El Bar?a, sin juego ni goles
La sequ¨ªa del tridente obliga a reiventarse a un equipo azulgrana que se ha quedado sin punter¨ªa despu¨¦s de renunciar a la influencia de los centrocampistas
Al Bar?a no le queda m¨¢s remedio que reinventar su f¨²tbol despu¨¦s de ser eliminado de la Champions. La derrota ante la Juve no significa necesariamente un fin de ciclo sino de etapa si se tiene en cuenta la manera en que ha evolucionado desde que apareci¨® Ronaldinho, el rey sol del Camp Nou, santo y se?a del equipo de Frank Rijkaard, fiel seguidor de la idea original de Johan Cruyff.
Apelaci¨®n no indulta a Neymar para el cl¨¢sico
El Comit¨¦ de Apelaci¨®n desestim¨® el recurso del Bar?a por la sanci¨®n a Neymar que le impedir¨¢ jugar el domingo en el Bernab¨¦u. El brasile?o fue sancionado con tres partidos por Competici¨®n despu¨¦s de ser expulsado en M¨¢laga. El club acudir¨¢ al TAD para lograr la suspensi¨®n cautelar y que Neymar pueda jugar en Madrid. El jugador, que rompi¨® a llorar tras la eliminaci¨®n con la Juve, afirm¨® ayer en Twitter: ¡°El llanto de hoy se volver¨¢ en alegr¨ªa ma?ana¡±.
neymar
La decadencia de aquel equipo, cuya cima fue Par¨ªs 2006, provoc¨® la llegada de Guardiola y la sublimaci¨®n del cruyffismo por la importancia concedida a los centrocampistas ¡ªXavi, Iniesta y Busquets¡ª, protagonistas de c¨¦lebres partidos como la final del Mundial de clubes de 2011. La salida por agotamiento de Guardiola, agravada por la traum¨¢tica p¨¦rdida de Tito Vilanova y el extrav¨ªo de Tata Martino, tampoco cerr¨® la etapa m¨¢s triunfal del Bar?a.
Los ¨¦xitos continuaron con la llegada de Luis Enrique, ganador de un triplete y de un doblete, despu¨¦s de una gran inversi¨®n en fichajes y de juntar a Messi, Luis Su¨¢rez y Neymar. Los goles sustituyeron poco a poco al juego, las ¨¢reas tuvieron m¨¢s importancia que la medular, hasta que el equipo se ha quedado seco ante rivales organizados como la Juve.
El Bar?a ya no se expresa a trav¨¦s del tridente de Luis Enrique despu¨¦s de que enmudecieran los volantes de Guardiola. El cambio de plan ya provoc¨® un dilema no resuelto: evoluci¨®n o involuci¨®n. El debate se ha acentuado porque la figura del director deportivo, Robert Fern¨¢ndez, tiene poco que ver con la de sus dos antecesores, Txiki Begiristain y Andoni Zubizarreta, y porque las directivas de Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu han ido siempre en la direcci¨®n contraria a la de Laporta.
La encrucijada es delicada ya que exige medidas de choque despu¨¦s de dejar pasar el tiempo desde Berl¨ªn 2015: Bar?a-Juventus. Hasta nueve azulgrana repitieron en la alineaci¨®n del mi¨¦rcoles ¡ªlas novedades eran Sergi Roberto y Umtiti por Alves y Mascherano¡ª mientras que por parte de los bianconeri solo se mantuvieron Buffon y Bonucci. A la directiva le toca intervenir con independencia del resultado de la Liga y de la final de Copa. El problema es que no se sabe qu¨¦ camino tomar¨¢ porque se desconoce su ideario futbol¨ªstico por m¨¢s que se abrace al recuerdo de Cruyff.
Hay, en cualquier caso, un punto de encuentro en los distintos entrenadores, desde Rijkaard hasta Luis Enrique: Messi. La mayor¨ªa vertebr¨® el equipo a partir de la posici¨®n asignada al 10. El rosarino se arranc¨® como 7 con Rijkaard, ejerci¨® de falso 9 con Guardiola, tuvo despu¨¦s una posici¨®n m¨¢s indefinida y resurgi¨® con Luis Enrique como centro neur¨¢lgico del equipo, punta del rombo con el dibujo en 3-4-3.
Messi no ha sido ajeno a la mayor¨ªa de las decisiones tomadas por los t¨¦cnicos en situaciones de compromiso: Guardiola empez¨® por descartar a Ronaldinho y Deco para despu¨¦s prescindir de Eto¡¯o. La partida del camerun¨¦s supuso la incorporaci¨®n de Ibrahimovic. La operaci¨®n fue calificada por Rosell como la m¨¢s ruinosa de la historia azulgrana porque el sueco no estuvo m¨¢s de un a?o en el Camp Nou. Y Luis Enrique supo recuperar al 10 despu¨¦s de una etapa gris cuando convirti¨® una pareja (Messi-Neymar) en un tr¨ªo: Messi-Luis Su¨¢rez y Neymar.
No parece que la intenci¨®n del consejo sea deshacer el tridente despu¨¦s de renovar a Su¨¢rez y Neymar y negociar el contrato de Messi. La intenci¨®n es sanear y reforzar el per¨ªmetro y la zona media con uno o dos laterales ¡ªun error estructural del presente curso¡ª, un volante y un delantero, adem¨¢s de repescar ¡ªni que sea para venderlo¡ª a Deulofeu. La inversi¨®n depender¨¢ del bistur¨ª de los responsables deportivos de la entidad, de si act¨²a de forma conservadora o agresiva, circunstancia que incluye la posibilidad de traspasar a jugadores notables como Arda. Las c¨¢balas son muchas desde que no est¨¢ clara siquiera la continuidad de Iniesta.
Valverde, favorito
Aunque el equipo envejece y su f¨²tbol declina, eliminado en tres de las cuatro ¨²ltimos cruces de cuartos de la Champions, desde el Camp Nou se insiste en la necesidad de contar con los tres delanteros, Piqu¨¦, Busquets e Iniesta. La cuesti¨®n es que el nuevo entrenador se podr¨ªa encontrar con la alineaci¨®n hecha, cosa m¨¢s f¨¢cil de asumir para Juan Carlos Unzu¨¦ que por Ernesto Valverde ¡ªhoy favorito¡ª, o por ejemplo Ronald Koeman.
El riesgo es m¨¢ximo despu¨¦s de que no hayan cuajado los fichajes de los dos ¨²ltimos ejercicios, j¨®venes que han asumido la suplencia sin competir con los titulares hasta que se ha ca¨ªdo el equipo en Europa. La directiva cometi¨® un error de c¨¢lculo que podr¨ªa repetir: apostar por promesas porque a los veteranos se les daba todav¨ªa mucha cuerda y quedarse sin clase media ni representaci¨®n de la Masia. La clave est¨¢ en el diagn¨®stico: c¨®mo quiere jugar el Bar?a para saber qu¨¦ jugadores necesita despu¨¦s de la irregularidad e inestabilidad mostrada ,asunto que inquieta a una parte de la hinchada, sabedora de que futbolistas como Kroos, Asensio o Isco acabaron en el Madrid despu¨¦s de la renuncia del Bar?a.
Hubo improvisaci¨®n y se perdi¨® sentido de equipo e identidad: el Bar?a ha dejado de ser el Bar?a y nunca se le puso cara del Madrid. Los pr¨®ximos actos del 25 aniversario de Wembley quiz¨¢ le ayuden a recuperar la memoria.
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