Monchi ¡®ficha¡¯ a Totti para su nueva Roma
El director deportivo anuncia que el gran capit¨¢n, que se retira tras 25 a?os en activo, ocupar¨¢ un puesto de directivo
En la curva sur del Estadio Ol¨ªmpico de Roma, antes de que sus aficionados la abandonasen por desavenencias con la directiva, sol¨ªa desplegarse una pancarta que rezaba: ¡°Nunca esclavos del resultado¡±. La idea proced¨ªa de la etapa en la que Luis Enrique se hizo cargo del equipo e intent¨® inculcar una filosof¨ªa parecida a la del Bar?a. El asturiano era la clave del progetto, el plan del nuevo propietario, el estadounidense James Pallotta (socio tambi¨¦n de los Boston Celtics), para relanzar al equipo con un scudetto en cinco a?os y un nuevo estadio. Seis a?os despu¨¦s, la formaci¨®n en la que ayer aterriz¨® Monchi no ha logrado ni una cosa ni la otra. La Roma est¨¢ tan acostumbrada a jugar bien, como a perder. Tras 465 millones millones de euros en fichajes, 6 entrenadores y tres directores deportivos, solo se mantiene fiel a su capit¨¢n y aquel lema de la pancarta.
Lo que se encontrar¨¢ Monchi en Roma es quiz¨¢ el equipo m¨¢s parecido al Sevilla que hay en Italia: potencial, gran afici¨®n y entrada y salida continua de jugadores. Solo faltan los t¨ªtulos, y para eso le han tra¨ªdo a ¨¦l. Ayer, en su primera rueda de prensa, el sevillano esboz¨® sus motivaciones. ¡°La Roma es un club con un margen de crecimiento sobre una base ya hecha. No empezamos de cero, hay un trabajo bien hecho de mi antecesor. Pero hay posibilidades para crecer e ilusionarnos¡±. Una base, ciertamente, que ya hubieran querido para s¨ª entrenadores de otras etapas.
El proyecto de Pallotta (la palabra progetto acab¨® en burla recurrente de los tifosi) se construy¨® mirando a los viejos ¨¦xitos. El club contrat¨® como director general a Franco Baldini, que hab¨ªa ocupado ese puesto cuando la Roma levant¨® su ¨²ltimo scudetto en 2001 con Fabio Capello. Con ¨¦l lleg¨® Walter Sabatini, un tipo tan brillante como controvertido, que exhibi¨® un perfil muy parecido al de Monchi: gran habilidad para descubrir el talento, pagar poco y vender caro. A los financieros del club les encanta: 373 millones de caja. Pero a los tifosi -y aqu¨ª la primera similitud con el Sevilla- les incomoda ver como cada verano sus estrellas hacen las malestas. Este a?o, en el escaparate est¨¢n Nainggolan o Manolas. Monchi, que lleg¨® ayer con la lecci¨®n aprendida, escurri¨® el bulto: ¡°No hay jugadores intransferibles. Pero el cartel de la Roma no ser¨¢ ¡°se vende¡±, sino ¡°se gana¡±.
La etapa de Luis Enrique no funcion¨®. Llegaron Pjanic, Osvaldo, Bojan, Lamela, Gago.. y hoy no queda ninguno. A mitad de marzo se despidi¨® del club en rueda de prensa. Pese a que hab¨ªa comenzado con mal pie con los totems del equipo, al final terminaron apoy¨¢ndole. De hecho, De Rossi (33 a?os) confiesa a menudo que fue el mejor entrenador que ha tenido en su vida y el d¨ªa de su despedida, Francesco Totti corri¨® a sentarse en primera fila. Y aqu¨ª el segundo gran problema que encarar¨¢ Monchi.
Il Capitano va camino de los 41 a?os y esta temporada apenas ha disfrutado de minutos con Spalletti. Gestionar el ocaso del gran Dios romanista y dise?ar la Roma postotti es quiz¨¢ el asunto simb¨®licamente m¨¢s delicado. Monchi aclar¨® ayer que el mito dejar¨¢ de vestirse de corto. ¡°Francesco empieza como dirigente. ?l es la Roma, y quiero que est¨¦ pegado a m¨ª. Con el 1% de lo que ¨¦l sabe sobre este club yo ya ser¨ªa muy afortundado¡±. Parece que a Totti le hubiera gustado seguir jugando, pero no tampoco es mal negocio aprender de alguien con qui¨¦n tiene una historia de fidelidad en com¨²n: Monchi ha estado 25 a?os en el Sevilla y el italiano, 25 en el primer equipo, 28 en total.
Pero ni siquiera est¨¢ claro que el entrenador, Luciano Spaletti, vaya a continuar. ¡°Si no hay t¨ªtulos, me voy¡±, dijo. Y esa es la primera gesti¨®n que deber¨¢ afrontar Monchi, que supuestamente estar¨ªa encantado de seguir trabajando con ¨¦l. Con el N¨¢poles a un solo punto, ya no est¨¢ claro ni que la Roma -que este a?o ha perdido todos los derbis decisivos con la Lazio, incluida la eliminatoria copera- vaya a quedar segunda, su gran especialidad en los ¨²ltimos a?os. Y en parte, cree la afici¨®n, se debe a esas idas y venidas de jugadores en la temporada estival. Al maldito mercato. Por eso ayer le preguntaron a Monchi si seguir¨ªa haci¨¦ndolo igual que en el Sevilla. ¡°Ah¨ª la estrategia era necesaria si quer¨ªamos luchar por los objetivos que nos plante¨¢bamos. Pero el problema no es vender jugadores, el problema es comprar mal. Y ah¨ª es donde tenemos que estar acertados. Pero ?usted cree que yo he venido aqu¨ª, dejando a mi casa, a no conseguir ¨¦xitos?¡±. Un lema alejado de aquella vieja pancarta de la curva sur.
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