En ella se anima a denunciar los incidentes y agresiones que sufren. La p¨¢gina publica v¨ªdeos de incidentes y m¨¢s de 500 publicaciones, de las que 400 corresponden a agresiones sufridas por los ¨¢rbitros durante los ¨²ltimos tres a?os, 24 de ellas el pasado enero.
¡°No he pitado un partido en mi vida donde no haya sido insultado¡±. As¨ª se expresa Pablo Fern¨¢ndez Monta?o, de 31 a?os, retirado del arbitraje hace unos meses. En gran medida, por lo sufrido en m¨¢s de ocho a?os dedicado a impartir justicia por los campos de Regional de Andaluc¨ªa. ¡°No me extra?a que se sigan produciendo agresiones. Es m¨¢s, creo que son pocas las que se denuncian en Espa?a. Esto no tiene remedio¡±, aclara Pablo. En su carrera como ¨¢rbitro ha hecho grandes amigos y ha aprendido a amar al f¨²tbol. ¡°El arbitraje te engancha, aunque tambi¨¦n es cierto que muchas veces piensas en si vale la pena todo lo que lo rodea. Somos muy pocos contra muchos¡±, afirma Pablo. En esos muchos, el ¨¢rbitro coloca a padres, aficionados, jugadores y t¨¦cnicos. ¡°Es un problema de formaci¨®n y de educaci¨®n. Est¨¢ permitido insultar al ¨¢rbitro, es algo normal. Si no pitas c¨®mo quieres se creen con derecho a todo. ?Y esto es un deporte!¡±.
No he pitado un partido en mi vida donde no haya sido insultado
Otro ¨¢rbitro de f¨²tbol, de 25 a?os y que dirige partidos de Primera Regional en Euskadi, ilustra su experiencia. ¡°Tengo un compa?ero al que le rompieron dos dientes de un pu?etazo. Sancionaron al agresor con dos a?os de inhabilitaci¨®n. A m¨ª, no han llegado a agredirme f¨ªsicamente. Pero me han empujado alguna vez y en un par de partidos me han llovido escupitajos de algunos espectadores. Insultos, por supuesto, los recibimos todos los fines de semana. Es algo que ya tienes interiorizado¡±.
Los ¨¢rbitros tienen una potestad que pocas veces son capaces de ejercer debido a la desprotecci¨®n con la que ejercen su labor. ¡°Hace poco tuve que expulsar a un padre porque desde la grada estaba diciendo barbaridades, insultos hom¨®fobos. Era un partido de juveniles y ah¨ª, especialmente, creo que la tolerancia debe ser cero¡±, se sincera un colegiado de la Tercera Catalana. ¡°Pero los insultos est¨¢n a la orden del d¨ªa. Al final lo tenemos como algo asumido. Lo sabemos y lo aguantamos. No puedes engancharte con todos¡±.
Pablo, el excolegiado andaluz, sufri¨® agresiones y hasta un intento de atropello que relata: ¡°Desgraciadamente, te acabas acostumbrando a los insultos, pero los oyes. De todo tipo. Pero es que todo es de pel¨ªcula cuando vas a pitar, por ejemplo, a un pueblo. Para empezar, tienes que dejar el coche en un sitio apartado del campo, para que no reconozcan tu veh¨ªculo y no tener problemas despu¨¦s del partido. Te pueden buscar, agredirte o hacerte da?os en el coche¡±.
El ¨¢rbitro y sus asistentes son los apestados en cualquier partido de f¨²tbol de Regional o de categor¨ªa inferiores. ¡°A m¨ª me han hecho de todo. Lo m¨¢s grave, quiz¨¢s, un intento de atropello de un futbolista despu¨¦s de un partido. Se qued¨® a un metro de m¨ª y mis asistentes cuando cruz¨¢bamos la carretera en busca de mi coche. Denunci¨¦, claro, pero no valieron como testigos mis asistentes. Hice un anexo al acta pues reconoc¨ª al futbolista. Creo que le pusieron de multa 30 euros¡±, explica Pablo.
Lo peor son los padres y el mal ejemplo que dan. Es incre¨ªble
¡°No creo que esto tenga soluci¨®n. Habr¨ªa que cambiar la mente de las personas. Mire, los peores son los padres. Es incre¨ªble ver su comportamiento en los partidos de sus hijos¡±, reflexiona Pablo. No obstante, el ¨¢rbitro abre una posible soluci¨®n a tanto insulto en el mundo del f¨²tbol. ¡°Hay Ligas de peque?os, como las que hace la Fundaci¨®n del Betis, en donde el ¨¢rbitro para el partido en el momento en el que se produce un insulto en la grada por parte de los padres. Me parece una buena iniciativa. No se debe insultar en un campo de manera sistem¨¢tica¡±, dice Pablo.
