Laso, el hombre que cambi¨® la historia

Plet¨®rico en su modestia, Pablo Laso lleg¨® a la sala de prensa del Buesa Arena con el nombre de dos personas en la cabeza. Antes de reflexionar sobre la conquista copera, el t¨¦cnico madridista dedic¨® el triunfo a Axel Reyes, el hijo de Felipe, que naci¨® en las horas previas a la final ante el Valencia, y a Xabier A?¨²a, el hist¨®rico entrenador que le hizo debutar en la ACB. Despu¨¦s suspir¨® de alivio: ¡°Ha sido una Copa incre¨ªble, con tres partidos dur¨ªsimos. Nos han exigido al l¨ªmite¡±, explic¨® Laso antes de intentar analizar la fe de su equipo para sobrevivir a finales ag¨®nicos. ¡°Pod¨¦is llamar a Sergio Ramos para que lo cuente¡±, brome¨®. ¡°Nunca se gana por suerte. Esto es todo trabajo. Competir hasta el final y no bajar la cabeza no se consigue en un d¨ªa¡±, cont¨®.

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La Copa es el decimotercer t¨ªtulo de Laso en cinco a?os y medio en el banquillo blanco. La de Vitoria era la 17? final de 23 posibles. El hist¨®rico trayecto comenz¨® en 2012 en Barcelona, tambi¨¦n con Llull como MVP. ¡°Cuando lleg¨® este se?or empezamos a ir para arriba y empezamos a creer en nuestras posibilidades. ?l nos hizo jugar de una manera que nos beneficiaba a todos, nos impuso un estilo y nos dio mucha confianza. Es muy cercano, ha sido jugador. Nos dio el empuj¨®n que necesit¨¢bamos para sacar la calidad que ten¨ªamos y hacer un recorrido tan importante como el que estamos haciendo¡±, narr¨® un emocionado Llull con la red de la canasta al cuello.

Laso marca otro hito con la conquista de su quinta Copa, la cuarta consecutiva, algo que nadie consegu¨ªa desde que el Bar?a enlazara seis entre 1978 y 1983. Una trayectoria memorable en un torneo que al t¨¦cnico blanco le ha servido en este tiempo de catarsis, impulso y consolidaci¨®n. Con la primera, en 2012, el proyecto gan¨® credibilidad y aparc¨® las urgencias hist¨®ricas tras 19 a?os sin alzar el trofeo; con la segunda, la de la canasta de Llull en M¨¢laga 2014, los blancos devolvieron a su enemigo azulgrana el p¨®ster del triple de Soloz¨¢bal como imagen ic¨®nica del relevo de poder; con la tercera, en Gran Canaria, el Madrid sali¨® del div¨¢n tras la doble derrota europea en Londres y Mil¨¢n para volar rumbo al pentacampeonato; y con el cuarto t¨ªtulo en A Coru?a, los blancos extend¨ªan su dinast¨ªa en una temporada tortuosa y exigente que acab¨® en doblete. ¡°Creo en lo que hago, es mi manera de ser. En su momento le tuve que decir a mis jugadores que se dejaran de leches, que ¨ªbamos a ganar. Ellos entendieron lo que quer¨ªa y aqu¨ª estamos. Estoy m¨¢s orgulloso de ese trabajo que de los t¨ªtulos¡±. Palabra de Laso.