David Blatt, de topar con LeBron a guiar al nuevo rico

Tras conquistar de forma inveros¨ªmil la Euroliga de 2014 con el Maccabi, David Blatt se march¨® por la puerta grande a hacer las Am¨¦ricas y, en su primer a?o al frente de los Cleveland Cavaliers, se convirti¨® en el entrenador rookie con mejor porcentaje de victorias en la NBA (73%). Sin embargo, los desencuentros con LeBron James truncaron su andadura en la meca de la canasta en enero de 2016. Rumbo al primer t¨ªtulo de su historia, los Cavs alegaron ¡°falta de qu¨ªmica¡± en el vestuario para justificar una guillotina tan anunciada como inexplicada. ¡°Parece una locura, pero puedes ganar partidos durante la temporada regular y, sin embargo, empeorar. Desde hace tiempo est¨¢bamos en una din¨¢mica regresiva. En el vestuario faltaba esp¨ªritu y conexi¨®n. No pod¨ªa aceptar algo as¨ª. Mediada la temporada, creo que todav¨ªa podemos reflotar el barco¡±, argument¨® entonces David Griffin, director deportivo de los Cavaliers. Superada la incomprensi¨®n, Blatt se reenganch¨® con galones y cach¨¦ al baloncesto europeo. El megal¨®mano grupo Dogus, propietario del Darussafaka turco, le garantizaba un presupuesto de 30 millones de euros, una invitaci¨®n para competir en la ¨¦lite continental, y un lustroso contrato por dos temporadas a raz¨®n de 1,7 millones netos m¨¢s incentivos por curso.

En menos de siete meses, Blatt ha actualizado el ¨¦xito de su f¨®rmula. Con Wanamaker, Zizic, Clyburn, Wilbekin, Bertans, Anderson, el lesionado Slaughter y compa?¨ªa fraguando la mezcla de un nuevo rico con seis estadounidenses en n¨®mina; y con el hist¨®rico Ibrahim Kutluay en los despachos como director deportivo, el Darussafaka pas¨® el corte y se col¨® sobre la bocina entre los ocho aspirantes a la Final Four de Estambul. Por tercera vez en cinco a?os, Blatt aparece en el camino del Madrid de Laso rumbo a la Euroliga. En sus duelos ante los blancos esta temporada: victoria holgada en Turqu¨ªa (81-68) y goleada madridista en el Palacio (101-83). ¡°Tengo mucho respeto por David [Blatt]. Ha trabajado en muchos pa¨ªses y siempre ha sido capaz de transmitir su idea de baloncesto. Sus equipos siempre tienen alma¡±, explica Laso antes de iniciar la eliminatoria al mejor de cinco partidos (21.00, Movistar+).

En el recuerdo, el cruce de cuartos de 2013 ante el Maccabi, finiquitado con un contundente 3-0 para los blancos; y la final de 2014 en Mil¨¢n, resuelta en una claustrof¨®bica pr¨®rroga a favor del conjunto israel¨ª. En aquella edici¨®n, Blatt dio forma a su aura de genio de la pizarra. Campe¨®n del Eurobasket de 2007 y bronce ol¨ªmpico en Londres 2012 con Rusia, el t¨¦cnico, de 57 a?os, nacido en Kentucky y nacionalizado israel¨ª, se coron¨® a nivel de clubes con un trayecto trepidante.

En el playoff de cuartos, el Maccabi de Blatt derrot¨® al Armani (1-3) recuperando el factor cancha tras remontar 12 puntos en los dos ¨²ltimos minutos del primer partido de la serie. Y, ya en la Final Four, complet¨® una haza?a a contracorriente. En semifinales, Rice rindi¨® al CSKA con otra remontada febril, esta vez de 15 puntos en 11 minutos; y, en la final, 14 puntos del actual base del Bar?a sentenciaron en la pr¨®rroga al Madrid, que un d¨ªa antes hab¨ªa arrollado a los azulgrana (62-100). Los blancos se derritieron en el infierno amarillo que cre¨® la hinchada israel¨ª y su juego fantasista fue incapaz de escapar del laberinto dise?ado por Blatt. Aquel duelo fue uno de los tres ¨²nicos d¨ªas en los que Llull se qued¨® a 0 en los 155 partidos continentales que ha disputado con Laso.

¡°Hay ciertas similitudes con el Maccabi de 2014 porque el entrenador es el mismo, pero el Darussafaka es distinto a todo lo que puedes ver en la Euroliga. Es un equipo peculiar¡±, retoma el entrenador madridista. ¡°Juegan muy abiertos, son atl¨¦ticos y nunca se van del partido. En su ¨²ltima jornada de liga perd¨ªan por 17 y ganaron. Siempre vuelven. No nos podemos relajar¡±, desarrolla Laso en su an¨¢lisis. Los jugadores del Madrid repiten como un mantra la idea de no caer en ¡°las trampas¡± de Blatt. ¡°Siempre tiene equipos muy atl¨¦ticos, que apuestan por un juego muy abierto, de muchas posesiones y de mucho uno contra uno. En el ¨²ltimo partido acabaron jugando sin p¨ªvots. No podemos despistarnos con eso y perder nuestro estilo¡±, cierra Laso. En la frontera rumbo a Estambul aparece, de nuevo, Blatt.