Felipe Guti¨¦rrez ha dirigido tres encuentros este fin de semana. Lleva varios a?os en el arbitraje y, afortunadamente, no ha sufrido ninguna agresi¨®n f¨ªsica. ¡°Eso s¨ª, no hay partido donde no te libres de un insulto. Es muy inc¨®modo arbitrar, hacer tu trabajo. En el f¨²tbol se asume que se puede insultar al ¨¢rbitro. Eso no pasa en otros deportes¡±, afirma. ¡°Conviene recordar que sin ¨¢rbitros no hay f¨²tbol. En el colegio de Sevilla hay 60 o 70 ¨¢rbitros menos que en anteriores a?os¡±, afirma.
¡°La soluci¨®n pasar¨ªa por plantarnos y dejar de arbitrar, pero eso es complicado. Es una cuesti¨®n de educaci¨®n, de preparar a la gente¡±, a?ade. Eso s¨ª, no espera que el problema lo arreglen sus superiores en el Comit¨¦ de ?rbitros o los organismos de las distintas federaciones. ¡°Los que mandan, y no me importa decirlo, no nos apoyan. Llevan 35 a?os en el poder y solo ponen sanciones econ¨®micas ante los violentos. Los que juegan sucio y los que agreden siguen jugando al f¨²tbol y no se toman medidas disciplinarias contundentes que nos amparen¡±, finaliza.
Juan Antonio ?lvarez ha pitado durante 25 a?os en los campos de f¨²tbol de C¨¢diz. ¡°No se han recrudecido las agresiones en el ¨²ltimo mes. Es que ahora se denuncian en las redes sociales y tienen impacto. Los ¨¢rbitros pasamos miedo¡±, aclara Juan Antonio. ¡°Esta tarde he acudido a un partido alevines y he escuchado la arenga del entrenador. ¡®Esto es una guerra¡¯, les ha dicho. Con estos preparadores no nos puede extra?ar que insulten a los ¨¢rbitros y se cree tensi¨®n en un partido¡±, a?ade. ¡°Arbitrar me ha dado muchas alegr¨ªas, pero es algo muy duro. No sabes c¨®mo puedes acabar¡±, concluye Juan Antonio, que sigue ligado al f¨²tbol, ahora como delegado del filial del C¨¢diz.
Una de las denuncias que aparecen en la p¨¢gina de Facebook del sindicato clandestino de los ¨¢rbitros es la agresi¨®n a los ¨¢rbitros en un partido de f¨²tbol sala por parte de los jugadores del C.D. Adra Milo de Almer¨ªa, de la Segunda Andaluza. El p¨²blico insult¨® al colegiado y a la comisaria de mesa con improperios sexistas tales como: ¡°Mesa, eres una zorra¡±, ¡°puta¡±. Los ¨¢rbitros denuncian que la Federaci¨®n Andaluza no entrara a valorar los insultos sexistas y catalogara los incidentes como leves.
La soluci¨®n pasar¨ªa por plantarnos, pero eso es complicado. Es una cuesti¨®n de educaci¨®n, de preparar a la gente
Marta Galego, una ¨¢rbitra de f¨²tbol de la Federaci¨®n Catalana, suspendi¨® en septiembre un partido entre el Valls y el Cambrils, de Segunda Catalana, porque un espectador le mand¨® ¡°a fregar platos¡±. Una vez expulsado el espectador, se reanud¨® el juego y el p¨²blico aplaudi¨® al tr¨ªo arbitral. Galego sigui¨® las directrices del programa de la Federaci¨®n Catalana, Cero insultos en la grada, que permite parar el partido hasta en tres ocasiones ya sea por insultos hacia jugadores, t¨¦cnicos o ¨¢rbitros y, si persiste el problema, suspenderlo.
¡°En Vizcaya tambi¨¦n se puede suspender el partido, pero una cosa es el derecho y otra el hecho¡±, tercia el ¨¢rbitro vasco de Primera Regional consultado. ¡°Se puede mostrar una tarjeta negra como advertencia. La segunda negra significa la suspensi¨®n. Ese tipo de tarjetas se aplican por agresiones verbales machistas, racistas, hom¨®fobas o xen¨®fobas en el f¨²tbol escolar. Pero la realidad es que las quejas de los clubes propician que el ¨¢rbitro se disuada a la hora de tomar ese tipo de decisiones. Hace tres semanas sali¨® una circular de la Vizca¨ªna que dec¨ªa que es obligatorio suspender el partido en esos casos. Es un marr¨®n para el ¨¢rbitro, que sufre lo que sufre en el campo¡±. Desde el sindicato clandestino se reivindica una implicaci¨®n de los dirigentes, ¡°ahora inexistente¡±, y m¨¢s ayuda y medios para que los ¨¢rbitros puedan desempe?ar su labor sin conflictos.
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