Los ¨²ltimos servicios del soldado Pepe

La primera voz que se escucha antes de cada calentamiento es la de Pepe. Juegue o no juegue, el central portugu¨¦s de 34 a?os, los ¨²ltimos diez con la camiseta del Madrid, es el que anima y da indicaciones. Capit¨¢n modesto y duro ¡ªas¨ª le definen en Valdebebas¡ª, tiene el mismo peso que Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo en el vestuario. Llev¨® el brazalete en el partido contra el Alav¨¦s y el s¨¢bado, apunta a dirigir la zaga con Ramos para recibir al Atl¨¦tico en el Bernab¨¦u. Ser¨¢ el ¨²ltimo derbi de Liga del portugu¨¦s, cuyo contrato termina en junio. No ha renovado. Seg¨²n el club, porque quiso estudiar otras ofertas. En enero le llegaron de China, pero tampoco ha terminado de firmarlas ni ha anunciado nada sobre su futuro. Pepe quiere jugar con continuidad para poder ir convocado con su selecci¨®n para el Mundial de Rusia del a?o que viene.

¡°No va a cambiar nada. Es un profesional y contamos con ¨¦l¡±, dice Zidane cuando le preguntan por el portugu¨¦s. Pepe es el central con menos minutos de la plantilla (1.393 por los 2.754 de Varane y los 2.381 de Nacho), pero la baja de Varane ¡ªtiene para mes, mes y medio¡ª, le abre de nuevo las puertas a la titularidad. Zidane conf¨ªa en su experiencia, veteran¨ªa y saber estar. Aquejado de algunos problemas musculares a lo largo de la temporada, Pepe, sin embargo, ha respondido en los partidos importantes, como en N¨¢poles.

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En el club siempre han valorado su compromiso. Es el primer central extranjero, adem¨¢s, que triunfa. Todos los dem¨¢s, empezando por un campe¨®n del mundo como Fabio Cannavaro, tuvieron problemas para adaptarse al f¨²tbol espa?ol y al Madrid. Pepe lleg¨® como un semidesconocido en verano de 2007 procedente del Oporto por 30 millones de euros. Un dineral que hizo torcer el gesto a m¨¢s de uno. La primera charla que tuvo, un par de d¨ªas despu¨¦s de aterrizar en Valdebebas, fue con Fernando Hierro, por entonces director de la Federaci¨®n. Comieron en la Ciudad de F¨²tbol porque Pepe pidi¨® conocer al que siempre ha considerado su ¨ªdolo. Emocionado, cogi¨® su camiseta firmada. En esa comida hablaron de t¨¢ctica y Hierro le explic¨® lo dif¨ªcil que es ser defensa del Madrid.

Despu¨¦s del cruce de cables y de la patada que le propin¨® a Casquero, por la que fue sancionado durante diez partidos, Pepe pidi¨® ayuda a un psic¨®logo para aprender a controlar las pulsaciones. La paternidad ¡ªtiene dos hijos¡ª le suaviz¨® mucho. La ¨²ltima tarjeta roja que vio fue en diciembre de 2011; y en un cl¨¢sico de enero de 2012 las im¨¢genes de su pisot¨®n a Messi dieron mucho de que hablar. Sus mejores temporadas las firm¨® con Ancelotti (2013-15). Cuando el t¨¦cnico italiano lleg¨® a Chamart¨ªn, el central quer¨ªa marcharse. Hastiado por c¨®mo hab¨ªan ido las cosas con Mourinho ¡ªle sent¨® despu¨¦s de que defendiera p¨²blicamente a Iker Casillas¡ª, se sinti¨® arrinconado. Ancelotti le pidi¨® que se quedara porque le necesitaba. Pepe se qued¨® y cerr¨® una de sus mejores temporadas. Por continuidad, liderazgo y presencia f¨ªsica.

Se perdi¨® la final de Lisboa por un problema muscular ¡ªle dijo al t¨¦cnico que no estaba al cien por cien y que era mejor que jugara alguien que s¨ª lo estuviera¡ª, pero junto a Modric, fue el que m¨¢s continuidad de rendimiento mostr¨®. Lo dicen tambi¨¦n las estad¨ªsticas de ese a?o: cinco goles y cinco asistencias. Con la camiseta del Madrid suma 333 partidos, 14 goles y 17 asistencias.