Simeone: ¡°Tengo claro por qu¨¦ en Champions tenemos m¨¢s opciones que en Liga o en Copa¡±

Hay veces que el f¨²tbol es m¨¢s que un fr¨ªo resultado. Resulta ser as¨ª cuando la realidad del marcador es superada, porque un equipo es capaz de convertir el juego en un estado de ¨¢nimo y en un sentimiento. Ese f¨²tbol sin ligaduras pizarreras, descarnado, de campo largo por la presi¨®n arriba, por inundar la hierba de duelos de uno contra uno, tiene mucho de f¨²tbol barrial, de ese reto de saber qu¨¦ es capaz de hacer cada uno con la pelota. Al Atl¨¦tico, obligado por el resultado de la ida, no le import¨® jugar esa clase de partido loco, a dos porter¨ªas, envuelto en ese fren¨¦tico vaiv¨¦n que depara de todo: ocasiones, goles, expulsiones en los dos equipos, penaltis fallados. Un partido de Copa con todas las letras. "En todo el partido vi opciones de pasar. Hicimos 35 minutos buenos. Mi equipo jug¨® con criterio, trat¨® de hacer da?o. Me voy con la sensaci¨®n de orgullo. Despu¨¦s de cinco a?os, seguir compitiendo as¨ª no es tan f¨¢cil. Una vez m¨¢s, ante circunstancias sorprendentes, mantuvimos el plan, tuvimos ocasiones de gol y pudimos ganar. Seg¨²n los an¨¢lisis siempre se ven las cosas que m¨¢s convienen para un equipo, pero s¨ª tengo claro por qu¨¦ en Champions tenemos m¨¢s posibilidades que en Liga o en Copa. No tengo duda", se?al¨® el t¨¦cnico rojiblanco en su repaso de un pol¨¦mico partido.

Simeone sostiene la teor¨ªa de que a los jugadores talentosos les gusta presionar arriba porque les retrotrae a la infancia, al gol rega?ado de las plazoletas en Espa?a y los potreros de Argentina. ¡°Roban y tienen cerca el arco para patear¡±, suele explicar muy convencido el t¨¦cnico argentino cuando se le pregunta por la presi¨®n alta.El Atl¨¦tico sali¨® dispuesto a buscar al Barcelona arriba tal y como ten¨ªa planeado. Convirti¨® los primeros 35 minutos en una descarga de electricidad emocional. Torres avis¨® al minuto y Carrasco empez¨® a firmar su desafortunada noche cuando tir¨® a romper contra el cuerpo de Cillessen, en una situaci¨®n que invitaba a meter una rosca rasa al palo largo. La expulsi¨®n termin¨® de rematarle.

En ese primer tercio de dominio tan aplastante del Atl¨¦tico, se vio a Messi defendiendo en la frontal del ¨¢rea. Mientras, en el banquillo del Barcelona, Iniesta parec¨ªa querer explicarle a Mascherano la soluci¨®n para romper las l¨ªneas de esa atrevida presi¨®n de su rival. Tard¨® el Barcelona m¨¢s de un cuarto de hora en provocar que su rival tuviera que defender replegado en su campo. "Nos toc¨® quedar fuera pero con la cabeza alta. Quedan tres meses fant¨¢sticos e igual podemos mantener esto que hicimos contra ellos esta noche y en el segundo tiempo del otro d¨ªa", reflexionaba Simeone, con la voz ronca, y esperanzado por lo que contempl¨®. El Bar?a fue superior en los n¨²meros. En el f¨²tbol cuentan los n¨²meros y en eso el Bar?a fue superior. Me hubiera gustado estar en la final y haber jugado mal. Pero soy entrenador y cuando no ganas me tengo que quedar con lo que tengo y lo que hemos hecho", prosigui¨® el t¨¦cnico rojiblanco.

Fue Messi, la primera vez que pudo encarar para un uno contra uno al borde del descanso, el que baj¨® al Atl¨¦tico a la tierra. Puesta a prueba la capacidad de reacci¨®n tras el varapalo, los jugadores de Simeone respondieron con un segundo tiempo orgulloso. Un gol mal anulado a Griezmann y un penalti, que ejecut¨® de manera horrorosa Gameiro, pudieron darle la eliminatoria al Atl¨¦tico.

Puede que los 45 minutos de la segunda parte del Vicente Calder¨®n y el partido de anoche hayan tenido el mismo impacto an¨ªmico en el Atl¨¦tico que una de esas series de victorias por 1-0 que tanto se han prodigado a lo largo de la era Simeone. El Atl¨¦tico est¨¢ fuera de la Copa, pero sale de ella inflado de autoestima. Las palabras de Simeone dan fe de ello: ¡°Me voy con una sensaci¨®n de orgullo, el equipo puso el cuerpo, el alma, jug¨® la eliminatoria con emoci¨®n, como la tienen que jugar los jugadores de Atl¨¦tico. Si fuera hincha, quisiera ver a mi equipo el pr¨®ximo domingo", cerr¨® El Cholo, que complet¨® su reflexi¨®n con otra alusi¨®n al arbitraje de Gil Manzano. ¡°Los ¨¢rbitros se pueden equivocar, igual que los jugadores. Pero a los jugadores se les aparta y a los ¨¢rbitros no s¨¦ si se les puede apartar¡±.